psycologhist [hyunlix]

[7]

Después de que el castaño y el morocho se conocieran, organizaron una salida a tomar algo, ya que algunos años antes, los tres tenian una muy buena amistad, y volver a formarla les vendría bien a los 3. Asi que decidieron salir a un bar.

Pero tal vez no fue la mejor idea que podrían haber propuesto.

Ya habian llegado al bar, se sentaron en una mesa y pidieron algún trago.

El mesero les trajo vodka, el primero en empezar a tomar fue Bin.

Entre charla y charla, ya se había tomado una botella completa, mientras que los otros recien iban por la mitad.

Pidieron dos mas para cada uno, Félix pensó en no tomar tanto, pero igualmente continuó tomando.

Lo mismo con Hyunjin.

El problema es que luego de unas tres o cuatro horas, ya Changbin estaba borracho, hablaba cosas sin sentido y tenia la voz extraña. Aunque el decia que no, que solo con las tres botellas que se habia tomado seguidas, no podia haberse emborrachado tanto.

Y el par se reía de lo que decía. Pero ellos también estaban borrachos.

¿Que era lo peor que podría salir de esto?

Mm, tal vez tres chicos gritando cosas sin sentido en el parque.

–Ustedes creen que las ardillas dominaran el mundo? –Habló el morocho mientras se reía.

Los otros dos seguian riéndose, constantemente Bin decia cosas asi, a lo que ellos solo reaccionaban con risas, porque ni les daba tiempo a poder agregar otra cosa.

–Chicos creo que voy a– Dijo Félix en un tono raro, antes de vomitar todo a un costado y quedar sentado en un banco que estaba cerca.

Rapidamente ambos fueron a preguntarle si estaba bien, aunque al final decidieron irse para casa. Ya que los tres estaban bastante tomados, y seguir ahi solo provocaría que se enfermaran, porque hacia frio, o que terminaran durmiendo en el piso, cosa que ninguno de los chicos queria.

Hyunjin y Félix se fueron por un camino juntos, mientras que Bin se fue solo por otro lado, ya que no vivian por la misma zona.

Decir que si Bin se iba solo iba a ser un problema, sobraba, ya que era obvio.

A medio camino se sentó en el suelo y no queria levantarse, una señora de edad mayor le preguntó si necesitaba algo, pero el morocho le contestó que estaba perfecto, la señora noto el tono de voz que tenia, se notaba que estaba borracho, pero que podia hacer, se limitó a dedicarle una sonrisa y seguir su camino.

Poco rato despues paso un chico rubio, el chico se ofreció a llevarlo a su apartamento, le dijo que estaba bastante tomado como para estar a las 4 a.m en la calle, y solo. El morocho no pudo decir nada, solo se dejo ayudar.

¿Pero porque? Porque le vio cara conocida, tal vez un viejo amigo, tal vez no.

Ambos fueron hasta el apartamento del rubio, alli se presentaron, terminaron charlando unas horas, hasta que se acostaron a dormir, no sin antes decirle que cuando se sintiera mejor que lo llevaría a su casa, pero que mientras tanto se quedaría allí, el morocho solo asintió y se durmió.

Nunca imagino que ese fuera Jeongin, claro que no, solo vió una cabellera rubia que le ayudaba, una sonrisa linda que le hablaba, y unos ojos brillantes que le dió la oportunidad de dormir en su casa.

Y mientras ambos chicos dormían. Hyun y Lix estaban llegando a la casa del rubio, y por suerte esta vez su madre no los vio.

Ahora, Félix, estaba teniendo una lucha mental, ¿Porque? Porque no sabía si decirle al castaño que se quedara a dormir.

Le parecía buena idea, ya que era bastante tarde y demas, era peligrosos que fuera solo por la calle.

Pero por otro lado, tenía el miedo de que su madre viera a el y a su psicólogo, durmiendo juntos, hablando, pasando el rato.

Porque tal vez frente al mayor no hiciera nada, pero cuando estuvieran solos, seria un infierno. Golpes, gritos, no salir, preguntas, insultos. Todo el combo afectaria mucho a Félix.

Asi que, por esta vez, decidió no hacerle caso a lo que mas quería.

Se despidió de Hyunjin con un beso en la mejilla y un abrazo, para luego saludarlo mientras se iba, y entrar silenciosamente a su casa.

Una vez adentro, subió con cuidado las escaleras, se acostó, no sin antes cerrar la puerta de su pieza.

Ya estaba por dormirse, cuando se le ocurrió prender el celular. Y lo primero que vió, fue un mensaje del chico.

"Si, llegué bien"

"Buenas noches, descansa"

Porque tal vez, solo tal vez, le dijo que le avisará si llegaba bien, solo tal vez.

Le sonrió al celular y le dijo buenas noches, luego lo dejo en la mesa de luz y se durmió.

Hoy había sido un buen dia, se sentía bien, estaba feliz, habia estado con sus amigos, todo iba perfecto.

Incluso era raro para el rubio, que todo fuera tan bien, ya que, generalmente, dos por tres pasaban cosas malas, pero ahora todo iba bastante bien.

Igualmente, decidió no pensar en eso y disfrutar que por una vez en su vida, no pasaba nada malo.

Y mientras tanto, Hyunjin, estaba despierto mirando al techo, pensando en él, en el rubio.

Era extraño que le agradara tanto una persona, más bien, que le gustara, pero no lo pensaba aceptar, y que todo fuera perfecto con esa persona.

Incluso había conocido a un nuevo amigo, al morocho de ojos café, que últimamente había estado hablando con el y le cayó mucho mejor que al principio.

Todo iba bien, o eso creía.

Y porque digo eso? Porque sinceramente, no creía que todo fuera a seguir muy bien, no por mucho tiempo.

Hyunjin conoce el tipo de madre que tiene Félix, y que de hecho por eso se reencontraron, porque su madre lo mandó al psicólogo, solo por haberse dado un beso con un chico.

Chico el cual era el castaño, y recordaba muy bien ese momento.

Incluso recordaba cada frase que le había dicho:

"Jinnie, nos iremos juntos a casa, verdad?" Y la linda sonrisa que tenia por irse con el castaño.

"Espera, te tengo que contar algo" Y los nervios que se le notaban por hablar con él, aunque no podia decir nada al respecto porque sentia mariposas en el estómago cada que le decia algo lindo.

"Sabias que? Te quiero mucho" Y que luego de eso, se acercó con una sonrisa y le plantó un beso en los labios.

Y que luego de esos dias todo siguió normal, porque a ambos le había parecido totalmente normal haberse dado un beso.

Igualmente nunca se llegaron a decir lo mucho que se gustaban, aunque no lo hacian porque los dos tenian la idea de "Le gusta una chica, es completamente hetero"

Y que ambos se equivocaban.

Dios, como Hyunjin recordaba todo eso, como cada vez que hablaba con el rubio se le venian todos los recuerdos a la mente.

Solo lo recordaba porque en ese momento, Félix le importaba demasiado, y ahora, tambien lo hacía.

Pero ahora habian empezado todo de nuevo, pensando que la historia que habian hecho antes, ya no la podían continuar, y ahora, tenian una nueva.

Una con mas dificultades, con más responsabilidades, con mas problemas.

Igualmente la siguieron, y la van a seguir, porque creen que no va a pasar nada si la continúan.