「2」

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El día que el chico iba a ir llegó demasiado pronto.

— Le dijiste que es un experimento de una sola vez, ¿verdad? —dijo Tom.

Katya asintió, comprobando su reflejo en el espejo y cepillando un mechón de su cabello fuera de su cara.

— Sí, le dije eso a Tord. ¿Cómo me veo?

— Bien.

Se sirvió una copa y la bebió de un solo trago.

El timbre sonó.

Tom se tensó, pero obligó a su cuerpo a relajarse. Eran una pareja moderna. Tenía veintisiete años de edad, difícilmente era alguien nuevo en el sexo. Él y Katya habían estado juntos por dos años, y su vida sexual no era exactamente vainilla. Un trío era una de las pocas cosas que no habían probado. No había nada de qué ponerse nervioso. Nada.

Katya abrió la puerta.

Tom miró a Tord críticamente.

El tipo era definitivamente apuesto. Estaba tal vez una pulgada por debajo de los seis pies como unas tres pulgadas más bajo que Baji. Cuerpo de surfista, desordenado cabello castaño con extraños cuernos, grandes ojos color gris, mandíbula fuerte que parecía en desacuerdo con los labios llenos. Sí, él era guapo, pero la verdad sea dicha, Tom había esperado a alguien más apuesto. El tipo no era nada especial.

Y luego, Tord sonrió a Katya, revelando un par de hoyuelos.

Algunas personas tenían una bonita sonrisa. Algunas personas tenían una hermosa sonrisa. Y luego, había unos pocos afortunados que tenían una sonrisa como la que poseía ese chico. Transformaba a Tord de sólo guapo a impresionante cuando sonreía.

Al darse cuenta de que estaba mirándolo fijo, Tom hizo una mueca. Nunca había tenido una razón para quejarse por cómo se veía, las mujeres parecían amar la combinación de pelo castaño claro y ojos oscuros que era tan común en su familia, pero los Ridgewell tendían a parecer fríos e inaccesibles para la mayoría de la gente. Este chico prácticamente irradiaba calidez y carisma cuando sonreía.

Tord besó a Katya en la mejilla y se volvió hacia él.

Thomas se obligó a caminar hacia adelante y estirar su mano para un apretón.

— Thomas Ridgewell —estaba bastante impresionado de que había logrado sonar neutral y no como que él quería echar al tipo fuera.

El chico le dio la mano, su agarre firme y fuerte.

— Tord Larsson —su voz era profunda y baja. Los ojos de Tord parpadeaban sobre él antes de encontrarse con su mirada de nuevo—. ¿Estás seguro de que estás bien con esto?

— ¿Por qué no habría de estarlo?

— Te ves un poco tenso —Tord se encogió un poco.

— Es sólo que es la primera vez que estamos probando un trío —Katya interrumpió antes de que Tom pudiera decir nada—. Mi novio realmente está bien con esto —le dijo a Tord, sonriéndole. Entonces ella lo besó.

Tom se detuvo y lo miró, preguntándose cómo incluso se las arreglaría para tener una erección. Estaba tan lejos de excitarse, como era posible estarlo. Él no era de esos hombres que disfrutaban viendo a sus mujeres tener relaciones sexuales con otra persona.

Tord rompió el beso y lo miró por encima del hombro de Katya.

— Bueno, sólo para aclarar: no me pediste de unirme a ustedes porque sabías que soy bi, ¿verdad?

Tom tomó una inspiración.

— No me van los hombres —su voz salió más aguda de lo que él pretendía.

★ obsessed ── tomtordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora