Corazones Perdidos - Negan TWD

capítulo 6

Ha pasado una semana de mi llegada a este lugar. Después de tanto tiempo dedicándome poco más que a sobrevivir, comenzaba a recobrar costumbres del "mundo pasado", desde tomar una ducha caliente, hasta contemplar los detalles del paisaje. De a ratos lograba sentirme como si nada pasaría, como si la vida fuese completamente normal. 

A fin de cuentas, todo iba de maravilla. Poco a poco comenzaba a amigarme con algunos habitantes de la comunidad, hasta había aprendido unos cuantos nombres, si bien era algo tímida, la mayoría eran amables conmigo y eso facilitaba las cosas. Con Daryl me había hecho más amiga que con el resto. ¡Sí! Aunque no lo crean, descubrí que nuestro sentido del humor era bastante similar, y que a pesar de ser dos personas solitarias, era más divertido pasar tiempo juntos.

Al mediodía hacíamos una pausa de nuestras actividades para comer, era la comida principal del día (cuando se podía), y con suerte tomábamos algún té por la tarde. Ya se hizo la hora de volver a casa a almorzar. La mayoría de los internados ya habían recibido el alta en el transcurso de la semana, salvo uno de ellos que falleció, tenía una septicemia la cual no había forma de tratarla con los antibióticos que teníamos a disposición. Un grupo había salido a buscar el medicamento que necesitaba, pero cuando regresaron, ya era tarde.

—Te queda mejor esa sonrisa —Reconocí enseguida esa voz mientras iba camino a casa. El arquero se acercó a mi lado para ir a la par.

—Pues no te acostumbres demasiado —respondí bromeando.

—Y... ¿A qué se debe? —indagó con curiosidad, dirigiendo su mirada hacia mí por un instante, para volverla nuevamente al frente. 

—Solo pensaba... lo afortunada que soy de estar aquí —me sinceré formando media sonrisa en mi rostro.

—Vamos al bosque, a cazar —soltó después de un breve silencio cambiando de tema. Suponía que no le agradaba la cursilería. 

—¿Qué?¿Ahora? —contesté incrédula—Oh no, muero de hambre y no me fiaría de conseguir algo en el bosque —.

—Dudas de la puntería de un Dixon, ¿eh? —preguntó en tono desafiante.

—Tu lo dijiste —respondí riendo siguiendole el juego.

¡Aaaaaahg!

Un grito desgarrador se escuchó a lo lejos sacándonos de nuestra conversación. Cruzamos rápidamente nuestras miradas perplejas, antes de comenzar a correr hacia donde provenía el ruido. Los peores escenarios pasaban por mi cabeza.

¡¡Ayúdenmeee!!

Fue el último quejido que escuchamos antes de toparnos con al menos diez caminantes traspasando una de las grandes vallas caídas. Daryl me tendió un cuchillo para ayudarlo a detener este desastre. Hasta el momento no me dejaban portar ningún arma, pero creo que ya había pasado el período de prueba, ¿No?. 

Uno de los caminantes estaba mordiendo a la chica que estuvo gritando por auxilio. Me acerco rápidamente con el objetivo de detener al caminante, pero la cabeza de la muchacha es atravesada por la flecha de Daryl que pasó muy cerca mío. Inmediatamente me doy vuelta para mirarlo desconcertada. 

—Ya estaba muerta —espetó respondiendo a mi mirada de desaprobación. Pero era cierto, estaba literalmente comiéndole su cuello, no había forma de salvarla—ponte detrás de mi —ordenó para seguir combatiendo juntos el enjambre de caminantes. Yo obedecí e inmediatamente me puse detrás, mientras trataba de ayudar derribando los que se acercaban por los costados. Éramos nosotros contra cada vez más de ellos. Muchos de nuestros compañeros se habían ido de expedición en busca de suministros, y otros estaban haciendo intercambios en Hilltop, otra comunidad aliada. Esta situación era demasiado preocupante, no sabía si lograríamos resolverlo solos. Solo esperaba que no se eche a perder todo el esfuerzo que ésta comunidad había hecho, la paz que habíamos logrado, me convencía para mis adentros que solo sea un mal rato.