¿Sigues aquí? [hyunlix]

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Mes: 56. Cuenta atrás.

Después de llamar a la policía y ambulancia el castaño entró a casa una vez que ambos servicios llegaron. Estaba pensando en las palabras correctas para decirle que su madre había muerto pero no las encontraba.

- Mi amor, tengo que decirte algo. - Hyunjin se sentó en el sofá nervioso y con la atención del menor que estaba sonriendo por la película.

Nunca se iba a perdonar quitarle aquella sonrisa tan hermosa.

- Felix, ¿recuerdas el tiro de hace unos minutos? - el otro asintió y el mayor tragó fuerte - Era tu madre a la que dispararon.

El rubio negó sonriendo levemente esperando que fuese mentira pero al ver el rostro preocupado de Hyunjin supo que no lo era. Sus manos empezaron a temblar y le empezó a faltar el aire, una lágrima tras otra recorrían sus mejillas y el mayor le abrazo.

Su corazón paró de latir unos segundos quedándose sin aire. Se tragó las pastillas y se tumbó esperando tranquilidad. Mientras, su novio estaba preparando un té para intentar tranquilizarle un poco, sabía que los próximos días no iban a ser fáciles.

- Toma. - susurró dejando el vaso en la pequeña mesa frente al sofá - Lo siento.

Felix se sentó despacio y cogió el vaso empezando a beber un poco más tranquilo. Todo se estaba viniendo abajo y él no sabía que hacer, él no podía soportar tantas cosas, era imposible y quería rendirse.

La mente del menor estaba colapsando por momentos y una vez más acabó desmayado. Al no estar la señora Lee, Hyunjin entró en pánico después de mucho antes estas situaciones e intento reanimarle de cualquier forma.

Felix despertó en su habitación con un dolor de cabeza bastante fuerte y el castaño estaba a su lado acariciando su pelo. Recordó todo de hace unas horas y suspiró llorando de nuevo, nunca se iba a perdonar eso, podría haber salido a la calle pero no lo hizo y su mente empezó a machacarle con aquello.

Los días empezaron a pasar y los brazos de Felix acumulaban cada vez más cicatrices, estaban cubiertos de sangre la mayoría del día y algunos moratones en las piernas. Hyunjin no se daba cuenta ya que era invierno y solamente se dedicaba a mimar al pequeño.

En ese momento Hyunjin acababa de salir por la puerta para ir a comprar y Felix estaba deprimido.

Volvió al baño.

Uno. Dos. Tres. Cuatro. Cinco.

Mientras lloraba y la sangre corría por su brazo una vez más se miró al espejo deseando que todo eso acabase pronto y que su enfermedad acabara con él de una vez por todas. Se sentó en el suelo apoyándose en la puerta y soltando un largo suspiro intentando que las lágrimas no recorrieran sus mejillas.

Se sentía tan inútil, tan solo y tan estúpido que no podía pensar nada con claridad. Cuando se recuperó se levantó del suelo y limpió la sangre de sus brazos quejándose un poco sin darse cuenta de que Hyunjin entraría segundos después.

- Cariño, he comprado... - se quedó callado cuando vió a Felix de aquella forma y este tragó fuerte quedándose estático - ¿Por qué?

El rubio temblaba y lloraba, sus brazos ardían y su novio estaría enfadado con él por haber hecho eso. Agachó su cabeza notando como las manos de Hyunjin se pasaban por su cintura para abrazarle.

- ¿N-no estás enfadado? - preguntó el menor recibiendo una respuesta negativa por parte del contrario.

- Sé que es muy difícil para ti salir de esto cariño. - dejó un beso en su mejilla - Déjame curarte eso, por favor.

Mes: 45. Cuenta atrás.

Después de esos duros meses para Felix logró mejorar. No podían pagar su casa así que el padre de Baekhyun era el que pagaba mientras su hijo vivía con Felix y Hyunjin, eso era la peor mierda de todas.

El padre de Baekhyun también les visitaba de vez en cuando y reírse con su hijo mientras Felix era el encargado de hacer todo en casa, se levantaba a las seis con finalidad de terminar lo antes posible pero Baekhyun siempre lograba añadirle algo más.

- Eres un inútil, no sabes hacer nada Lee. - soltó el padre de Baekhyun y todo venía porque se había pasado un poco con la sal en la comida - Igual que toda tu familia por lo que se ve, tu padre se murió por no sé que mierda, tu madre se quedó embarazada de este por dinero y tú un sin futuro, ya veo por las calles.

- Lo siento, señor Choi. - hizo una reverencia con lágrimas en los ojos y recogió las cosas sin mirar a ninguno de los dos.

Cuando terminó en la cocina subió a su habitación cerrando la puerta y empezando a llorar buscando la atención del mayor para recibir un abrazo. Se sentaron en la cama notando al menor temblando y sus lágrimas recorriendo sus mejillas.

Felix pensó que él estaba bien, había dejado de depender de pastillas para sonreír y reírse y esos dos personajes se estaban cargando todo su esfuerzo, no se esforzó tanto para que un señor llegara y le dijera que no servía para nada pero se dejó pisotear.

- Felix, tienes que limpiar los baños, ahora. - la voz de Baekhyun hizo que la sangre de Hyunjin hirviera de enfado y dejó al menor en la cama para salir de la habitación.

- Limpialos tú con la lengua, deja de tratarle así, no se lo merece. - el castaño fue ignorado y agarró sus pelos, enfadado, empezando a respirar agitado.

Ese chico acabaría con Felix si no le paraba y era lo que menos quería. Felix no tenía la culpa de nada y siempre salía perdiendo, eso era lo peor de ver aquellas escenas, o ver al menor llorar eso dolía el triple.

Decidido, caminó a la habitación de Baekhyun y entró en esta analizandola y cerró la puerta sonriendo levemente.

- No te las voy a pasar más, Baekhyun... - susurró para sí mismo mirando los póster de aquella habitación, los cuadros, fotos, libretas, peluches...todo. No tenía en mente parar de romper las cosas de allí.