🔫 33

494 36 20
                                    

Tn y Akio caminaban juntos a casa tras las clases, no se habían reunido ella con su novio y él con sus amigos como siempre debido a que todos estaban con los exámenes de ingreso a sus preparatorias escogidas, por lo que eran los únicos sin nada que hacer.

– Pronto será la última con Koro-sensei... –comentó él, colocando dos cigarrillos entre sus labios para encenderlos.

– Sí...No tengo idea de qué hacer de mi vida –suspiró y tomó el cigarro que él le extendió.

– Ni yo –suspiró, soltando el humo blanco.– Yo sólo quiero tener un tiburón –hizo un pequeño puchero. Ella rió.

– Tonto –lo miró.– No puedes tener un tiburón de mascota, confórmate con el peluche que te regalaron mamá y papá. Recuerdo que era más grande que tú cuando te lo regalaron.

– Mide un metro y algo –rió.– Oye, amo a Neptuno, pero fue una real decepción, la más grande en mis cinco años de vida.

– ¿Realmente esperabas que mamá y papá llegaran con una enorme pecera con un tiburón?

– El bisnonno habría encontrado la forma de regalarme uno.

– Caprichoso –rió.– ¿Y si pones un restaurante bajo el agua como al que fuimos en Las Vegas? Podrías ver tiburones desde ahí.

– Yo quiero ir al fondo del océano y tú al profundo espacio –rió.

– Me tomaré una foto con un alien y te enviaré una postal.

– Entonces yo te enviaré una foto mía con el Kraken.

– ¿Recuerdas que de niño querías ser pirata como Jack Sparrow?

– Sí...

– Si te come el Kraken, no iré hasta el fin del mundo a buscarte.

– Estarás perdida en algún planeta, en Gargantúa o volando en el Endurance con un robot llamado Tars.

– Tonto –rió.– Si lo piensas...ambas muertes son terribles.

– Morir ahogado en el fondo del océano o tragado por un Kraken...o perderte en el basto espacio exterior hasta que se te acabe el oxigeno y te mueras. Uhm...Un apocalipsis zombie sigue pareciendo más divertido.

– Sí, podríamos romper cráneos y disparar a lo loco. Tal vez pueda coleccionar los Cuatro Jinetes del Apocalipsis.

Ambos rieron, divertidos.

– Ahh... –exclamó, estirando sus brazos.– Quiero galletas.

– Tenemos el molde para hacer galletas de tiburón.

– ¡Oh! –sonrió.– Buena idea. Haré galletas con Neptuno.

– Eres un niño –rió y abrazó su brazo.– ¿Me haces galletas también?

– Tú preparas el café.

– Trato.

– Hecho.

[Residencia Yamaguchi]

Los gemelos entraron a casa, quitándose los zapatos para ingresar.

– Estamos en casa –avisaron al unísono.

– Bienvenidos –saludó su padre, acercándose.– ¿Hm?

– ¿Hm? –exclamaron ambos.

Lázár entrecerró los ojos como si sospechara de algo, se acercó a sus hijos y extendió una mano con la palma hacia arriba.

Illegal 🔫 Karma AkabaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora