ʚ₍ᐢ. .ᐢ₎ɞ ❝Por un momento olvida que soy tú bebé, ahora, corrómpeme. Olvida que tengo alas, sólo piensa en qué ambos terminaremos entre la lujuria y el placer .❞
↳ Dónde el virgen e inexperto omega SuNoo, tiene unas enormes ganas de que su alfa lo c...
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Un descuento a su trajera de crédito lo hizo suspirar. Pero al pensar en la expresión de felicidad con la que SuNoo lo recibirá en casa hacía que valiera la pena, las noches de desvelo. Después de todo, unas horas extras como el secretario personal de su papá no era nada.
SungHoon sabía que si aguantaba un poco más. Podría demostrar que era un alfa fuerte y responsable, el cual podría llevar las riendas de la empresa familiar. El ya tenía sus estudios concluidos, es por eso que trabaja. Mientras su novio seguía estudiando la universidad.
Su relación comenzó cuando SungHoon estaba en su último año de universidad. El exquisito olor a flores y frutos rojos lo embriagó demasiado, su lobo, ㅡel cuál casi no daba señales de vidaㅡ despertó con unas enormes ganas de tomarlo y morderlo como su Omega de por vida. Después de eso investigo más sobre quién era el chico de cabellos rubios que lo cautivó.
Un día del año, durante la luna roja. Todos los cambia formas se reunían para estar en sus formas animales. Fue ahí cuando descubrió él era muy grande y monstruoso a comparación del pequeño conejito blanco. Jugaron toda la noche, era raro ver a dos especies completamente diferentes jugar y convivir tan bien como ellos dos lo hacían. Lo cuál solo significaba una sola cosa.
Eran destinados.
Por eso no era de esperarse que comenzaran un noviazgo. Cuando SungHoon termino su carrera, se mudó de su hogar. A un pequeño departamento. Para ese momento el padre del rubio se quedó sin empleo, la idea original era que SuNoo regresará a su hogar en Busan y encontrará un empleo allá. Pausaría sus estudios hasta que estuvieran económicamente estables.
Así que el propuso la opción de vivir con el, podría pagar la colegiatura y así sus padres no se presionarían en buscar trabajo. Él quería demostrar que muy aparte de verse como un lobo débil y sumiso. Podría cuidar y tratar de SuNoo tanto como solo él se lo merecía. Aparte quería estar con el veinticuatro horas al día. Saber que si llegaba a enfermar, tendría a su alfa para cuidarlo y mimarlo.
Esos y mil motivos más era por lo que todos los días, a las seis de la mañana se levantaba, besaba la frente de su pareja y salía a trabajar. Llegaba pasadas las diez de la noche para cenar o encontrar a su bolita de nieve dormida con una de sus viejas playeras de la escuela como pijama.
Esa noche al llegar a su hogar, vió que todas las luces estaban apagadas, menos la de su recámara. Zafando el nudo de su corbata caminó a paso lento hasta la puerta, esperando ver a SuNoo durmiendo como estrella de mar. Pero lo que encontró fue totalmente diferente.
Su novio sentado en medio de la gran cama usando un... ¿Baby Doll?.
ㅡSungHoonie, por fin llegaste.
Con que ese fue el descuento de su tarjeta.
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