Rescate

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CONTINUACION

Los hombres se arman y van a mirar la situacion, Hurrem puso a su hijo detras de ella y cerro la puerta con la esperanza de que no los encontrasen, no sabia si estos hombres tenian mas enemigos que pudieran hacerles daño.

Hurrem: Kadri reza a allah para que nos mantenga con vida.

Kadri: Pero ma-

La sola mirada de su madre hizo suficiente para callarlo y que se pusiese a rezar, hasta que un hombre entro en el cuarto, al principio la mujer se asusto, pero reconocio que era uno de los hombres de su majestad, El Sultan Suleyman, conocido como el sultan de los siete mares y del mundo, hasta que el hombre pregunta:

Soldado de Suleyman: ¿Es usted la sultana Hurrem?

Hurrem: Lo soy o al menos lo fui, el sultan fue quien lo envio, ¿Cierto?

Soldado de Suleyman: Esta en lo correcto mi sultana, llevamos bastante tiempo buscandola.

El hombre le dedica una sonrisa muy reconfortadora que tambien la hace sonreir, ahi el hombre entendio la razon del nombre de la pelirroja, su sonrisa era indiscrebiblemente hermosa, mientras tanto el niño se escondia detras de su madre viendo secretamente al hombre que tanta curiosidad le causaba, el hombre pudo ver la cabeza del niño asomarse detras del vestido sucio y arrugado de Hurrem.

Soldado de Suleyman: ¿Y ese niño?

Entonces Hurrem volvio a la realidad, ¿Como le explicaria al sultan que habia tenido a uno de sus hijos en cautiverio?, ¿Como se lo explicaria a su propio hijo?, podrian acusarla de adulterio, de tener un hijo con alguien mas que no fuera el sultan, incluso podrian ejecutarla a ella y a su hijo, el sultan debia de acordarse que antes de irse estuvo con ella ¿No?

Hurrem: ¿Que clase de pregunta es esa?  es uno de los principes reales, el principe Kadri, hijo del Sultan Suleyman y mio, ¡ES NUESTRO HIJO! ¿Entendido?

El hombre la miro extrañado, hasta donde el tenia claro ninguno de los principes habian sido raptados y todos se encontraban seguros en el palacio, tambien le sorprendio la forma de responder de la mujer, tanto que le dio miedo, pero supo como disimularlo, asi que simplemente la saco del lugar para dirigirla a un carruaje donde la esperaba Sumbul aga.

Sumbul: Sultana es un alivio volver a verla sana y salva.

Dice para despues ver un niño muy curioso viendo los alrededores en los que se hallaban, Hurrem se percato sobre la mirada sobre el niño y solo le dijo:

Hurrem: No preguntes, solo sube al niño al carruaje conmigo.

Posteriormente suben los tres al carruaje, ya adentro el eunuco queria hablar pero antes de poder decir una palabra Hurrem le dice que no hable y que permanezca en silencio, fue un largo e incomodo y silencioso camino, hasta que llegaron a un lugar que era desconocido para Kadri.

KADRI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora