Hace dos horas que Kilian está en la enfermería. Daila me avisó hace cinco minutos que ya podía ir a verlo así que eso es Justo lo que estoy haciendo.Voy caminando hasta llegar a la enfermería. Nunca había estado por lo que me asombra lo grande que parece desde fuera. Aunque bueno la verdad es que todo en esta academia es asombroso.
Toco dos veces para ver si puedo pasar. Cuando me responden con un "adelante" abro la puerta y me paso.
Lo primero que veo es a una señora mayor de unos cincuenta años al lado de una camilla donde Kilian está tumbado. La señora me da una amplia sonrisa mientras que Kilian lo único que hace es mirarme mal y luego apartar la mirada.
Idiota. No sé ni para qué he venido.
–Bueno cariño supongo que tendrás ganas de hablar con tu amigo así que ya os dejo solos -la señora nos sonríe pero antes de salir por la puerta un comentario la detiene.
–Ella no es mi amiga. -las palabras de Kilian son duras. No tiene nada que ver con el Kilian que era cuando estaba herido.
Desde luego que ya está bien. Ahora está en su estado habitual.
–Bueno, sea lo que sea que sois os dejo solos. -la señora sale y cierra la puerta cumpliendo con las palabras que dijo anteriormente.
Ahora que solo estamos Kilian y yo en esta habitación me siento más incómoda. La mirada que Kilian me da, hace que me sienta juzgada.
–Bueno ya veo que estás mejor Kilian.
–Pues si ya lo sabes porque sigues aquí -se cruza de brazos y me vuelve a mirar mal.
Tan lindo
–Bueno de nada por preocuparme por ti después de la horrible situación en la que estabas -me acerco a su camilla –sabes prefería al otro Kilian.
Él me mira burlonamente pero con una pizca de maldad. Está claro que ya me vuelve a odiar.
–Pues que pena porque ahora solo existe este Kilian.
Desgraciadamente así es.
Y es entonces cuando me acuerdo. ¿Cómo se me podía haber olvidado algo tan importante?
–Kilian el profesor nos va a matar. No cogimos la pluma de búho -me llevo la mano a la cara.
–Tranquila, ya me ocupé de eso -le miro sin entender. –verás cuando desapareciste en el bosque yo fui a buscar la pluma. Es por eso que tardé tanto en encontrarte.
No lo puedo creer.
–¿Te adentraste al fondo del bosque tú solo? -asiente –me sorprendes.
–Por supuesto que te sorprendo. Yo soy impredecible no como otras -me mira con algo de desagrado dejando clara su indirecta.
Sophie vete. Deja que se pudra
Le miro mal y me levanto.
–Como veo que mi presencia no te agrada será mejor que me vaya -voy hacia la puerta y antes de salir me giro a mirarle –me alegro de que estés bien.
(****)
Son las 12:30 de la mañana. Después de ver a Kilian fui a preparar mis cosas para luego irme a clase. Ahora mismo me toca una de las asignaturas que menos me llamó la atención cuando vi el horario: lucha de espadas.
Y es que como indica su nombre hay que luchar, y por ende moverse y eso es algo que no me gusta demasiado.
Por lo que me ha contado Daila hay que pelear cuerpo a cuerpo y con espadas así que si hoy me sacan un ojo será por culpa de esta horrorosa asignatura.
Voy de camino cuando me choco contra alguien. Me doy cuenta de que es la misma chica de ojos azules que estuvo con Kilian en la clase de historia mágica. Donde asignaron los grupos para esa tarea.
Creo que se llamaba Kristel o algo así. No me juzguen soy mala para recordar nombres y más para los de aquí, ya que son todos muy extraños.
La chica me mira mal y acto seguido pasa por mi lado dándome un leve empujón el hombro. Se nota que no le caigo bien.
Paso de ella y llego hasta el aula. Ahí está Daila esperándome sentada y el resto ya está adentro.
La clase es más o menos como imaginaba. Es amplia y bastante bonita. Tiene una especie de colchonetas en el suelo, un mueble con material de lucha (incluidas espadas), y una especie de ring para luchar.
–¡Sophie! -Daila me saluda –si que has tardado, ¿te han secuestrado o algo?
Me río levemente. En estos días que llevo aquí me he dado cuenta de que Daila es una persona bastante humorista. Tiene una especie de humor raro pero maravilloso que hace que te rías en los momentos menos adecuados.
–Solo iba algo despistada. -pasamos a la clase y es cuando veo a los chicos.
–El profesor va a llegar enseguida -comenta Dante. –será mejor que nos coloquemos.
–Aquí solo se lucha, ¿verdad Daila? -pregunto. Espero no acabar sin una pierna.
–Sí. Aunque como tú eres nueva probablemente Tom te haga una prueba de iniciación.
–¿Una prueba de iniciación? -la miro extrañada –¿qué es eso?
–Bueno es...
Antes de que me pueda contestar el profesor entra por la puerta y seguidamente, Kilian también entra.
Genial, el amargado ya está bien.
–Bueno chicos todos a vuestros puestos –todo el mundo se coloca y Tom me mira –parece que tenemos a una nueva alumna entre nosotros. Así que como ya es tradición le haremos la prueba de iniciación.
Miro a Dalia asustada.
Kilian me mira burlón al igual que Cristel.
–Perdone señor -me acerco al profesor –¿pero que es exactamente eso de la prueba de iniciación?
–No te preocupes. Simplemente vas a tener que luchar contra el mejor de la clase para que podamos ver lo que sabes hacer. Así que tú tranquila.
Ah si claro. Ahora estoy mucho más tranquila.
–Bien. Como es de iniciación luchareis sin espadas. Cuerpo a cuerpo. Así que Sophie ponte en el ring.
Hago caso a lo que Tom me dice y voy hacia el ring y me meto dentro.
–Kilian te va a tocar luchar con ella. No te importa, ¿verdad?
–En absoluto profesor. Será todo un placer -me mira divertido. Por supuesto que será un placer para él. Maldito rubio.
–Genial, porque lo ibas a hacer de todas formas.
Kilian entra y se pone al otro lado del ring.
–Espero que sepas pelear Sophie. Porque sino vas a salir muy mal parada de esta.
Vale estoy bastante asustada.
–¡Empezad! -ordena Tom.
Kilian viene rápido hacia mí. Me da una patada en la pierna que hace que me caiga. Me levanto y le doy un puñetazo en el pómulo.
Kilian se queja y se enfada aún más. Me pega en la tripa, por lo que me vuelvo a caer al suelo. Me quejo pero Kilian sigue. Esta vez me coge el brazo y me lo tuerce. Me está haciendo bastante daño. Parece que no es consciente de la fuerza que está empleando.
–Kilian... para -me cuesta hablar y respirar. Me duele todo.
–Sophie no actúes. Estás perfectamente.
Vuelve a darme una patada en la pierna. Tom le dice que pare pero Kilian hace caso omiso a sus palabras.
Me levanto a duras penas e intento pegarle a Kilian pero ya era tarde. El dolor me gana y me desmayo cayendo al suelo completamente inconsciente.
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LA ACADEMIA DE MAGIA
FantasyLa vida de Sophie cambiará drásticamente al enterarse de que su familia no es tan normal como ella creía. Siempre pensó que los cuentos de hadas eran solo eso "cuentos", pero ¿de verdad sólo son eso? Adéntrate a este mundo de fantasía para averiguar...