Inside of the Beast- Harry Styles

Capitulo 44- ¿Lista?

-Yo también te amo, princesa- besó mi frente-. Y mucho- se fue acercando lentamente a mis labios. Pero se detuvo a reír antes.

-¿Que pasa?- pregunté.

-Siento que muchos mini-harrys nos observan- respondió y yo reí.

El se levanto del sofá y me tendió su mano, yo la cogí y nos dirigimos a las escaleras.

Tenía algo de miedo de lo que pasaría después, es decir, si hacía algo mal, porque... ¡Vamos! ¡Harry definitivamente no es virgen!

Estaba nerviosa, no quería que se espante por mi falta de experiencia. Ademas de mi físico, claro. Según me había contado Zoe, no había plástica en su escuela que no haya salido con Harry.

También me había hablado de la fama de "Dios" que tenía.

Entonces, escuché algo detrás de nosotros que interrumpió mis pensamientos.

-Harry...- susurro.

-Solo fue el viento- rió.

-Estamos subiendo desde un sótano, Harry. No hay viento.

Llegamos a la alacena y salimos a la sala principal, para luego, empezar a subir hacia el segundo piso.

-¡Boo!- grito Harry por detrás, y yo salté del susto.

-¡Tonto!- toque mi pecho-. ¡Me has asustado!

-Lo lamento, pero tienes que ver tu rostro.

-Ja, ja- crucé los brazos y fruncí el ceño aunque estuviera oscuro y no me vea.

-Vamos, no estas molesta... ¿O si?

No respondí.

-(tn)_____...

Escuché unos pasos con tacones y noté como a Harry se le abrieron los ojos como platos.

Yo no llevaba tacones.

-¡A que no me atrapas!- grité y empece a subir a toda velocidad.

Cuando iba corriendo por el pasillo, Harry me levanto por detrás y nos metió a ambos en su habitación que era la más cercana. El cerro con seguro y yo lo abrace.

-Vamos a morir- chille bajito, no vivía estas cosas paranormales desde los 12 años en primaria.

-Moriremos juntos- dijo encogiendo los hombros y reviso su teléfono.

-Ya no suena tan mal- respondí y él sonrió. Se separo cogiendo mi cara entre sus manos para acercar sus labios a los míos.

Ibamos a un mismo ritmo como de costumbre, pero al igual que hace 15 minutos, fue avanzando cada vez más rápido y sus manos fueron bajando a mi cintura, y hasta un poco mas allá. Yo solo mantenía mis brazos alrededor de su cuello y por momentos enredaba mis dedos en su cabello.

Él rápidamente me acorralo contra su armario, algo que hizo que este suene con algo de fuerza y reímos en mitad del beso. Sentí como sus manos se metían por dentro de la camiseta que llevaba y bajo de mis labios a mi cuello.

-Harry...- gemí involuntariamente y el se separó, yo abrí los ojos.

-¿Quieres que pare?- pase mi mano lentamente por su mejilla y negué con la cabeza.

Era hora.

Ambos sonreímos y el volvió a presionar sus labios contra los míos mientras se iba sacando el abrigo que llevaba. Cambiamos de lugar y ahora era yo la que tenía que manejar la situación, pero lo peor de todo era que no tenía idea de que hacer.