-Llegue a esta casa hace siete años exactamente- Dorothea junto sus manos y empezó a jugar con ellas-. Vine a este país por falta de trabajo y... Mis hijos se quedaron junto con sus abuelos ya que no consiguieron el pasaporte, me dolió mucho dejarlos, pero tenía que juntar dinero- ella bajó la cabeza-. Estaba sola en las calles de la ciudad, cuando de pronto encontré a Bennie en un callejón, era tan solo un bebé.
-No tienes que contarme si no quieres- toqué su brazo.
-Descuida- ella curvo los labios-. La mamá de Harry me salvo la vida, me acogió en esta casa, me dio comida, atención medica y un empleo. Es por eso que...
-Trabajando en su casa durante tantos años...
-Es una manera de pagarle todo lo que ha hecho por mi- continuó ella-. Desde su muerte, todo en esta casa es diferente.
-¡Mamá! ¡Mamá!- Bennie entró a la habitación.
-¿Que pasa?- Dorothea se acercó a él.
-El Sr.Styles me pidió que le lleves un par de Coca Colas.
-Bien- Dorothea se fue junto con él y al rato, Noah apareció en la puerta.
-Hola- le dije para que él sepa que estaba aquí.
-Hola de nuevo, (tn)____- él sonrió-. En este momento, estamos estudiando acerca de la historia de Nueva York y según me informó Harold, tu eres de ahí y...
-¿Él te habló de mi?
-Por supuesto que sí- asintió-. ¿Quieres acompañarnos y hablar acerca de tu maravillosa ciudad?
-Dudo que Harry me lo permita.
-Ignóralo, no suele tener visitas y por eso no se comporta como debe- él me tendió su brazo y yo lo cogí, tal vez quería que lo ayudara a caminar.
Ambos salimos de la habitación, caminamos hasta al final del pasillo y paramos frente a una de las puertas. Entonces entramos sin tocar y ahí fue cuando me quedé en una especie de shock. La habitación, no, la sala era como una biblioteca, el lugar era gigante y en el techo, colgaba un hermoso candelabro.
-Noah, tardaste mucho en...- Harry que estaba sentado en una gran mesa en el centro de la habitación, me miró y frunció el ceño-. ¿Qué hace ella aquí?
-Vamos, no hay nada mejor que escuchar la historia de Nueva York por una neoyorquina.
-Noah, tú naciste ahí.
-Lo sé pero jamás he visto la ciudad con mis propios ojos- respondió él.
-Eso no me importa, que se largue.
-Oye, oye, oye. Es mi invitada- dijo Noah-. Se quedará, Harold
-¡Deja de llamarme así!- grito Harry levantándose de la mesa, entonces se acercó a ambos y por un momento pensé que iba a lastimar a Noah, pero lo único que hizo fue coger su brazo y ayudarlo a caminar hasta la mesa.
-¿Y que?- Harry me miró-. ¿Vas a quedarte ahí parada?
Sacudí la cabeza y también me senté con ellos.
-Y bien, (tn)_____. ¿De que parte de Nueva York eres?
-Queens- respondí.
-Me han dicho que muchos hablan español en esa zona, ¿es verdad?
-Si- sonreí al recordar como mi papá había tratado de aprender ese idioma innumerables veces.
-Yo soy de Brooklyn y para calmar tus dudas, Harry es de Londres. Pero eso es lo de menos, dime. ¿Qué es lo que más te gusta de la ciudad?
-No lo sé, hay muchas cosas que me gustan.
-¿Sabes? Siempre me han dado curiosidad las obras de Broadway, ¿has visto alguna?
-Dudo que tenga el dinero suficiente como para pagar una entrada- dijo Harry cruzando los brazos.
-De hecho, si. Si fui a una hace años- respondí mirándolo con el ceño fruncido y Noah soltó una risita.
-Veamos...- Noah abrió un libro lleno de puntos y empezó a pasar su mano por las paginas que tenían unos cuantos puntos-. Nueva York fue fundada en el año...
Noah empezó a contarnos toda la historia de la ciudad y yo me dedique a observar a Harry, él no se perdía de ninguna palabra que Noah decía y se notaba que trataba de prestar mucha atención.
-Y bien, Harry. ¿Que podrías concluir acerca del texto que acabo de decir?- Noah cerró el libro.
-Que hay una gran cantidad de putas en Nueva York- respondió él y yo negué con la cabeza.
-¡Ring! ¡Incorrecto!- exclamó Noah-. ¿(tn)_____?
-Que... Nueva York es la segunda ciudad con más densidad de población de los Estados Unidos ya que tiene 8,4 millones de neoyorquinos en un área urbana de 830 kilómetros cuadrados y está compuesta de cinco boroughs.
-¡Te ganaste la lotería, Styles!- Noah levantó los brazos y Harry puso los ojos en blanco-. ¡Tienes una enciclopedia parlante en tu casa!
-De hecho, solo repetí lo que acabas de decir- reí bajando la cabeza.
-No, no tienes que ser tan modesta.
Entonces Bennie entró a la habitación con una bandeja y tres Coca Colas.
-Te tardaste mucho, niño- dijo Harry cogiéndolas.
-Es que no habían, mi mamá tuvo que ir a comprar.
-Oh, lo hubieras dicho antes, pudimos haber tomado solo agua- dijo Noah quitándose las gafas y noté que tenía los ojos increíblemente azules, y además, su mirada se mantenía al lado derecho-. Gracias, Bennie.
-De nada- él asintió y se fue dando saltitos.
-Y apropósito, (tn)_____. ¿Cuantos años tienes?- me preguntó Noah.
-Diecisiete- respondí.
-Eso quiere decir que aún estabas en la escuela...- dijo él y yo asentí, pero luego recordé que él no podía verme.
Soy una estúpida.
-Si, iba a graduarme en tres meses.
-Sería una pena que no te gradúes por estar aquí- dijo él-. Si quieres puedes acompañarnos los días que tenemos clases. Verás, yo tengo el titulo de profesor y podría darte...
-¡No, no, no!- le interrumpió Harry.
-¿Por que no?- Noah frunció el ceño.
-Porque simplemente no.
-Vamos Harold, no se va a quedar en su cuarto haciendo nada y perder un año de clases por nada.
-Pero...
-Harry, no seas igual de miserable que tu padre.
-No.
-Harry.
-Bien, dejaré que se quedé- él me miró y se levantó de su asiento-. Iré al baño.
-Gracias, Harry- le dije cuando paso por mi lado y entonces, se acercó a mi oído.
-Que te quede claro que lo hago por Noah y su sueño de enseñar a más de un alumno, no por ti- susurró y luego se fue.
-Discúlpalo, ama la soledad- me dijo Noah al rato.
-Sí, eso note- fruncí los labios-. Son muy cercanos, ¿verdad?
-Somos como hermanos, aunque claro, yo le llevo unos cuantos años.
-¿Desde cuando se conocen?
-Nunca le fue bien en la escuela, así que desde muy joven venía a ayudarle a hacer las tareas. Obtuve mi titulo y desde este año le enseño como profesor particular completo.
-Ah.
-Lo llegarás a conocer mejor y créeme, al principio te resultará un poco grosero, pero con el tiempo, descubrirás que puede llegar a ser una gran persona.
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Inside of the Beast- Harry Styles
Hayran Kurgu"La indiferencia hace sabios, la insensibilidad...monstruos." Él creía que lo tenía todo. Ella todo lo contrario. Él era un monstruo. Y ella logró domarlo.