Inside of the Beast- Harry Styles

Capítulo 10- ¿Tienes miedo, Dawson?

-¿Te sientes bien?- le pregunté parándome rápidamente del suelo.

-Claro que si, solo me arden los ojos, estaba fumando.

-Estabas tocando el piano- crucé los brazos-. Y también llorabas, es difícil tragarse el cuento de "me arden los ojos" hoy en día. ¿Que sucede?

-No te importa.

- Quizás si. 

-Lo único que has hecho desde que llegaste a esta casa es hacerme perder la paciencia, ¿Podrías al menos dejarme en paz un momento?

-Solo quiero ayudar- me acerqué a él-. Tal vez, tu...

-No puedes, nadie puede- me interrumpió-. Mi vida es una mierda.

-Si tan solo me escucharas- él volteó a verme-. ¿Necesitas a alguien con quien hablar? Quizá Noah o Dorothea podrían...

-Ellos están aquí porque mi papá les paga.

-Y también porque te quieren, recuerda que pueden irse en cualquier momento y no lo hacen. 

-Si pudieran lo harían.

Tal vez esta sea una mala idea, pero vale la pena intentarlo.

-Entonces habla conmigo- le dije y él vaciló. 

-¿Te falla algo en la cabeza, verdad?

-Me encuentro perfectamente- fruncí el ceño-. Y bien, si no quieres hacerlo, es tu problema. Solo te diré una cosa. 

-Adelante. 

-Todos tenemos problemas, no eres el único que cree que su vida es un infierno y si quieres comprobarlo, aqui estoy yo, secuestrada y seguramente en unos meses, muerta.

Giré sobre mis talones y salí de la habitación, me dirigí a la mía y al llegar, me senté en la cama mirando a la nada unos quince minutos hasta que escuché la voz de Harry en el pasillo. 

-Le diagnosticaron cáncer a mi mamá cuando tenía diez y murió dos años después. Fui a un internado durante tres años hasta cumplir quince y regresé a vivir con mi padre- dijo y yo me acerqué a la puerta para abrirla-. Hasta antes de su muerte, él le había repetido a mamá que siempre la amaría y... Después que morir, una semana para ser exacto, lo vi acostándose con otra mujer. Ella no merecía eso, ¿sabes?

Sentí como se me cayó el alma al escuchar lo que me acababa de decir, él estaba con los ojos rojos y me sentí sumamente culpable, él si que había sufrido mucho.

-Lo lamento, Harry.

-No me siento mejor, pensé que esto serviría- bajo la cabeza. 

-Tu... No puedes seguir viviendo aqui. 

-¿Y que pasaría si te digo que no puedo? Si lo hago, me matan.

-No lo harán si no te encuentran.

-No es así de fácil, tengo muchas cosas que hacer antes de irme.

-¿Que cosas?

-Eso no te importa. 

-¿Sigues con lo mismo? Claro que si. 

-Creo que tendrás que acostumbrarte al tipo de persona que soy.

-Lo dudo porque dentro de poco no me verás mas.

-Tan solo han pasado tres días desde que llegaste y pasaron tan lentos... Que créeme que serán los dos meses más largos de toda tu vida.

-No lo creo- arrugué la nariz-. Mi papá encontrará la forma de sacarme de aqui pronto o lo haré yo por mi propia cuenta. 

-¿Quieres apostar?- él se acercó a mi, me estaba empezando a poner nerviosa-. ¿O tienes miedo, Dawson?

-Apostemos.

-Si sales de aquí, antes de los dos meses, me quedaré con mi padre y lo convenceré para mudarnos a China y no fastidiarlos mas.

-De acuerdo...

-Pero si tu no sales en estos dos meses, seguiré tu consejo y me escaparé.

-Bien- encogí los hombros, era una buena apuesta. 

-Bien- él estrechó mi mano con fuerza.

-Bien- repetí mirándolo a los ojos. 

-Bien- él me soltó y luego se fue caminando hacia su habitación. 

-Harry- lo llamé antes que él entrara. 

-¿Si?

-Si te hace sentir mejor... Tampoco tengo mama- él no me respondió-. Ah, claro. No te importa. 

-En realidad, iba a decir que ya tenemos algo en común, pero supongo que tienes razón. 

Él entró a su habitación y yo a la mía. Entonces me puse a pensar un poco. Quería ganar y perder la apuesta al mismo tiempo, yo necesitaba salir para estar con mi papá y Harry necesitaba ser feliz. 

Esto era tan confuso.