Consecuencias - Hwang Hyunjin [+18]

Capítulo 1

Es difícil comenzar a contarlo todo desde donde lo dejé la última vez.

¿Debería dar una explicación de algo que ni yo misma sé describir?

No sé por dónde comenzar, por el principio supongo, pero es que desde la noche en la que decidí tomar la decisión de continuar con mi vida tratando de superar todo lo que había sucedido en el pasado... tenía como objetivo olvidar todo lo que se relacionara a ello, cosa que es imposible, pero trataría de hacerlo.

No sé tampoco cómo encontrar las palabras suficientes para expresar y explicar los cambios que surgieron en mi vida a partir del momento en el que me decidí por vivir una vida propia, mi vida, la vida que había dejado atrás por vivir como una farsante.

Es cierto. Mi nombre ahora no era uno que no me perteneciera, no debía estar escondiéndome, era Riven, era Riven Anson sin ningún tipo de vergüenza en esconder quién era, sin ningún tipo de remordimiento, sin ningún tipo de deseo imposible con el que soñaba por las noches como si fuera posible que se hiciera realidad. Y es que si tenía que comparar entre la Riven de hace cinco años y la Riven de ahora... no habían muchas diferencias por más raro que sonara, solo había algo en mi vida diferente y no me refiero al estilo, es a varias personas.

—¿Dónde dejamos esto?— escuché la voz de Mina desde la cocina y me acerqué quitándome mi abrigo para verla, tenía una enorme caja en su mano y cuando me acerqué para abrirla vi que habían un montón de muñecas vestidas de una manera gótica dentro de ella.

—Todavía estamos decidiendo dónde será la nueva habitación de nuestra pequeña problemas— sonreí quitándole la caja de las manos a mi mejor amiga— He pedido este día en el trabajo para poder, ya sabes, pasar tiempo con ella hoy y explicarle todo lo de la mudanza.

—Aún no me creo que te hayas graduado, hace poco, pero graduado...— ella me observó mientras se mordía las uñas como si de verdad estuviera nerviosa y no pude evitar soltar una sonrisa.

—Fue hace poco y estoy llena de trabajo, ¿qué crees?— comenzamos a caminar hacia uno de los pasillos donde observamos las puertas y abrí una en la que la iluminación era demasiada, la cerré de inmediato— Esta no le gustará.

—¿Cómo lo sabes?— preguntó.

Hice una mueca.

—Demasiada luz, le gusta pasar tiempo a oscuras debajo de las sábanas, no sé por qué.

—¿A quién me recuerda?— preguntó Mina esta vez no tan inexpresiva y sí rodando los ojos.

—Cállate.

La golpeé en el hombro y dejé la caja en una habitación que estaba al lado del que sería un pequeño estudio. Era muy necesario para mí tener un espacio en el cual trabajar y un estudio era el lugar indicado, la habitación era demasiado perfecta para ella, y si en las noches se sentía mal o despertaba por algo yo podría escucharla.

—Adivino, esta es la indicada.

Sonreí una vez más.

Dejé la caja ahí y salimos ambas hacia el salón, comenzaron a entrar un montón de hombres preguntándome dónde dejar cada cosa y es que estaba tan exhausta que primero dejamos las camas y muebles en sus sitios para descansar cuando tuviéramos un tiempo, yo y Mina agradecimos a los trabajadores por haber ayudado pero que ya no era necesario.

Y no lo era, era innecesario.

Cuando cerré la puerta y noté que estaba haciéndose demasiado tarde, alarmada me coloqué el abrigo para salir en busca de mi hija. Mudarse a un lugar nuevo no era nada fácil para ella y sabía que esto de pasar más tiempo de lo normal a su lado para ganarme un poco de su paciencia con el carácter que tiene es un poco sucio, es una jugada sucia, pero la situación lo requería demasiado.