Capítulo 5

310 50 21
                                    

Las palabras que yo misma dije resonaban en mi cabeza, no podía creer que las había dicho, no podía creer que estuviera confesando mis sentimientos hacia alguien.

Pero Félix era alguien que me inspiraba confianza, y si ambos sentíamos algo, aunque no se compare, solo tenia que dejarlo salir todo. ¿Qué podía perder?

El problema era que yo no estaba lista para tener algo, no estaba lista porque no sabía tener algo, no sabía cómo empezar algo. En el pasado las cosas sucedieron tan rápido y fue tan intenso que... no tuve tiempo de reflexionar sobre ello.

¿No podía ser feliz? ¿No merecía a un hombre que me amara por quien soy realmente?

No sé si Félix me ama, pero quizás sí le gusto realmente y no quiero tampoco estar todo el tiempo sin creer que alguien puede quererme. Él se acercó, y por un segundo pensé que me besaría, pero solo sujetó mi rostro con sus palmas.

—Podemos empezar algo.

Propuso.

Pero en ese instante, solo me vino a la mente que no podía apresurarme, pensé en Cassie, ama a Félix, ¿pero puede ser capaz de ver a su madre y la única familia que tiene con otro hombre, entregada a otra persona a parte de ella?, quizás debía consultarlo con ella primero.

Respondí.

—No.

Eso él no se lo esperaba, a juzgar por su expresión atónita y desconcertada. Quizás dio por hecho que al yo decirle que me gustaba, íbamos a comenzar con algún tipo de relación.

Buscó las palabras correctas para hablar conmigo. Entreabrió sus labios varias veces, sus carnosos labios.

—No voy a presionarte— casi que sonreí, ese era el hombre que me gustaba, suponía eso, suponía que la parte que me gustaba de Félix era esa, la parte donde me daba mi espacio y entendía cosas que... que quizás nadie antes fue capaz de entender— Pero puedes pensarlo, no voy a hacerte daño, y sea lo que sea que te haya sucedido con el padre de Cass...—acercó mucho más su rostro al mío— Intentaré ser mejor que eso.

No quería que fuera mejor que nadie.

Pero, pensé en todo sobre el pasado. Félix es muy maduro, pero no sentía lo mismo... no era capaz de sentir lo mismo que sentí hace cinco años cuando me paré por primera vez frente a ese hombre. Y me odié por ello, quise encerrarme en mi habitación y reclamarme a mí misma, ¿por qué sentía que extrañaba la mirada afilada y esa habitual manera de hacerme creer que era mucho más pequeña que él? ¿Por qué extrañaba las discusiones y las reconciliaciones después de palabras hirientes? ¿Por qué sentía que extrañaba el tacto y cómo mi corazón se disparaba al darme cuenta de que él intentaba arreglarlo todo después de ser un completo imbécil?

Un imbécil...

Félix no era un imbécil, y no estaba segura de si él lo era y aunque lo fuera estaba en todo su derecho.

La pregunta correcta era, ¿por qué estoy pensando en eso ahora?

—No estoy lista.

—Lo sé— silencio, después habló nuevamente— Pero han pasado cinco años, cinco años donde has estado sola, déjame cambiar eso, Riven.

—No lo sé.

—Puedo demostrarte, ¿necesitas que lo haga?, porque puedo hacerlo.

—Ya has hecho suficiente Félix.

—Quizás no.

—Ey...

—Di que sí.

Por mucho que quisiera decirle que sí, no podía, ¿qué pasaría si a partir de ahora pongo a un hombre en mi vida?, basándome en experiencias pasadas, los hombres que querían ayudarme aparentemente, terminaban desechándome o utilizándome de alguna manera, no tenía buena experiencia con eso.

Consecuencias - Hwang Hyunjin [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora