Capitulo 15

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CELIA:

Ha llegado el día en el que voy a tener que enfrentarme a los dos chicos de los que estoy enamorada. Sinceramente estoy bastante nerviosa y que mi madre este rondando por casa echandome la bronca por cosas tan simples como que no haya hecho la cama aún no me ayuda en nada.

-Mamá por favor, estoy muy agobiada y no me ayuda que tú me estés gritando, vale me ha quedado claro que tengo que hacer la cama.

-Ay hija, es que siempre te la dejas sin hacer y ya sabes que me gusta que la casa este ordenada, todas las zonas.

Como de costumbre ni siquiera se digna a preguntarme que me pasa, la verdad es que lo prefiero, no quiero contarle que estoy planteando montarme un poliamor, le daría un infarto.

-Cariño, yo me tengo que ir a trabajar, seguramente llegue por la noche, hazte lo que quieras para comer o si lo necesitas te dejo dinero para que tú hermano y tu os podáis pedir una pizza.

-Gracias mamá, ya me haré luego yo de comer.

-Vale yo me voy ya y que no se te olvide hacer la cama y poner la lavadora, adiós querida.

Como odio cuando me llama querida o cariño, me hace sentir rara, porque parece que se preocupa por mi cuando se nota que en realidad no lo hace.

•••

Ya son casi las dos y sigo intentando hacer unos macarrones, pero sinceramente no tengo ganas de comer, estoy haciéndolos más por mi hermano que seguro que si le dejo solo en la cocina quema la casa aunque sinceramente yo tampoco me quedo muy lejos.

Al final he conseguido hacerlos y mi hermano ni siquiera se ha dignado en venir a comer o al menos avisarme de que no iba a venir, a la próxima dejaré que se busque la vida no pienso volver a hacerle de comer para después tener que tirarlo.

•••

Son ya las cuatro y acabo de terminar de arreglarme para ir a la cafetería en la que he quedado con Marcos y con Orión, la verdad es que no estoy tan nerviosa como pensaba que iba a estar, sinceramente ayer estaba mucho más nerviosa, en fin soy rara hasta para esto.
Voy a salir ya o se me hará tarde.

Cuando llego lo que me encuentro es que Marcos ya ha llegado, aún quedan diez minutos para las cinco. Supongo que en eso de ser puntuales nos parecemos, siempre queremos llegar antes de la hora por miedo a que se nos haga tarde.

Cuando me acerco a la mesa en la que está, me empiezan a dar los nervios que hasta hace un momento no tenía, no entiendo porque me pongo nerviosa solo por esto, solo estamos aquí para hablar y arreglar las cosas.

-Hola Marcos, ¿Llevas mucho esperando? -le dije algo nerviosa.-

-No solo cinco minutos, me gusta llegar antes de tiempo a los sitios por si acaso.

-Ya a mí me pasa lo mismo, si no llego antes me agobio supongo que es una manía que compartimos.

-Imagino que si, bueno enseguida llegará Orión. ¿Quieres pedir algo mientras esperamos?

-No aún no, prefiero esperar.

La verdad es que ya solo faltaban cinco minutos y prefiero esperar a que llegue Orión, pero parece que no llega, aunque también es verdad que aún queda un poco para la hora.

Siguen pasando los minutos y se hacen las cinco pero Orión no llega, supongo que se habrá retrasado por algún imprevisto.

Las 17:10pm y Orión aún no ha llegado...

-Tal vez se ha echado atras y no va a venir... -dijo Marcos en ese momento.-

-No creo que Orión nos haya dejado plantados, sigamos esperando un rato más a ver si llega.

La verdad es que de los tres Orión parecía que era el que más claro tenía esta relación, no creo que nos haya dejado plantados, le habrá surgido algún imprevisto y por eso no ha llegado.

-Esta bien podemos esperarle, ¿pedimos algo? porque a lo mejor tarda un rato más.

-Claro porque no...

-¿Que quieres? Si quieres me acerco a la barra y pido lo de los dos, yo invito.

-Claro me parece bien, un granizo de fresa.

-Enseguida vuelvo.

La verdad es que si que ha llegado rápido con el granizado para mí y con un café solo para él. Miro el reloj y veo que son las 17:24pm y Orión aún no ha aparecido, se me hace raro que no haya venido, supongo que por lo que sea no ha podido venir, espero que todo esté bien.

Los minutos siguen pasando y Marcos y yo decidimos seguir con nuestra conversación y aceptar que no va a venir, ya lo resolveremos en otro momento, cuando vuelvo a mirar la hora son las 20:43pm y enseguida se va a hacer de noche, así que después de mucho insistir en que quería pagar mi parte Marcos ganá la mini discusión y paga el.

Insiste en acompañarme a casa porque en seguida se hará de noche y yo acepto.

-¿No crees que es raro que Orión no haya venido a la cita que tenía con nosotros? -le pregunte algo preocupada.-

-Bueno tal vez le surgiera algún imprevisto o simplemente haya decidido no venir, no te preocupes el lunes podremos volver a clase y desde luego que ahí no podrá esquivarnos. -dijo Marcos despreocupado.-

-Si imagino que sí.

Llegamos a mi casa y nos despedimos, yo tenía pensado solo darle un abrazo porque la cosa aún no estaba resuelta pero él se me adelantó y me dio un beso casto. Decidí mandarle un mensaje a Orión para saber si estaba bien.

-Orión ¿Estas bien?¿Por qué no has venido a la cita?
Enviado por Celia a las 21:04pm.

No hubo respuesta por su parte, ni siquiera me leyó, bueno ya lo haría antes o después o eso espero.

-Ya he llegado a casa, que duermas bien guapa <3
Enviado por Marcos a las 21:13pm.

-Me alegro, que descanses<3
Enviado por Celia a las 21:14pm.

En fin, me fui a dormir algo preocupada pero mañana sería otro día y ya hablaríamos de lo que pasó.

Tres son multitudDonde viven las historias. Descúbrelo ahora