La Ninja Lobo de Konoha

32.

Les cuento un secreto? Se viene la conclusión de este fic y publicación de la segunda parte, la cual se desarrolla en el anime de Naruto como tal, pero descuiden, no tardaré tanto en acabarla como este, sonara extraño, pero las estuve escribiendo en simultáneo para afinar detalles, entonces publicaré una buena avanzada de la segunda parte.

Como siempre, gracias por leer y acompañarme en todo este tiempo, gracias a esas 15 personas fieles y a las demás que fueron llegando con el tiempo, de verdad los aprecio mucho.

Tiempo después...

—¡Juuri, ya estamos retrasados para la misión! ¡dijimos que saldríamos hace veinte minutos! —la reprendió Kakashi mientras golpeaba la puerta del baño, sin embargo, ella se encontraba en un asunto mucho más importante.

Justo ahora, tenía formadas ante ella cuatro pruebas de embarazo, las cuales estaba esperando que dieran su resultado.

—¡Solo dame dos minutos, ya estoy lista, pero..!

—¿Te sientes mal? Si es así, puedo ir a dejarte al hospital y...

—¡Espera! —le pidió muy nerviosa.

—Solo dejame...

—¡No! —le interrumpió ella mientras se recargaba contra la puerta del baño, impidiéndole que la pudiera abrir.

—¿Qué te sucede? —le cuestionó él sobándose la frente, pues lo había golpeado con la puerta.

—¿Si te digo, prometes no enojarte?

—¿Qué hiciste?

—Hicimos... —dijo y miró las pruebas, que ya comenzaban a dar sus resultados—. Tengo casi dos semanas de retraso —susurró ella mientras abría la puerta y le enseñaba las pruebas.

—¿Qué? ¿es en serio? ¿estás..?

—¡Ni lo digas! —le interrumpió ella tapándole la boca—. Está bien, a veces olvido tomarme las píldoras o no usamos protección, pero... No, no quiero, no ahora, somos jóvenes y tenemos todavía un camino ninja por recorrer.

Kakashi quería reír por lo asustada que veía a Juuri, sin embargo, supo que si lo hacía, ella no tendría piedad con él en esos momentos, así que espero a que ella se calmara y se animó a echarle un vistazo a las pruebas.

—¿Sabes? Podrías habérmelo dicho y te hubiera apoyado, como dices, si sí, es algo que hicimos los dos —le dijo.

—Claro, y el hecho de que seas mi superior en ANBU y mucho más aún, que seamos miembros de ANBU los dos, no complica todo.

—¿Qué significa una raya? —le cuestionó, ella negó.

Kakashi suspiró y recogió las instrucciones del test de embarazo, luego de una breve ojeada, miró a Juuri.

—Ya, quita esa expresión, dieron negativo todas —le informó, Juuri estuvo a punto de llorar de felicidad—. Vaya, no pensé que tener un hijo conmigo fuera tan malo.

—¿Siendo ninjas extremadamente buenos y por lo tanto, muy buscados, no te suena mal? Además... En serio, aún no, no quiero cambiar mis kunais y shurikens por pañales y biberones, tengo aún un gran proyecto por delante —dijo, Kakashi rió levemente y tiró las cosas al cesto de basura, después de lavarse las manos, encaró a Juuri—. Antes de que te preocupes por estar embarazada, primero asegúrate de estarlo.

—Qué divertido, como tú no cargarías con los síntomas y el vientre enorme, burlate —le recriminó, él rió y se acercó a ella, envolviéndola en un abrazo, besó su frente.