La Ninja Lobo de Konoha

7.

Juuri se encontraba en uno de los campos de entrenamiento, estaba jadeante y cansada, ya habían pasado dos semanas desde la segunda prueba y, aunque estaba ansiosa por la tercera prueba, un sentimiento de malestar se gestaba en su interior.

De su mente aún no podía quitar la imagen de la tabla del torneo, no dudaba que su equipo pasara de ronda, pero eso significaba que ella se enfrentaría a Yukito, alguien que se había convertido muy pronto en su amigo.

—Hey, Juuri —la animó una voz a sus espaldas, ella se giró y vio que Obito caminaba hacia ella, Kakashi iba a su lado—, ¿Te vas a quedar mucho tiempo más?

—Eso planeaba, estoy entrenando y ustedes deberían de hacer lo mismo —respondió mientras secaba el sudor de su frente.

—¿Para qué crees que estamos aquí? —replicó Kakashi.

Esta era la primera vez que se veían luego de la prueba, era extraño para Juuri que de verdad Kakashi no se mostrara más agradecido por la ayuda que le había brindado.

—¿Dónde está Rin? —preguntó ella ignorando a Kakashi.

—Entrenando con nuestro sensei, parece que quiere prepararla para vencer a Yukito, por cierto, bueno, sé que Rin no es muy fuerte y no creo que tenga oportunidad contra él, así que ¿Podrías pedirle que no la lastime mucho?

—Un ninja...

—Me parece —interrumpió Juuri a Kakashi— que Yukito tiene muy bien entendido que Rin es apenas una niña y estoy segura de que hará lo posible por ganar y no lastimarla, así que descuida, no hace falta pedirlo.

—¡Gracias! Y, ¿Ustedes están nerviosos? Son los únicos que tienen oponentes foraneos.

—No —respondieron al unísono.

—Oye, tú, ¿Has obtenido información sobre ellos? —le cuestionó Juuri a Kakashi.

Él quiso no responder, pero aún así, se obligó a hacerlo, si era sincero, a esta niña le debía una grande.

—No mucho, solo que hacen más lucha cuerpo a cuerpo, deberás de ser rápida si quieres vencer a tu rival.

—Soy rápida.

—Claro —contestó con ironía—, de no ser por tu capacidad estratégica, estarías perdida como ninja.

—Y con esta capacidad estratégica, te logré quitar un pergamino, no lo olvides, además que te di uno.

—¡Nadie pidió tu ayuda!

—¡Tampoco te rehusaste!

Ambos niños estaban de pie uno delante del otro, Kakashi le sacaba unos treinta centímetros de diferencia, aunque tuvieran casi la misma edad, diferencia de meses, él era enorme comparado con Juuri.

—¡Bien! ¿Quieres algo a cambio? Te probaré que no eres tan veloz, prepárate —le advirtió.

Obito retrocedió ante la imagen de los dos niños preparándose para pelear.

—Pero, Kakashi, ella ya está cansada, ha estado entrenando desde antes que nosotros —trató de intervenir Obito.

—Un ninja debe de estar preparado para lo inesperado —sorprendentemente, Juuri le quitó las palabras de la boca a Kakashi, quien casi se encontró sonriendo.

—Solo taijutsu, sin armas —especifico él, Juuri asintió.

Sorprendentemente, casi de inmediato Kakashi atacó a Juuri y la sacó volando, Obito iba a detenerla, pero la niña logró girar en el aire y caer de pie. Se levantó con una mirada molesta.