Cap 8

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Alma buscaba a su hija, estaba enojada, se suponía que ese día Mariano le pediría matrimonio a Isabela y la lluvia tan terrible que provocaba su hija estaba arruinando el día, evitando que sea perfecto.

Alma: Dolores, ¿Sabes dónde está tu madre?

Le pregunto a su nieta, la cual negó con su cabeza, ya que apesar de todo su don tenía un límite.

Alma: Debe haber salido, Toñito

Esta vez se dirigió a su nieto menor, el cual la miro con atención.

Alma: Ve y dile a tu papi que salga a buscar a tu mami

El niño asintió y monto a su jaguar para ir con su padre, él también estaba preocupado, no era normal esa lluvia, unos minutos después Félix salió de casita para buscar a su esposa.

Alma: Aún no puedo creer que Pepa haga esto, se supone que hoy el sol debía brillar para que todo salga perfecto

Alma caminaba de un lado a otro totalmente molesta, en cuanto su hija llegará la regañaría.
Isabela se acercó a su abuela y tomo las manos de la señora mayor.

Isabela: Abuela tranquila, estoy segura de que esto no era la intención de mi tía
Alma: Tan linda mi niña, tan comprensiva con tu tía, pero ella debe entender que no puede estar arruinando todo

Justo en ese momento Camilo y Mirabel bajaron, encontrándose con la escena, Alma se acercó a la chica de lentes enojada.

Alma: Tú!! ¿Qué le hiciste a tu tía?!!

Camilo rápidamente puso a Mirabel tras el para protegerla de la cachetada que la joven estaba por recibir.

Camilo: Mirabel ha estado conmigo todo el día abuela, no me parece justo que la acuses de algo así

El chico sostenía con fuerza la mano de su abuela la cual lo veía sorprendida, Mirabel en cambio apretaba con fuerza la runa de Camilo.
La mujer mayor por un momento vio a su hijo y a su hija Pepa en sus nietos,  esa escena volvía a repetirse, ella recuerda perfectamente cuando un día se enfado con Pepa por provocar un huracán al enojarse con un chico, estuvo apunto de cachetarla cuando su hijo se interpuso y detuvo su mano de la misma forma en la cual Camilo la detenía en ese momento, Alma tembló al ver el mismo brillo que tuvo Bruno ese día en los ojos verdes de su nieto, con algo de miedo se alejó de los dos adolescentes.

Camilo la miro durante un momento antes de voltearse y tomar la mano de Mirabel para sacarla del lugar.

Ambos fueron a la cocina, Julieta al ver entrar a su hija temblando inmediatamente se acercó preocupada.

Julieta: Camilo, ¿Qué sucedió?

Preguntó mientras ayudaba a su hija a sentarse y le daba un té para que se calmará.

Camilo: La abuela trato de golpearla

Respondió de forma inmediata abrazando a Mirabel con protección, tenía miedo de alejarse y que su abuela la lastimara.

Julieta frunció su ceño y salió de la cocina dejando a los dos solos, ella fue con su madre enojada, cuando la vio la enfrentó.

Julieta: ¿Por qué trataste de golpear a mi hija?

Le pregunto al mismo tiempo que la tomaba del hombro.

Alma: Pensé que ella tenía que ver con el compartimiento de Pepa

Respondió la matriarca, solo provocando aún más a su hija.

Julieta: Y qué pruebas tenías para acusarla de eso?!!

Alzó la voz sin percatarse de la presencia de Dolores, la cual tapo sus odios, Agustín al escuchar a su esposa bajo lo más rápido que pudo y la tomo de los hombros alejandola de la matriarca.

Agustín: Mi amor, tranquila si

Julieta miro con enojo a su madre, no podía creer que la mujer mayor aún siguiera comportándose de esa manera.

El sonido de un golpe en la puerta llamo la atención de todos, Alma se acercó y vio a la señora Guzmán y a Mariano, ambos venían con capuchas para evitar empaparse por la lluvia.

Alma: Oh Señora Guzmán si vino
Sr.Guzmán: No podría no venir, hoy nuestras familias se unirán

Contesto de forma feliz la señora, su hijo se mantenía en silencio ayudando a su madre a quitarse la capucha.

Alma: Magnífico, vamos todos al comedor

Dolores fue por Camilo y Mirabel pero al hacerlo escucho algo que no debía.

Mirabel: ¿Qué vamos a hacer Camilo?
Es mi culpa que la magia se debilite

La mujer de moño tapo su boca al escuchar aquello.

Camilo: No Bel, no es tu culpa tu trata de calmarte si, debe haber una respuesta, algo no estamos viendo
Julieta: Dolores mija, ¿Qué haces aquí?

La voz de Julieta hizo que la joven pegará un saltito y que los otros dos se quedarán helados.

Dolores: Na-nada, yo ya me iba

Camilo y Mirabel salieron de la cocina de forma rápida, viendo a Dolores escapar.

Julieta: Que extraño, vamos chicos debemos ir, la cena de compromiso está por empezar

Julieta se llevó a su sobrino e hija al comedor, todos ignoraban el hueco que se encontraba en la pared del lugar, una figura observaba todo desde el otro lado.

Bruno: Las cosas pueden salirse de control, vayan

Les dijo a sus ratitas, las cuales captaron la orden y fueron a recuperar la visión que se suponía nadie vería.

No soy como elDonde viven las historias. Descúbrelo ahora