Matrimonio Inesperado [Adaptación Caché]

Capítulo 19

Abisambra me deja en la casa y ella se va de prisa a terminar de prepararse, estoy por entrar cuando siento que me recorre un horrible escalofrío por todo el cuerpo, volteo a revisar por todas partes y no veo nada, aunque podría jurar que alguien me estaba observando.

—¿Pasa algo Poché?-pregunta Joel mientras se acerca a mi .

—No Joel, solo sentí como si alguien me observará.

—No lo creo, pero igual daré una ronda para revisar la seguridad.

—No te preocupes Joel , tal vez sean mis nervios por la fiesta.

Él asiente no muy convencido y se va a revisar, entro a la casa dejando a un lado mis pensamientos , subo a la habitación y me doy una ducha sin mojarme el cabello y la cara , después de humectar mi piel me pongo el vestido, al verme en el espejo me sorprendo, me veo sencilla pero elegante, justo como a mi me gusta, me doy la vuelta para salir de la habitación y Daniela viene entrando, está entretenida con el teléfono.

—Boo voy a darme una ducha para...—levanta la cabeza y se queda viéndome.
—¿Te gusta?—no me contesta nada y se acerca para tomarme de la cintura.
—Te ves... no tengo palabras para describirte Boo, pero estás increíble.
Sonrió.
—iExagerada!
Se acerca a mí muy seria.
—Estás hermosa.
Nos besamos y yo la detengo.
—Llegaremos tarde.
—No importa.
Pone su frente con la mia y suspira.
—¿Crees que se vería muy mal si no vamos?
—Yo creo que si.
—Puedo decir que me sentí muy mal y mi esposa se quedo dándome los primeros auxilios, ya que estuve a punto de morir impresionada con su belleza.
Sonrio y la beso.
—Me parece que...—me observa
esperanzada—Será en otra ocasión, ahora ve a prepararte.
Hace mala cara y después me sonrie.
—Voy a darme una ducha y tendré que usar agua fria por tu culpa.
Se va sonriendo y yo bajo a la sala para esperarla, después de unos minutos baja, trae un traje negro, con camisa blanca y detalles azules, tiene el cabello un poco alborotado lo que le da un toque muy sexy.
—Está muy guapa señora Calle.
—Lo sé.
Suelto una enorme carcajada y se queda viéndome mientras sonrie de medio lado.
—Presumida
Se acerca y me abraza.
—Si también, no puedo negarlo.
Nos ponemos nuestros abrigos y salimos sonriendo, Joel nos espera para llevarnos a casa de los Sedán.
—Llamé a mi madre y me dijo que Juan Carlos, Julieta y Mateo se quedarían allá con ella está noche.
—Si, los invite para que nos acompañarán pero no quisieron venir, ya tenían planes
—Me alegro mucho de que se lleven tan bien con mi madre.
—Yo también
Pone su mano en mi pierna y empieza a hacer pequeños circulos con su dedo pulgar, por alguna razón mi corazón empieza a latir con fuerza y siento como si me recorriera una descarga de electricidad por todo el cuerpo, en eso llegamos a casa de los Sedán y yo agradezco al universo mentalmente porque estaba empezando a sentir mucho calor y no era precisamente por traer el abrigo.

Daniela me abre la puerta y me toma de la mano para ayudarme a bajar, la fiesta es en el jardín, lo tienen acondicionado con carpas cerradas para que no se sienta el frío, todo está adornado con los colores del equipo, y efectivamente todas las novias de las chicas traemos vestido azul y los hombres su moño o corbata azul o naranja, dejamos nuestros abrigos con el chico del vestidor.

Saludamos a todos y Daniela me presenta con los dueños del equipo y con su representante, me siento un poco avergonzada porque todos le hacen bromas por la manera en la que me pidió matrimonio.
—Ahorita regreso Boo.
—Está bien
Me da un beso y se aleja cuando empieza la música. Estoy sentada en una de las mesas un poco alejadas del escenario y Abisambra se acerca a mi.
—¿Todo bien?
—Si
—¿Conoces a David Bisbal?
—Claro, me gusta mucho su música.
—Es mi cantante favorito, por eso Juliana lo contrato para esta noche.
—Muy buen detalle de Juliana.
—Un detalle que después me cobrará.
Las dos sonreimos y ella me señala a donde esta Daniela que justo en ese momento está rodeada de algunas chicas.
—Venia a decirte que son algunas de las porristas, pero no te preocupes Daniela nunca les hizo caso a ninguna.
—No soy celosa Abi, además entiendo que por su carrera siempre va a tener mujeres a su alrededor.
—¿En serio no eres celosa?
—Nunca lo he sido.
—Yo si, en alguna ocasión tuve que quitarle a varias mujeres de encima a Juliana.
En eso se acerca un hombre y se para a mi lado, cuando volteo a verlo me doy cuenta que es el veterinario.
—Hola señora Calle.
Abisambra lo saluda y sonrie.
—Bueno los veo en un rato, con permiso.
—Doctor ¿Zurita?
—Juan Pablo Zurita
Me da la mano y contesto a su saludo, deposita un beso en el dorso de mi mano y me ve de una manera que hace que me ponga nerviosa, retiro mi mano y se sienta a mi lado.
—Vi la declaración de matrimonio que te hizo Daniela, fue muy interesante.
Sonrió sin decir nada.
—¿Así que eres pediatra?
—Si.
—¿Estás trabajando aquí?
—Por ahora no, pero espero hacerlo muy pronto.