¿Jiang Cheng embarazado?

04

- ¿Qué haces aquí?  - Preguntó Jiang Wanyin mientras sentía que su rostro se calentaba.

En realidad, se sonrojó al ver a Lan Xichen, y como estaba tan cerca, era como si Jiang Wanyin todavía pudiera sentir el calor de la mano del otro debajo de su vientre.

- Esta todo bien contigo ?  - Preguntó Lan Xichen, al notar a Jiang tan extraño.

- Estoy bien.  Puedes retirarte.

- No puedo hacer tal cosa.  Este hombre me acaba de decir algo un poco sorprendente...

- No creas nada de lo que dice.  ¡Es sólo un maldito lunático!

- ¿Estás realmente embarazado..?

- ...

- ¿Cómo te atreves a decirle estas cosas?  - Preguntó Jiang Wanyin hacia el doctor, Jiang parecía mucho más emocionado.  Quería estar furioso, pero no podía.  El impulso que tenía era simplemente ser abrazado por Lan Xichen, pero no pudo.  No tenían nada.

Lan Xichen ni siquiera sabía lo que habían hecho hacía casi tres meses... Los toques, las dulces palabras, los besos, las caricias... Todo eso se guardaba solo en la memoria de Jiang.

- ¿Tienes... tienes algún compañero de cultivo?  – preguntó Lan Xichen sonrojándose un poco ante tal pregunta.  Nunca había escuchado nada sobre el matrimonio de Sandu Shengshou, y la idea realmente no era agradable para él.  No es que Lan Xichen albergara sentimientos por Jiang, pero siempre le gustaba ir a YunmengJiang solo para verlo, las expresiones de enojo, el caos que era Jiang... Algo adorable, Lan Xichen se sintió cálido y extrañamente feliz. a él.

- No.  Lo crearé yo mismo.  - Respondió fríamente Jiang Wanyin mientras tensaba las sábanas.

- ¿Puedo... puedo quedarme aquí un rato?  Tal vez hasta que nazca el niño, pueda ser de gran ayuda para saber qué pasó... - propuso Lan Xichen, pero era mentira, solo quería ver crecer poco a poco la barriga de Jiang Wanyin, cambiar su comportamiento, su deseos, sus berrinches... Todo parecía tan adorable de imaginar... Lan Xichen no tenía derecho a querer tales cosas, pero lo deseaba intensamente.

Cuando Lan tocó la pequeña barriga de Jiang, sintió algo diferente, casi como si de alguna manera estuviera conectado con Jiang.  Su deseo era seguir tocando esa barriga durante horas y horas, hasta sentirse satisfecho.  Fue un pequeño toque... Pero fue cálido... A Lan Xichen le gustó, le gustó mucho.

- ¡NO!  - Gritó Jiang Wanyin desesperadamente.  No quería que Lan Xichen supiera que el niño era suyo... Pero, ¿y si al nacer se pareciera al primer Jade?

¿Era justo esconder a un niño de un padre?  ¿Estaba siendo justo con un hombre tan bueno como Lan Xichen?  Y en cuanto a su hijo… ¿era así?  Un niño necesita el amor de ambos padres... Jiang Wanyin lo sabía muy bien...

- Zewu-jun... yo...

- ¿Hmm?... ¿Puedes hablar...?

- ¡Tú!  ¡Fuera de aquí, luego hablaremos!  - Jiang Wanyin regañó al médico que suspiró profundamente y se fue.  El bebé estaba bien de todos modos.

Jiang Wanyin avanzó hacia Lan Xichen y lo abrazó sintiendo sus ojos llorosos.  Lan Xichen se sintió sorprendido y abrió ligeramente los ojos.  Pero no tardó mucho en corresponder.

Jiang Wanyin estaba tan asustado... Un hombre embarazado... ¿Qué sería del mundo de cultivo?  ¿Cómo reaccionaría Jin Ling?  Wei Wuxian corría el riesgo de cortarle la garganta a Lan Xichen al saber tal cosa, después de todo, después de que todo el caos había pasado, su amistad volvió aún más hermosa de lo que era cuando eran jóvenes.  Tener a alguien que lo apoyara era importante... ¿No estuvo solo tanto tiempo?

- Estoy embarazada...- dijo Jiang Wanyin mientras apretaba a Lan Xichen entre sus brazos.

- Hum lo sé...

- No Zewu-jun... estoy embarazado de ti - dijo Jiang Wanyin sintiéndose todavía muy emocionado.  No quería decirlo, pero el miedo de que algo malo le pudiera pasar al bebé era más fuerte.  Lan Xichen podría defenderlo si algo saliera mal, Lan Xichen podría cuidarlo con todo el cuidado y la calma si Jiang Wanyin alguna vez muriera... Un hombre embarazado... Dios sabe si Jiang Wanyin sobreviviría al parto.

Estas dudas siempre habían rondado la mente de Jiang Wanyin durante dos largas semanas... Ya estaba tan apegado a la pequeña criatura dentro de su vientre, y no tenía idea de cómo podía amar tanto a alguien en tan poco tiempo, y alguien a quien nunca había visto.  Pero el bebé estaba allí, Jiang Wanyin lo sabía, lo sentía.

- Lo siento, no entiendo.

- Cuando bebimos esa vez... Nosotros... nosotros... No importa... No quiero que te sientas en la obligación de quedarte conmigo o ser mi pareja... Pero el niño merece amor. de ambos padres... Puede que no lo creas... pero nosotros... Este bebé también es tuyo.  Y aunque no lo creas… Cualquier cosa puede pasar, el mundo del cultivo es injusto con lo desconocido… Wei Wuxian… él fue un ejemplo de eso… No quiero que el bebé tenga sufrir... Si algo me sale mal... No sé si me lo creeréis, pero...

- Creo en ti, no hay necesidad de tener miedo - Lan Xichen lo empujó, limpiando las lágrimas del rostro de Jiang Wanyin.  Y del interior de sus mangas sacó una pequeña campana envuelta en una cinta morada.

Realmente no recuerda lo que habían hecho.  Pero Sandu Shengshou no se mentiría a sí mismo.  Estaba demasiado orgulloso para eso, todavía era algo nuevo que fuera tan abierto.

Cuando Lan Xichen miró a Jiang Wanyin, era casi como si estuviera viendo a un niño temeroso de los desafíos del mundo.  Alguien que está lleno de buenos sentimientos, Sandu Shengshou estaba desbordante...

- ...

- Estaba guardado en una bolsa en mis mangas... Tal vez cuando bebíamos lo pusiste ahí.

- En GusuLan la cinta de nuestra frente es sagrada.  Solo el destinado puede tocarlo.  Sé que YunmengJiang también es así con la campana...

- Tú...?

- Noviazgo, cultivo de parejas, matrimonio.  No es que sea un problema para mí, siempre y cuando quieras... Si quieres, podemos hacerlo... - Dijo Lan Xichen sonriendo suavemente tocando las mejillas de Jiang y este se sintió conmovido, apartando la mirada.

Lan Xichen fue un tonto al pensar que no tenía nada que ver con Sandu Shengshou... Si no lo hiciera, ¿sería un tonto prácticamente pidiéndole que se casara con él en la primera oportunidad que tuviera?

- ¿Podemos hablar de esto más tarde?  - Dijo Jiang Wanyin, mordiéndose los labios internamente.

- ¿Mmm?  Por qué ?  ¿No podemos hablar ahora?

- Es que en la puerta hay tres entrometidos mirándonos...

- ¿A-Cheng?

- Xichen-ge?

- TÍO, ¿QUÉ ACABO DE ESCUCHAR?