Capítulo 5: ¿Tiempo?

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Aquel sujeto se veía malogrado tanto por su apariencia como por la suciedad del uniforme que vestía – Antes de que lo preguntes, no estás muerto, no estás soñando ni estás delirando, tampoco puedo decirte quien o que soy ni de dónde vengo- ¿Cómo se suponía que ese tipo supo exactamente que estaba pensando? Me puse de pie para tratar de verle la cara, pero fue inútil, las cosas eran algo borrosas lo único claro era ese cielo lila tan hermoso. El viento soplaba y se llevaba consigo esos pétalos de dientes de león – Usted ¿Cómo supo lo que pensé? – Intentaba dar pasos cortos para acercarme un poco – Entre más cerca estés de mi más rápido volverás, aún no es momento de dar respuestas- Tenía razón apenas logré dar cinco pasos y mi visión se tornó muy borrosa.

-Tuvieron suerte al haber traído a este joven a tiempo, sufrió una intoxicación por ingerir chocolate blanco- Intentaba buscar esa voz que resonaba desde algún sitio, parecía venir del mismo viento - ¿Conoces lo que es realmente el tiempo, lo que es el espacio? – Cuestionó el hombre. Esa pregunta me hizo recordar a mi profesor de astronomía –El tiempo es una ley incontrolable que solo va en una dirección, hacia adelante. El espacio es todo lo que nos rodea y puede ser manipulado por la gravedad- Al fin sentía que tanto estudiar sirvió para algo eso fue lo que pensé tras responder – Es correcto, teóricamente, pero si lo llevamos a la práctica entonces ¿Por qué escuchas cosas que no están aquí?

-¡Quítenle la camisa e inyéctenle antibióticos para la hinchazón! Necesitamos actuar rápido antes de que su sistema digestivo colapse ¡Muévanse! – Mi respiración se trancaba y sentí perfectamente mi estómago hinchado - ¿Lo ves? Si el tiempo va hacia una sola dirección entonces dime ¿En qué momento estás ahora? O acaso ¿En qué lugar? – Escuchaba a Vanessa llorar sentía que me estaba volviendo loco - ¡Ya por favor esto no es divertido! – El hombre se alejaba y detrás de él subía una especie de humo como si fuese una fogata – Esto es ¿Una montaña acaso? – Empecé a ver las cosas con mayor claridad, aunque por más que intentase detallar a ese jodido tipo no podía conseguir hacerlo – Esto es una pequeña colina. Pero eso no va con la conversación, estudiaste astronomía e incluso te graduaste pequeño joven eso quiere decir que puedes responderme ¿Qué es el tiempo? ¿El espacio? ¿La vida? – El sonido de un monitor cardíaco se hacía con el silencio del lugar – Está estable, la cantidad de chocolate que ingirió en forma de helado casi lo mata, pero pronto le daremos de alta –Ya me empezaba a molestar el hecho de no entender que sucedía.

De nuevo intente acercarme a ese tipo – Ya deja los juegos ¡No es divertido! – Hizo una señal intentando hacer que me detuviera – Si te acercas a hacer lo que creo que harás entonces llegó el momento de despedirme, cuando te despiertes estarás en tu cama justo un año después, al principio sentirás que solo fueron minutos desde haberte desmayado, pero conforme te orientes te darás cuenta que todo marcha como debería. Hasta luego muchacho- Me encontraba a solo pasos de él - ¿Hasta luego? – Me abalancé a darle un golpe ya todo estaba tan borroso que no podía distinguir nada y de pronto di un brinco en mi cama – ¡Joder! ¿Qué sucedió? – Estaba tan desconcertado que ni siquiera sabía que era real - ¿Vanessa? No puede ser- Seguía sin explicarme que sucedió –Britany ¿Qué día es hoy? – La Inteligencia Artificial encendió las luces de mi habitación – Hoy es veinticinco de junio del año dos mil noventa y ocho – Cierto, los recuerdos volvían a mí, esa semana me preparaba para ir a buscar trabajo –Quizás el estrés me está afectando- Decidí no dar más vueltas al asunto y volví a dormir.

Zona residencial, Ciudad Odisea

26 de junio, año 2098

9:00 AM

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