Demoniac Passion

Prologo

Los siglos han pasado y la guerra entre el cielo y el infierno ha seguido desde el inicio de los tiempos, una tras otra sin encontrar nunca un fin, arrasando con todo en su camino, con el fin de obtener poder y someter a la humanidad en todos los sentidos.

Hijos e hijas de ambos bandos han luchado las batallas de sus padres, pero a pesar de eso siguen estando bajo sus pies, siguiendo todas sus órdenes, meras marionetas o un número menos en la lista para tachar y darle lugar a otro.

El tiempo sigue pasando, los años pesan, mi madre, la reina del infierno, ha puesto en práctica su plan de crear miles de demonios, brindando descendencia únicamente a 7 hijos, 7 príncipes del infierno, uno por cada anillo de este.

Mi padre, el príncipe de la ira, uno de los siete pecados capitales ha tenido infinidad de hijos, pero solo un primogénito de Amón el marqués del infierno; ira, asesinato y todo aquello que el hombre considera como caos, soy la representación de todo.

Mis hermanos y yo hemos liderado cada ataque guiados por mi padre, hemos ganado un sin fin de guerras y perdido también a muchos hermanos; la humanidad está cada día más cerca de su extinción.

El cielo está en guerra y un nuevo pecado intenta entrar a nuestros círculos, pelearemos para someter a todos aquellos que quieren tomar nuestra libertad y libertinaje por la fuerza.

Al igual que el mal también existe el bien, como en aquel cielo donde se nos ha prohibido entrar, donde habitan ángeles con cara de santos, de piel suave y una inteligencia sobresaliente para la guerra; para mí, hay un hombre que ha sido mi dolor de cabeza personal durante los últimos años, el único hijo del arcángel Gabriel, aquel chico de tez blanquecina y pelo dorado a quien planeo derrocar y someter igual que Rafael hizo con Asmodeo.

Soy el hijo del demonio de la ira y la reina de la lujuria y quiero al ángel más puro para mi deseo.