Para cuando llegamos a la academia Elisse nos esperaba en la entrada. Tenía el cabello recogido en un moño despeinado, el pantalón negro y bota ancha estaba manchado por el barro y las mangas de su camisa, también negra, pero de encaje, estaban mojadas. Cuando Elisse vestía de aquel modo significaba que había ido al Bosque Nublado y, por lo tanto, yo no debía hacer preguntas, pero era claro que ese día tenía que hacerlas.
─¿Qué pasó? ─le pregunté corriendo hacia ella.
Ella primero me abrazó y, después de poner una mano sobre el brazo de Ross, nos miró con firmeza a los dos.
─¿Por qué no se sientan? Tenemos que hablar... Los tres.
Ross y yo nos miramos el uno al otro, pero inmediatamente obedecimos y nos sentamos en los escalones de la entrada. Elisse lo hizo al poco rato y, aunque tenía la mirada un poco perdida, no tardó mucho en recuperar la compostura y su tono solemne.
─Hay problemas en el mundo de arriba... ─dijo eso señalando hacia el cielo con el dedo índice─. No tenemos pruebas, pero al parecer hay un grupo de vampiros causando estragos y eso pone en riesgo no solo a los mortales sino también a todo nuestro mundo.
─¿Tienen que irse? ─pregunté temerosa.
─Tenemos ─aseguró mirándome─. Los tres.
Tragué saliva y sentí como si me perforaran el estómago.
─¿Cómo que lo tres? ─preguntó Ross.
Elisse acomodó un mechón de cabello detrás de su oreja mientras ordenaba sus ideas antes de hablar.
─Esto no es una novedad. Y ambos los saben. Los vampiros, durante años, formaron parte de la Zash, pero eventualmente, la abandonaron, y después de eso comenzaron las desapariciones. Al principio pensamos que se trataba de vampiros hambrientos, pero al no encontrar cadáveres, creemos que los están llevando a CastleBlood para crear un ejército de hijos de la sangre. Si declaran la guerra a la Zash o a los mortales... las consecuencias serían...Terribles... No podemos ni imaginar la magnitud de lo que pasará.
─¿Y qué se supone que podemos hacer nosotros? ─pregunto de nuevo Ross─. No es que tenga algo en contra de ayudar, es que sencillamente no entiendo.
─Hace años, los padres de Nara hicieron una investigación en Ewigmor en donde se descubrió toda esta teoría de CastleBlood, pero la manera en la que se abordó derivó en el desastre. La Zash tiene información sobre un grupo de vampiros en un pueblo llamado Grondheil, en donde, al parecer, se han instalado desde hace un par de años y en donde las desapariciones están aumentando significativamente. Quieren que me infiltre junto a un compañero como una persona normal y que, incluso, me secuestren a mí también para ver qué es lo que está pasando... pero la única manera de que eso ocurra es que ignoren que soy bruja y crean que soy una mujer normal con sus hijos y esposo.
Bajé la mirada. Recordar a mis padres era doloroso, pero la posibilidad de perder a Elisse me causaba pánico. Era todo lo que tenía en el mundo.
─¿No crees que es demasiado peligroso?
─Por eso los llevaría a ustedes ─respondió sin titubear─. Tú eres una bruja extraordinaria ─Me sonrío─. Y tú─ Miró a Ross─, tienes uno de los poderes más fuertes de todo el mundo aquí ─señaló sus manos─, y aquí─ señaló su cabeza─. Además, nos llevaremos a Demi. Y un viejo amigo de la Zash estará a nuestro lado en todo momento.
Suspiré mientras meditaba un poco en lo que acababa de escuchar. Sonaba como una locura y estaba convencida de que lo era, pero algo en mi interior también me decía que era lo correcto. Por mis padres.
─¿Crees que al fin sabremos lo que le hicieron a mi madre? ─le pregunté.
Ella me miró y suspiró.
─Es posible...pero, Nara, también es posible que deseemos nunca haberlo sabido... así que es aquí cuando necesito que me digan si quieren involucrarse en esto o no. Porque, chicos, yo apostaré a que me secuestren a mí, pero se los pueden llevar a ustedes o puede pasar algo peor ─ahora nos miraba con firmeza─. Ser de la Zash suena muy bonito cuando no eres parte de ella. Morir siempre es lo mejor que te puede pasar cuando te agarra un enemigo, y no lo digo para asustarlos. Lo digo porque es la verdad ─tragó saliva─. El ministerio intentará obligarte, Ross, tú poder, al igual que el de Demi, es único para la organización, pero yo no dejaré que eso pase. Así que si no quieren hacerlo, los sacaré que aquí, pero si sí quieren, tendremos que irnos esta noche.
KAMU SEDANG MEMBACA
Proyecto Grondheil
FantasiLas desapariciones y asesinatos comenzaron en Grondheil. La Zash, consciente del estado crítico en el que se encuentran los mortales, ha convocado a Elisse, Gideon, Nara, Ross y Demi para que abandonen la seguridad de la Academia Narmond y del Marwo...