Luego de todo lo que nos hicieron los chicos nos quedamos un rato mas metidos en el mar para luego salir.
—Toma te estas congelando —me ofrece Mason una toalla para secarme. Justo decidimos salir del agua cuando el sol estaba siendo tapado por unas nubes por lo que nos estábamos congelando todo menos él.
—Gracias —le dije en un murmullo apenas audible, pero cuando la iba a agarrar él la paso por mis hombros y me abrazo para poder tener calor más rápido—. Que cliché que sos Mase.
—Uno intenta ser buena persona y no lo dejan, no me parece esto.
—Ey tórtolos, ¿en un rato les parece ir a cambiarnos para ir a pasear? —nos aviso Tristan. Por lo que nosotros aceptamos.
Pasaron los minutos y nosotros estábamos sentados en una ronda y cada uno hacía lo que tenía ganas. Algunos hablábamos, otros miraban el celular y otros solo se quedaban callados mirando el agua.
—Bueno antes de que me agarre hipotermia digo que es hora de irnos —les dije a todos mientras me levantaba de la ronda seguida de Mason y Brady.
—La mamá del grupo tiene razón —dijo Brady agarrando unas cuantas cosas de las chicas.
Luego de que todos estemos intactos para empezar a caminar, emprendimos camino a nuestra casa.
En el momento cero que puse la llave en la cerradura y abrí la puerta senti como una persona me paso por al lado en una velocidad de un rayo hacia el baño para bañarse. Era Madeleine.
—Este pelo no se mantiene solo chicos —grito mientras se encerraba en el baño para que segundos después estemos escuchando el agua de la bañera. Nunca una amiga normal.
Por la parte de todos los demás decidimos comer algo que este por arriba de la mesa de ayer por la noche y mirar la televisión. Y en algún momento decidí que era momento de hacer una historia para instagram.
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En el momento que subí la foto vi de reojo como Madeleine salía suavemente del baño con un pote rosa pequeño en sus manos.
Cuando viene hacía nosotras y veo que no tiene el pote rosa en la mano me quedo perdida por lo que acababa de hacer.
—Escuchenme —nos dijo a Rebecca y a mi—. En el baño puse un shampoo que es el que usan los chicos un colorante rosa para que se les pinte el pelo, hace efecto 20 minutos despues de que se bañen.
Esta era mi chica.
—Me gusta como piensa tu cabecita Mads.
—Soy muy inteligente.
—Me baño yo y después vos Oli —me dijo guiándome un ojo Becca a lo que yo volví con los chicos.
—¿Que están haciendo? —le pregunte a Jacob al ver que los demás estaban mirando atentamente sus celulares.
—Unos productores llamaron a Tristan para preguntarle si estábamos desocupados mañana por la mañana para ir a hacer una entrevista acá. Y ellos están viendo donde queda el estudio.
Otra entrevista a la lista.
Ya no se pueden tomar ni vacaciones.
—¿A que hora seria?
—Nos dijeron que por la mañana, pero no una hora exacta —me respondió Miguel.
—A una hora de acá —murmuro Brady que estaba mirando el mapa en su celular.
Otro viaje largo a la lista.
—Bueno... terminen de hablar con este hombre y tiren toda la data para ver como hacemos.
Rebecca salió de bañarse y entre yo viendo el pote de shampoo rosa. Que bueno va ser ver a los chicos en una entrevista con el pelo totalmente rosa. Miguel me iba a matar después de todo esto. Tengo pruebas y cero dudas.
—Chicos, todo suyo el baño —les dije saliendo con unos pantalones blancos holgados y un top de color negro.
Y así fue como los chicos se bañaron uno atrás del otro en menos de 5 minutos cada uno. Ellos si que se bañaban rápido.
Si no habíamos hecho mal la cuenta al primero que le cambiaria el pelo es a Tristan, luego a Mason, Jacob, Brady y por ultimo el peor de todos Miguel.
Hicimos que se cambien para salir un rato a ver un poco la ciudad y en unos 10 minutos ya estábamos fuera de la casa.
Yo iba detrás de todo para ver que ninguno de quede atrás a mi lado estaba Mason y enfrente de todos estaba Madeleine.
Caminamos un rato hasta llegar a lo que seria el centro de la ciudad donde nos separamos en pequeños grupos de 2 o 3 y fuimos viendo las tiendas que había a nuestro al rededor.
Mason fue el que me acompaño a todos los lugares que yo quería entrar y viceversa.
Hasta que encontré una libreria. Realmente quería entrar pero no quería que Mase se quede mas de 15 minutos quieto mirándome viendo los libros.
—Se que queres entrar Liv. Vamos —me dijo desprevenida mientras me agarraba la mano y entrábamos a la libreria donde nos quedamos los dos mirando libros por unos 20 minutos.
—Este parece un buen libro —me dijo mientras agarraba "heartstopper".
—Bello, ya tengo ese libro y por el yo ahora creo en el amor.
—Tiene buenos colores la portada por eso te puedo decir que tenes razón.
Luego me dio unos cuantos mas, hasta que dio al que yo estaba buscando.
—¿Este? —dijo tendiéndome "Heartless".
—¡Este mismo!
Obvio que no dude ni cinco segundos en agarrarlo y llevármelo a la caja para pagarlo e irme con el.
—Pensamos que no iban a aparecer mas —dijo Jacob mientras nosotros íbamos tomados de las manos hasta donde estaban él y Becca.
Ella y yo estábamos conteniendo la risa de la mejor forma que podíamos, se les estaba empezando a notar el color rosa en el pelo.
—¿Que te hiciste en el pelo amigo? —le pregunto Mason a Jacob.
—Esa pregunta va para vos, lo tenes todo...
—Rosa —dijeron al unísono. Al caer en cuenta por lo que acababan de decir agarraron sus celulares para poner la cámara frontal y verse que los dos tenían la razón. Tenían el pelo rosa.
Nos miraron a las dos con caras acusadoras.
—Nosotras no tenemos nada que ver.
Tres segundos después aparecieron todos los demás con Madeleine que se moría de la risa.
—No pienso hablarte nunca mas Olivia.
Estaba a segundos de estar tirada en el piso de la risa al ver la reacción de mi hermano.
—La venganza es dulce chicos.
—No es para nada dulce —me dijeron Mason y Miguel al mismo tiempo.
Y así fue acabo la segunda noche con estas personas en California.
Con tres chicas muertas de la risa y cinco chicos con el pelo rosa.
