El lunes de la próxima semana, Nayeon llamó a la puerta de Mina dos horas antes.
"Hola", saluda Nayeon cuando Mina la encontró del otro lado, "¿Tienes algún plan para hoy?"
Mina piensa en su horario habitual: despertar, preparar el desayuno, preparar a Hyejoo, llevarla a la escuela, ir a casa, preparar el almuerzo, jugar con Gureum, pasar el tiempo jugando Animal Crossing, esperar a que Hyejoo termine sus clases y luego recogerla. .
"En realidad no", responde Mina, "Solo estaba esperando para recoger a Hyejoo".
"Bien bien." Por alguna razón, Nayeon parece nerviosa.
Tiene las manos hundidas en los bolsillos de su chaqueta de cuero y se muerde el labio inferior. "Me preguntaba, puedes decir que no totalmente si no quieres, pero ¿tal vez podríamos salir hoy? ¿Antes de que recojamos a Hyejoo?"
Mina levanta las cejas e inclina la cabeza hacia un lado. "¿No es eso lo que siempre hemos estado haciendo?" pregunta en broma, preguntándose por qué Nayeon se ve tan nerviosa, "No veo por qué eso tiene que cambiar. No tienes que preguntar, unnie ".
Nayeon se queda en silencio. "Sí", dice en voz baja, con las cejas fruncidas, "tienes razón".
Mina no puede evitar sentir que hay algo que Nayeon quiere decirle, pero tiene demasiado miedo de expresarlo.
Pero Mina nunca ha sido de las que presionan para que la gente hable, así que simplemente toma su abrigo del perchero, recoge las llaves y sigue a su vecina, pensando en el tipo de café que quiere pedir.
Continúan así:
Nayeon llega temprano a la puerta de Mina, le pregunta si quiere café y luego pasa más tiempo con ella todos los lunes.
A veces, ni siquiera van al café.
Nayeon elige restaurantes que quiere probar y rechaza la oferta de Mina de pagarle la mitad.
Luego recogen a Hyejoo más tarde, Nayeon incluso sugiere tomar un helado de camino a casa.
Hyejoo espera más los lunes ahora, no porque haya helado gratis sino porque puede ver a Nayeon más tiempo.
La misma sensación de inquietud que sintió cuando conoció a Nayeon regresa al pecho de Mina.
Hyejoo no sabe el alcance de lo que ha perdido: una infancia normal que no implica visitas al hospital, un padre amoroso que nunca se haya ido y un futuro en el que no tiene que preocuparse por su enfermedad, pero Mina teme que esta sea la primera vez que experimente el enorme agujero que deja una pérdida, cuando se vaya Nayeon.
No es como si ella esperara que Nayeon se fuera.
Hay algo en su corazón que se encoge ante la idea de dejar entrar a otra persona porque siempre existe la posibilidad de que la dejen.
Cuando su ex novio se fue después de enterarse de la enfermedad de Hyejoo, había aplastado a Mina.
Lo único que la hizo seguir adelante fue la idea de Hyejoo en sus brazos.
No importaba si estaba sufriendo, siempre y cuando Hyejoo estuviera en casa.
Mina piensa en Nayeon y trata de no hacerlo.
~
El día antes del cumpleaños de Nayeon, su vecina planea regresar a su casa en Incheon para celebrar con sus familiares y amigos cercanos.
Hyejoo es inflexible en darle un regalo de cumpleaños, así que antes de que Nayeon se vaya, Mina lleva a su hija de compras.
Pasan solo media hora en el centro comercial antes de que Hyejoo señale lo que ya quiere.
