Corazon Hecho Por Lagrimas (Fairy Tail) (StiLu) ¡¡[PAUSADA]!!

Prologo

Que las simples lágrimas caigan y que cada mundo caiga a pedazos, el lenguaje del alma que necesita ser escuchada y pide a gritos ayuda.

Mi vida cambió por completo, huir de un lugar a otro y entrenar arduamente para el día del enfrentamiento. No estaba completamente segura de mí misma, la verdad ¿te sentirías segura si te dicen que quizás pelees contra el mago más poderoso? Si tú sí, pues yo no. Era demasiada presión la que sentía, muchas cosas que caían sobre mis hombros. Solo quiero que esto termine de una vez.

Miré la luna menguante con las millones de constelaciones que había cerca de ella, en el cielo teñido de un azul oscuro. Me levanté y vi como Acnologia descansaba a lado mío, sonreí para mis adentros, me había estado cuidando y enseñando muchas cosas durante estos dos años. Era de verdad como un padre para mí.

Me senté en un campo un poco alejado de donde estábamos con Acnologia. Abracé mis piernas y oculté mi cara en ellas. Me sumergí en mis pensamientos.

Todos los días era mojar mis camisas con mi sudor, cada día era llorar en silencio, cada día era querer que el día acabe... Extraño profundamente a todos mis seres queridos, a veces me pregunto ¿estarán haciendo sus fiestas en Fairy Tail? ¿Sabertooth, que tal estará todo en el gremio? ¿Sting que estará haciendo? ¿Habrá encontrado a otra?

Ante el último pensamiento me dio un fuerte dolor en el pecho, pero aunque sea un sí debería aceptarlo de sobremanera, después de todo lo dejé en su cumpleaños, debería estar odiándome, era nuestro aniversario también... tiene todas las razones para estar haciéndolo.

Solté un largo suspiro que pareciera que estuve conteniéndolo hace dos años. Dos años ya pasaron de mi partida... solo espero que todos estén bien.

Levanté mi cara y la luz de la luna estaba segura que se reflejaba en mis lágrimas, tantas cosas inolvidables.

-Hime-sama -di la vuelta y limpié rápidamente mis lágrimas. Virgo se sentó a mi lado-debería dormir, hime-sama. Mañana será un día muy cansador.

-Ya voy, Virgo -sonreí- gracias.

-Siempre estaremos para usted, hime-sama -contestó ella- ¿habrá castigo por esto?

Buenos muchas cosas no cambiaron, sonreí nuevamente -no lo habrá, Virgo.

Virgo fue de nuevo al mundo espiritual. Solo había venido porque estaba preocupada. Toqué cada una de mis llaves- Gracias chicos -era lo máximo que podía hacer por ellos en ese momento. Al igual que todos los tiempos, ellos siempre me cuidaron y protegieron.

-Enserio deberías dormir, niña -una voz profunda se escuchó atrás mío.

-Están muy acostumbrados a salir sin permiso- dije riendo pero sin ganas.

-Es porque nos preocupamos por ti y lo sabes.

-Sí...

- ¿Extrañas mucho a mi hijo?

-Sí, Weisslogia-san a él y a todos.

-Solo Weiss si quieres, niña -dijo el dragón blanco para acercarse junto a mí.

-Solo, Lucy -Sonreí.