BAD THINGS - COSAS MALAS / JUNGKOOK

PART 10

#Narrador

Lo que causó la risa del chico tiempo antes fue porque se dio cuenta lo celosa que estaba su amiga en ese momento.

Después de un rato que ambos se separaran de aquel beso, él la seguía observando, lo cual para ella fue muy incómodo y cada vez se sentía más nerviosa. Aunque ella se sintiera así, él parecía disfrutar ver como la ponía nerviosa, pues la sonrisa en su rostro aún no desaparecía.

Sus intensas miradas, que parecían mejor un juego que evidentemente ella iba perdiendo, fueron interrumpidas por algunos pasos que se escuchaban detrás de ella y que no dudó en darse vuelta para ver de quien provenían.

Sí, los Park.

Los vio como ambos venían con ropa de baño, ella con un bikini amarillo de dos piezas que le hacía ver su hermosa y delgada cintura, mientras que él venía con unas gafas amarillas haciendo combinación con el bikini de la rubia, le pareció un poco ridículo ver como él tenía gafas sabiendo que el sol ya se había ido y que la luna se estaba haciendo presente también como si fuera poco venía con un flotador, pero debía admitir que ambos se veían realmente espléndidos.

Los dos empezaron a meterse en la piscina mientras que Jungkook veía confundido a Jimin pensando lo mismo que pensó la peli castaña:

"Qué ridículo"

La rubia pareció notar las miradas confusas que ambos tenían.

—También le dije que era ridículo—Dice ella adentrándose a la piscina mientras se quejaba por lo fría que se estaba empezando a poner el agua de esta

—¿Qué?, no sé nadar, ¿okey?—Dijo él sentándose en aquel flotador en forma de círculo, a lo cual todos parecían ignorarlo, solo dándole una mirada con confusión.

La rubia se posicionó al lado de Jungkook, todo se puso en silencio haciéndolo el momento incómodo, así que la pelicastaña simplemente pensó que era su momento de irse, pues lo quería hacer desde el instante en el que terminó su beso con Jungkook, pero él le dijo que no se fuera.

—No, no te vayas por favor—dice Rosé deteniendo el paso haciendo que ella se detenga para mirarla—. Quería pedirte perdón por lo de esta mañana y lo demás. Al fin y al cabo nuestros padres se casarán, así que tendremos que convivir mejor.

Aparentemente y ante los ojos de Alaia eso era algo que había esperado durante tiempo que ella pudiera pedirle perdón y tener buena relación entre ellas, pero solo lo hacía por su madre y por el señor Lee que se lo pidió repetidas veces. Al principio dudo, pero sin más acepto aquellas disculpas y aun sin saber qué hacer, simplemente se quedó como ella le había indicado.

Se volvió a sentar de nuevo donde estaba, todo era tan incómodo que juraría que si su yo de hace tres años estuviera ahí, saldría corriendo de los nervios, aunque era algo que a pesar de todo aún haría.

Su vestido se pegó a su cuerpo debido al chapuzón que tuvo con Jungkook hace unos minutos, gracias a aquel vestido su figura se notaba impecable, su cabello botaba gotas de agua por su cara, cuello y todos lados. A los ojos de Jungkook esa escena era tan erótica que inconscientemente mordió levemente su labio inferior para después bajar la cabeza y dejar de mirarla.

Su mejor amiga lo conocía bien y sabía que era lo que pasaba por la mente del chico, pues vio cómo la miraba y eso para ella era suficiente.

—Me encanta tu vestido—soltó de la nada la rubia sonriendo a pesar de haber dicho que era horrible tiempo antes cuando hablaba con Jimin.

Para la peli castaña era raro aún aceptar que Rosé estaba siendo amable, así que solo dudando aún soltó un 'Gracias' mientras le devolvía la sonrisa.

Se quedaron un tiempo ahí mientras todos reían de las cosas tontas que hacía y decía Jimin en esos momentos. Después de un tiempo todos salieron de aquella piscina y se sentaron en el pasto del jardín ya con la luna presente; cajas de sushi, pizza, ensaladas, refrescos... Aun con sus atuendos mojados.

—Juguemos verdad o reto—propuso Rosé.

—Bien juguemos—Dice Jimin con la boca llena de comida, a lo que Rosé lo miró mal por su imprudencia.

—No, creo que deberíamos ir a dormir, ya es tarde y además creo que Alaia no quiere jugar—Dijo Jungkook con su rostro serio, pues no le gustaba la idea

—¿Quieres jugar?—le pregunto la rubia confusa.

Ella no sabía si negarse o aceptar, pues Jungkook se veía decidido a no jugarlo, pero le pareció tonto, solo era un juego, así que decidida asintió varias veces llevándole la contraria al pelinegro.

—¿Lo ves?, si quiere jugar—dice ella a lo que él mira a la chica sin más protestas y los cuatro chicos decididos empezaron a jugar.

—¿Verdad o reto?—Le pregunto a Jungkook

—Verdad

—¿Te gusta Alaia?—La pregunta sorprendió a todos. 

—¿Por qué preguntas eso?

—Solo puedes decir un sí o un no—Ignoro su pregunta

—No—Admitió, a decir verdad la castaña se sintió decepcionada 

—Bien, ¿Te gusta mi mejor amigo?—Le pregunto la rubia a Alaia

—No, negó

Ella sintió cierto alivio tras esa confesión, en realidad ella no quería jugar eso, ese juego le valía una mierda, ella lo que quería era hacer esas preguntas.

—Oh, qué pena—Hizo un gesto de pena falsa—Jimin y yo estábamos hablando de que ustedes se ven bien juntos

—¿Lo hicimos?—Dijo Jimin confundido quien estaba comiendo sin parar

—Claro que sí—Le dio una mirada matadora—Cambiemos de tema ¿Verdad o reto?—Le preguntó Rosé a Jimin

—Verdad

—¿Follaste con Sumin en la fiesta de ayer?

El chico se quejaba y maldecía repetidas veces por esa pregunta, mientras que Alaia se notaba confundida, no sabía quién era y también le pareció incómodo aquella pregunta, aunque no fuera ella quien la iba a responder. Todos parecían esperar la respuesta del chico que no llegaba por culpa de sus quejas.

—Sí, pero estaba borracho—admitió por fin él, la expresión de la rubia cambió al escuchar eso a una de sorpresa y su risa se hizo presente de la nada.

—¿En serio, con la nerd?—ella no paraba de reír, mientras que el chico se notaba avergonzado—. Te lo dije—le dijo ella a Jungkook y el rio levemente.

—Bueno, pues mi querida ardilla, ¿verdad o reto?—Le preguntó Jimin a Rosé

—Verdad—Dice ella dejando de reír

—¿Es verdad que follaste con el profesor para aprobar matemáticas?—le preguntó él la expresión de Jungkook, de la nada se volvió confusa, pues parecía que no lo sabía y buscaba su respuesta.

—¿Qué?, no. Solo un poco de coqueteo y listo—Dice ella como si fuera lo más normal del mundo.

Ahora era Jimin quien molestaba a Rosé con eso, varias risas salieron de peli castaña, pues ambos se habían caído por culpa de él.

La mirada de la peli castaña se desvió a las manos de los chicos y se dio cuenta de que los tres tenían un pequeño tatuaje en el mismo lugar y del mismo tamaño; Rosé tenía un sol, Jungkook una luna y Jimin una estrella. Le pareció bastante lindo y por dentro sintió un poco de envidia por aquello, pero una sonrisa apareció en rostro de nuevo, el cual Jungkook noto, el busco su perdida mirada hasta que la encontró, ambos chicos se miraban mientras que los otros seguían jugando y molestando entre ellos.