Corriendo Hacia Un Nuevo Futuro

¿Hermana?

-¿Quien carajos eres tu?-.

Yui Hyoudou arqueó una ceja cuando su hermano menor la miró como si le hubiera crecido una segunda cabeza.

La pregunta que le hizo también la descolocó un poco, no porque creyera que fuera una broma, sino porque parecía que Issei realmente no la reconocía.

-¿Te estás haciendo el tonto? ¿Quieres que te golpee?-. Preguntó casualmente, un poco de amor duro siempre sirvió para rectificar las actitudes molestas de su hermanito.

Claro que nunca curó su perversión, algo con lo que se había acostumbrado a lidiar cuando el chico alcanzó la pubertad y comenzó a perseguir el absurdo objetivo de conseguir un harem que algun viejo verde alguna vez inculcó en su inocente hermanito.

Haberle pateado las pelotas a ese anciano fue un recuerdo satisfactorio.

Lamentablemente el daño estaba hecho y su hermanito se degeneró con el tiempo a medida que sus hormonas aumentaban.

Meh, no valía la pena llorar por la leche derramada, ella lo corregiría eventualmente.

Por su parte, Issei estaba tratando de asimilar la situación, aunque al final su boca fue más rápida que su cerebro... irónico.

-¿Te conozco?-. Rubia, ojos azules, alta, en forma y con una figura al nivel de Rias, habría recordado a alguien así...

-te voy a golpear-. La rubia frunció el ceño.

-h-hey, espera, realmente no te conozco, ¿Quien eres?-. Issei alzó las manos en señal de rendición.

Por su parte, Yui lo miró fijamente, sus ojos safiro clavandose intensamente en el castaño, buscando algun indicio de broma o risa, encontrado pura confusión...

¿Qué?

-¿Estás hablando en serio...?-. Preguntó la rubia mayor finalmente a lo que Issei asintió.

-si, yo...realmente no sé quien eres, o sea...¿Puedo saber por qué estás en mi casa?-.

-Issei, soy yo, Yui-. Declaró ella encontrandose con un castaño aun confundido. -tu hermana- agregó acercandose al castaño el cual parpadeó como un búho ante la información.

-...no nos parecemos en nada, demonios, ¿De dónde demonios salió toda esa genética? ¡¿Que hay de mi?! ¡Soy estúpidamente promedio! Lo único destacable es mi pe...-.

-¡Soy adoptada idiota!-. Gruñó la mayor negando con la cabeza. -¿Que demonios te pasa? ¿Es algun tipo de broma? ¿Te estás haciendo el tonto conmigo? Porque si es así voy a arrastrar tu culo por medio Kuoh-.

-¡Realmente no te conozco! Creo que es la primera vez que te veo en toda mi vida porque definitivamente habría recordado tener una hermana tan caliente-. Reflexionó frunciendo el ceño.

-al menos eres tu mismo-. Ella negó con la cabeza frotando sus sienes. -a ver, ¿Realmente no puedes recordarme? Issei, soy tu hermana, crecimos juntos, estuve contigo siempre, desde que naciste hasta hoy-.

-pruebalo-.

-tu cumpleaños es el 16 de Abril, tomaste del biberón hasta los 6, siempre andabas desnudo por la casa de pequeño, amas el pastel de queso y tu colección de porno está en el armario de la habitación para invitados-. Ella enumeró cada cosa con sus dedos mientras hacía memoria. -tienes demasiado fetiche con dominación de perras de alta cuna hermanito-. Ella se cruzo de brazos con una mirada en blanco mientras que Issei tosió sonoramente contra su puño.

-¡Cof cof! Eso no prueba nada, s-son meras cosas superficiales-. Afirmó cruzando los brazos.

-hm...-. La rubia fijó sus ojos en los del castaño quien se veía apenado pero no del todo convencido, así que decidió...cavar un poco profundo. -amas pescar-.