Mi corazón dejo de latir. Estoy con nuestros recuerdos, con nuestros momentos, recordando, intentando saborear una vez más tus besos, rogándole a mi memoria que nunca pierda ni un sólo detalle de ti.
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Tras aquel incidente Annie estaba sería, ni siquiera le dirigía la palabra a su novio quien mientras manejaba se podía notar que estaba muy incómodo
— Annie escucha, perdón por mentirte de esa manera – respondió aquel rubio un tanto tímido a la respuesta de la contraría –
— ¿Porque debería perdonarte? No es la primera vez que me mientes de esa manera – respondió firme y sería mientras se encontraba en el asiento del copiloto – Porque desde que conociste a esa extraña has estado actuando raro ¿Te gusta o que?
— No me gusta Annie, solo la conocí por casualidad –respondio firme mientras tenía su vista al frente –
— Entonces ¿Porque siempre te la encuentras en todos lados? – fijó su mirada hacia el rostro de su pareja quien de inmediato frunció su mirada –
— Deja ya los celos de lado Annie, me fastidias – Armin cerró los ojos y se dió una cachetada mental por lo que salió de su boca–
— ¿Eso piensas realmente de mi? ¿Te fastidio? – la rubia bajo la mirada procesando lo que le había dicho el contrario–
Lo que restaba de camino hacia la casa de la chica fue un silencio bastante incómodo. Ninguno de los dos se dirigía la mirada o si quiera alguna palabra, el chico detuvo el auto en frente de la casa
— Annie – finalmente Armin decidió hablar, el se bajó del auto y se puso frente la chica, su mirada era algo seria– creó que lo mejor sería terminar, nuestra relación se ha vuelto complicada y lo mejor sería seguir adelante en caminos diferentes.
— Te deseo lo mejor Armin. Espero que el destino nunca más me vuelva a poner contigo – sin más la chica se dió vuelta y caminó hacía su casa –
Armin dió un gran suspiro, la ruptura con Annie en cierta forma le dolía un poco ya que llevaban un año de relación, pero ya llevaba un tiempo en querer decirle que quería terminar con ella, Annie en cierto punto era muy celosa y muy posesiva con Armin al cual a el no le gustaba para nada que fuera así.
Al día siguiente, Armin estaba preparándose para ir a la universidad, se ducho y se cambió la ropa, está vez se puso una camiseta en un tono de azul marino junto con unos pantalones en color negro, su cabello aún seguía húmedo así que solo lo frotó para que se acomodará, tomo su mochila y las llaves de su auto para así irse a sus clases.
Al llegar a las instalaciones el rubio se estaciona y al salir de su auto notó que venia otro vehículo en color negro a una velocidad sorprendente, casi atropella al rubio ya que aquel auto se estacionó a lado del auto del rubio, el chico de inmediato frunció su mirada, ya estaba preparado para darle un sermón al conductor que casi lo arrolla pero al mirar de quién se trataba su enojo se esfumó por completo
Era ella, salió de su auto maldiciendo el tráfico que había en la ciudad. Tenía su cabello suelto sin algún tipo de peinado, traía puesto un vestido en color beige junto con una cinturilla en color café claro junto con unas botas largas con algo de tacón del mismo color de la cinturilla y sin olvidar sus característicos lentes obscuros
