Ya nada volverá a ser igual.
𝗨n virus mortal surge en la
población de Seúl repentinamente
y más tarde se expande al
mundo entero.
Y es justo ahí cuando SeokJin y
JiMin encuentran a alguien q...
El público miraba espectante la presentación. El show ya casi había culminado y querían darle cierre a la historia.
Un suspiro.
Y de repente, la música empezó a sonar, y con ello, la voz del protagonista se hacía presente.
El público amaba su voz y sus movimientos, y claro. Se trataba de Park JiMin, un actor y bailarín que estaba ganando popularidad con esta obra musical.
La melodía era suave, era una balada triste en piano lenta, mientras la voz del rubio era bastante armoniosa y agradable para todo el que la escuchara, así como expresaba a flor de piel toda la emoción que reflejaba la canción con un baile lleno de sentimiento.
El musical que estaban presentando fue tan una obra tan exitosa que hicieron una gira de tres meses por todo Corea del Sur. Y obviamente, la estrella era JiMin.
Al final de la canción, el personaje lentamente se recuesta en el suelo y las luces del escenario van apagándose, dando a entender que el personaje había muerto.
La obra terminó, el elenco agradeció con una reverencia y se bajó el telón.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Ambos jóvenes iban caminando en silencio, despacio por el parque oscuro a unas calles del Teatro de Seúl.
—Por fin terminamos la gira.— habló SeokJin, queriendo iniciar la conversación.
—Ya era hora, después de 3 meses, ya nos merecemos un descanso. ¿No crees?— respondió JiMin.
—Sí.— asintió sonriente —No sé quién dijo que ser actor era fácil. ¡Vaya mentira más grande!— exclamó y JiMin negó sonriendo.
—Definitivamente no tienen idea de lo que están hablando.— le dió la razón a su amigo.
De pronto, SeokJin miró al cielo y lentamente su sonrisa se fue desvaneciendo.
—¿Por qué tan serio, Kim SeokJin?— preguntó en tono burlón al pelinegro intentando aligerar el ambiente, aunque ya se imaginaba la posible razón del cambio de humor de su amigo.
—Significa que volveré a casa...— respondió y bajó la mirada -Y de nuevo, no lo veré.— suspiró.
—Hyung...— dijo en voz baja y el pelinegro apretó los ojos tratando de contener las lágrimas.
—Hoy sería su cumpleaños.—
JiMin sabía que era una situación muy difícil para su mejor amigo —Siento tanto lo que sucedió...— respondió sincero —Va a aparecer, no podemos perder las esperanzas.
SeokJin abrió los ojos y miró al rubio con tristeza —Eso espero, Minnie. Lo extraño mucho. Siento que no hice lo suficiente por él, pude haberlo cuidado mejor.— se lamentó —Quizás... Tan sólo quizás, si hubiera estado ahí ese día, nada hubiera pasado.— dijo en un susurro.
