𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝗧𝗛𝗥𝗘𝗘

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Martes

Luego de haber tenido un día relativamente perfecto, siempre había algo que cagaba todo. 

Jeongin sintió intriga al haber recibido un mensaje de un numero desconocido, y mas aun cuando supo que era el mismo Christopher Bang quien le había escrito que se reunieran en una plaza cercana a su escuela. 

Dudó, pero aceptó. Al fin y al cabo era de los pocos días en que sus padres salían tarde del trabajo y se podía dar el lujo de pasear sin que lo regañaran al haber llegado 10 minutos tarde.  

Se sentó a esperar a Chan, quien llegó solo minutos después. No era reconocible a simple vista, de no ser porque este tocó su hombro ni se habría dado cuenta que ya había llegado. 

—Sin rodeos, debo llegar temprano a casa —dijo el menor, luego de saludar con las "cordialidades" correspondientes 

—Está bien —vio a Chan suspirar—te seré sincero y franco, se del favor que le pediste a Jisung... No quiero que te ayude 

Jeongin sintió que su boca iba a tocar el suelo. De verdad estaba sorprendido. 

—¿Por qué? —fue lo único que pudo decir

El mayor lo miró serio, su mirada daba miedo ―Tú... No sabes de los problemas que enfrenta, solo le estas dando una carga mas

—Él aceptó ayu-

—Lo sé —interrumpió de inmediato, irritando un poco al menor —Jeongin, Jisung... Ayer habló conmigo... No te diré qué porque no soy quien para divulgar sus problemas, pero estaba mal, ya lo he visto así y no me gusta tener que ver a mi novio sufrir, sobre todo si es por algo que NO le incumbe

El menor se quedo callado. No sabía que responder. Jisung era su única salvación y ayuda para aquello que lo atormentaba y consigo a Minho. ¿Podía ser egoísta?

Quería ser egoísta. Solo una vez.

—Dile a Jisung... —murmuró. Hizo una pausa para levantar su cabeza y hablar mas claro— dile a Jisung, que si él no quiere o no puede ayudarme, venga y me lo diga de frente... Lo siento Christopher. 

Se levantó y caminó para dejar atrás a Chan y su expresión de sorpresa e impotencia.

Se sentía mal, sabía que no era lo correcto, pero no estaba dispuesto a caer por un descuido, solo debía solucionarlo. 

Estaba ansioso. Miró la hora en su celular y suspiró de alivio, no había pasado mucho tiempo. Aun tenía una hora para disfrutar del día antes de encerrarse en su habitación. 

Mientras caminaba por las calles, pudo ver a algunos estudiantes ir y venir, ya era hora de que todos salieran. La única escuela que obligaba a los estudiantes a que se quedaran mas tiempo era la de Minho. Tal ves podría aprovechar la situación. 

Caminó unas cuadras mientras escuchaba una playlist de Doja Cat, tratando de recordar el camino hasta la escuela de su novio sin perderse. Pudo llegar apenas unos minutos antes de escuchar el timbre de salida. 

Se fue a una esquina cerca de la salida, donde podía ver mejor a cada estudiante con los que cruzaba miradas. Sintió su corazón bombear mas rápido cuando pudo ver por fin a su chico entre la multitud. Estaba hablando con unos chicos, uno tenía el cabello morado y poseía pecas, recordó las conversaciones con Minho y supo que ese era Felix.  

Cruzó miradas con su chico, se sintió mas feliz y animado cuando este le sonrió de vuelta. 

Se acercó, sus amigos detrás de él con intriga mientras que Jeongin solo podía morder su labio debido al nerviosismo. 

—H-hola Minho — ni él sabía por que habia tartamudeado, ahora se sentía estúpido

—Hola Jeonginnie —lo saludó de vuelta, dejando un beso en su mejilla izquierda. Ahora esa parte hormigueaba. 

—¿Jeonginnie? ¿Eres ese Jeonginnie?—escuchó la divertida voz de uno de los chicos de mas atrás— Creo que empezaré a ir a la iglesia...

—Cállate Felix—lo regañó el otro, cruzando sus brazos.

Tras todo el alboroto Minho dejó de admirar a Jeongin y suspiró al tener que presentar a sus amigos.

—Lo siento, no te he presentado a estos idiotas—rió

—Vaya forma de tratar a tus amigos, Lee Minho...

—Agh, solo... —exhaló— ellos son Lee Felix y Kim Seungmin, falta Changbin pero esta enfermo

Jeongin los saludó con una reverencia, sonriendo angelicalmente para no demostrar mas nerviosismo del que ya había hecho notar. 

—Pensé que nunca te conocería—dijo el pelimorado con burla— de todas formas es un placer

—Creo que es mi culpa no haberlos conocido antes—excusó el menor 

—Da igual, llegas en buen momento, íbamos a ir por unos helados ¿Quieres?

Jeongin se sintió algo incomodó. Obvio que quería ir y pasar tiempo con Minho, pero tal vez seria incomodo para sus amigos. Miró de reojo al chico a su lado, quien reconoció aquella expresión en el rostro de Jeongin. Estaba ansioso, nervioso, atosigado, como un niño buscando protección en su padre. 

—Dejaremos lo de los helados para otro día, iré con Jeong a su casa, nos vemos mañana —habló rápido para poder irse de una vez

Iban tomados de la mano, como cualquier pareja. Compartiendo sonrisas disimuladas y pequeñas risas. No eran una pareja común, pero ellos tampoco eran personas ordinarias, simples. 

—Me sorprendiste—dijo Minho, jugando con sus manos juntas 

—No tenia planeado ir a verte, pero creo que... Te necesitaba

La confesión repentina hizo a Minho tropezar con un pequeño bache y casi caerse, siendo atrapado por Jeongin, quien lo miraba asustado.

—¡TEN MAS CUIDADO!—lo regañó mientras se recomponía 

Minho lo miró sorprendido, pero con una sonrisa —repítelo

Jeongin se sonrojó —ten mas-

—No, lo otro

—Basta Minho, es tarde, debo llegar a mi casa —caminó dejando atrás a Minho 

—Vamos Innie... Solo una vez

—¡Ya! ¡Te necesito! ¿Contento? Ahora camina...

Fue arriesgado, mucho, pero era su primer beso en una situación fuera de peligro, fuera de aquella cabina... Minho saboreó los labios de Jeongin, mientras este suspiraba sin dejar de sentir su pulso acelerarse. 

ᨳ ݊ ˖ . O𝗛 𝗠Y 𝗚O𝗗    ࣪˖  ❪ 𝗺𝗷 ❫ ˑ ִֶָ 𓂃 ˚.ഒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora