MATRIMONIO POR CONTRATO

CAPITULO 35: AMIGAS

MATRIMONIO POR CONTRATO
CAPITULO 35
POR RUI

Al día siguiente que Emily regreso a casa ella estaba tranquila pero por la noche había tenido pesadillas las cuales la hacían despertar gritando, Aron solo podía abrazarla y hablarle para que se calmara solo así podía volver a dormir.

Esa mañana Aron despertó temprano y busco al mejor psicólogo que pudo para que viera a Emily.

Eran las diez de la mañana y Emily seguía dormida, Aron fue por el desayuno y lo llevó hasta la habitación.

- Hey dormilón, despierta.

- Aron!

- Shuuuu tranquila estoy aquí, estás en tu casa, estás a salvo.

- No sé si podré superarlo, anoche tuve pesadilla tras pesadilla, lamento despertarte.

- No tienes nada que lamentar, saldrás de esto.

- Gracias...

- Come, Fátima preparo tu desayuno favorito.

- Qué hora es?

- Son las diez...

- Debería ir a la escuela?

- ...

- No, ya perdí el semestre...

- No te preocupes por ello, puedes inscribirte en una escuela privada, solo has el cambio.

- Pero mis amigas... No puede ser! Lidia, Aracely y Karen! Que paso con ellas? Cómo están? Me olvide por completo de ellas.

- Tranquila, ellas están bien. Cuando las rescataron fui a verlas personalmente, cubrí todos sus gastos médicos y de terapias.

- Terapias?

- Si, ellas estuvieron yendo con una psicóloga, les ayudo bastante. Por ello pienso que tú también deberías ir.

- Crees que deba hacerlo?

- Si, te ayudará con tus pesadillas.

- Está bien. Iré.

- Esa es mi esposa. Te agende una cita para hoy a las 4 de la tarde.

- Me llevarás?

- Claro, te acompañaré. Y también irán tus escoltas.

- Escoltas?

- Si, jamás dejaré que estés sin supervisión fuera de está casa, descuida no los verás estarán vestidos de civiles para no ser percibidos.

- Gracias por cuidarme.

- Emily por ti haría lo que fuera.

Esa tarde Emily asistió a su consulta la cual sintió que le haría bien por lo que continuaría hasta que ya no lo necesitará. Al salir del consultorio ella pidió que la llevarán a ver a sus amigas. Se habían quedado de ver en su café favorito. Aron iría a su oficina a tender unos asuntos del trabajo pero dejó a su esposa bien vigilada para protegerla.

Al llegar al lugar las amigas ya estaban esperándola y al verla acercarse corrieron para abrazarla, las lágrimas bajaron por las mejillas de cada una, sentían por una parte alegría al reunirse de nuevo y por otra tristeza al recordar la forma en que se habían separado.

- Emily estas tan delgada.

- Tu cara está...

- Cómo estás?

- Yo estoy mejor, estoy con mi esposo en mi casa y hora estoy mucho mejor al verlas bien. Ustedes cómo están?

- Bien, gracias a la ayuda de tu esposo.