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Fui a por el coche, me costó menos de lo que esperaba. No sabría expresar lo que sentía al montarlo de nuevo, pero no para una carrera. Simplemente ir por la carretera moderando la velocidad, me era increíblemente difícil aguantarme las ganas de apretar el acelerador. Paré en un semáforo sonriendo mientras escuchaba Giants. Amaba esa maldita canción, se colaba dentro de mí sintiendo cada palabra. Me recordaba a mis padres, al hermano que perdí, a mi vida anterior. Pero actualmente me recordaba la dulce sonrisa de Avery, esas muecas de molestia por mi poca expresividad y esas maravillosas miradas cuando de mis labios salía unas palabras de afecto. El tatuaje de "Just say the word and I'll be yours" me lo tatué cuando aún esperaba un perdón de Nury para que volviera a ser él mismo de nuevo, volver a ser hermanos. Desgraciadamente nunca llego y ese "I will" que tatué más tarde era el que necesitaba de mi hermano pero me proporcionó mi actual pilar: Avery.

Bajé del coche frente a la residencia y sonreí arrogante a los estudiantes que miraban mi coche. Entré a buscar a Pablo encontrándolo comiendo mirando algo en la pequeña televisión de su cuartito.

—¿Puedo tener dos vehículos abajo?

—En teoría no, pero allá abajo está todo vacío así que sí...¿Dos?

Le indiqué que me siguiera fuera. Su mandíbula casi tocó el suelo al ver el negro mate coche.

—Te dejo aparcarlo abajo—dije moviendo las llaves frente a él.

—¿Enserio?

—No me lo rayes, simplemente. Déjalo al lado de mi moto. Te espero aquí.

—Jungkook, eres mi mejor amigo.

—Perdona, pero es el mío.

Harper pasó su brazo por mis hombros sonriente. No tardó en preguntar de dónde lo había sacado, así que aproveché el tiempo en el que me aparcaban mi coche para contarle mi aventura por el mundo de las carreras. No sabría definir su reacción, sorpresa no era evidente pero tampoco estaba decepcionado. No le di importancia, sólo seguí contando cómo acabé ahí logrando llegar al hecho que él no conocía aún.

—Siento lo de tus padres.

—No lo sientas, gracias a eso estoy aquí.

—Conociste a Avery.

—Tú también me importas, aunque menos.

Me golpeó el hombro antes de levantarse. Pablo me dio las llaves hablando asombrado del coche mientras yo miraba la figura de Harper acercarse a un par de chicos que salían de la residencia. Ese idiota se había vuelto importante para mí, y me aterraba. Después de lo que pasó con Taehyung se me complicó el confiar en los demás, pero también entendí la necesidad de tener un apoyo.

No sabría definir el ambiente que había en el salón. Avery hablaba por los codos mientras la película seguía su curso. Cuando volví me senté en el sofá frente a la televisión dejando que ella conversara en la cocina mientras preparaba algo rápidos para todos. No quería interferir en aquella visita, fueron a verla y yo sólo era el nuevo inquilino de su piso. Porque literalmente me la pasaba en su apartamento más que en el mío. Me gustaba verla desenvolverse con ellos, y más aún con ese acento en inglés. Me ponía, era un hecho que se lo había dicho varias veces. Ella lo usaba de burla mientras que yo casi rezaba por escucharla en inglés.  Volviendo al momento: película, ella se había acomodado sobre mí. Me tocó abrazarla mientras ella se acurrucaba en mi pecho. En el mismo sofá, en el otro lado estaba Loren atendiendo a su habladora amiga. Damon y Raily miraban la película pero escuchando a Avery.  Me daba dolor de cabeza, era como un audio a por tres, no paraba y no entendía nada. Puse mi mano sobre su boca y suspiré de alivio.

Giants - JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora