Atria: la leyenda de los elementales

Invitación inusual

- Ahora...! - dijo alzando la voz.

- oye, estoy cerca tuyo no tienes que porqué gritar - En respuesta solo rodó los ojos e hizo una mueca - ¿hay un elemental de agua aquí? - Me pregunto como si no fuera obvio.

- Si claro, que yo sepa tu lo eres, pero si no es así entonces no se - me miró con cara sería por cómo lo había dicho

- hablo de además de mi duende niñera - Otra vez diciéndome así...de niños siempre lo hacía y solo por el hecho de que molestaba.

- Mi nombre es Ema idiota, y no, no hay ma... - ya lo entendí, se me estába olvidando Atria

- vez?, necesitamos encontrarla o tu plan será un fracaso - a pesar de tener cara de entender, era todo lo contrario.

- Pero espera un momento, ¿Que fué lo que te pasó? - R4 estuvo apunto de irse hasta que mi pregunta detuvo sus pasos

- No sabes que es un hipnet - me miró con incomprensión.

- No

- lo que me acaba de pasar es un hipnet - dijo como si después de eso ya lo entendería, su cara obvia me hizo perder más de lo que estaba.

- Es cuando la naturaleza usa la magia para atraer a un elemental o en casos especiales a los humanos, comúnmente para atrapar a los fugitivos, luego de lo que pasó hace años ya no tenemos control sobre eso y esta lo usa a su conveniencia, acabando con cualquiera que esté frenando su búsqueda, y si no me hubiera resistido, eso me hubiera pasado a mi - Cómo habíamos pasado de ser elegidos para la salvación del mundo a ser la destrucción del mismo, nuestros ancestros están muy decepcionados al punto de acabar con la vida de elementales inocentes, todo por nuestro pasado.

- Ahora que lo pienso, esto ya había pasado antes - dije recordando aquella vez.

-Flashback-

Estábamos sentadas frente al lago que seencuentra en la frontera , era de noche y no había nadie además de nosotras , luché bastante para que me dejara quedarme junto a ella, solo pude conseguir estar ahí después de que su preciada floresita abriera sus pétalos, por razones que desconozco no le gusta que otros estén en su lugar secreto.

Solo me lo permitió porque era su cumpleaños y quería acompañarla ya que prácticamente se la pasaba sola estos días, Lina trabajaba todo el día y soy su única amiga.

Después de un rato, cuando Atria cumplió oficialmente los 14 años, el agua empezó a sacudirse y los árboles se revoloteaban por los fuertes vientos que se habían intensificado.

Intentamos salir de ahí ya que era casi imposible disfrutar de la vista con todo ese alboroto. Tomé la mano de Atria y caminé en sentido contrario al lago, pero esta se quedó parada ahí, tire del brazo pero no se movía asique me acerque a ella.

Estaba mirando el lago pero lo que me asusto fué que al ver sus ojos, estos estaban totalmente abiertos y brillaban más que la luna misma, no reaccionaba a ningún estímulo.

Antes de poder intentar hacer cualquier cosa, un camino de agua se formó en la tierra, llenando de barro nuestros alrededores. Rápido la tomé suavemente de sus hombros viendo que tenía la intención de seguir ese rastro, le llevó más de 5 minutos volver en sí.

Sus ojos volvieron a tornarse de un color café oscuro, su rostro palidecia un poco pero logró volver del trance. Tuve que inventar una excusa pero como todavía estaba sonñolienta nisiquiera pidió explicaciones.

Luego de llevarla a casa se quedó dormida y a la mañana siguiente había olvidado todo.

- Fin del flashback -