La niñera (Fred Weasley) |+18|

- Ya lo hice una vez...

Pases, vuelos altos y bluddgers locas volando por todo el campo, fue lo que tuvo Jeannette durante su entrenamiento.

Sus movimientos eran rápidos y sus anotaciones eran excelentes. Su escoba favorecía bastante en los movimientos que realizaba, al igual que Harry Potter, ambos tendrían bastante ventaja en el siguiente juego, si es que aceptaban a Jeannette.

- ¡Entrenamiento terminado! - gritó Angelina y todos descendieron su vuelo, aterrizando con sus pies. - Bien, Fred y George se quedan en sus lugares, al igual que Potter. De guardian se queda Ron, aunque necesito que te apliques, necesitas dar más en esto de proteger los aros, fácilmente fueron 15 los que te anotaron. Me quedo con mi puesto de cazadora, al igual que Katie. En cuánto a Jeannette y Alicia. - las miró a ambas. - Quiero que sepan que no me fue difícil escoger entre las dos, esto no quiere decir que si escojo a una, es porque la otra lo hizo mal, al contrario. Jeannette felicidades te quedas con el puesto, me sorprende la agilidad que tienes en capturar la quaffle y de igual manera en anotar. - ambas se sonrieron levemente. - Alicia, estás en el equipo pero como sustituto en caso de que alguna cazadora se lastime.

- Está bien, Angelina. Felicidades a todos. Les deseo mucha suerte. - habló la rubia y sonrió amplio. Jeannette se alivió al ver la reacción que tenía.

(...)

El banquete de la cena, estaba listo, Jeannette, Fred y George, disfrutaban de los platillos que se habían servido mientras hablaban sobre el entrenamiento.

- Señorita Lupin, tengo que darle una noticia. - la chica alzó la mirada y se encontró con la cara de sapo de Dolores Umbridge. - Me ha sido notificado que debido a la situación de su padre, debo mantenerla en observación constante y sobretodo bajo la luz de la luna llena. - Jeannette la miró bastante confundida. - No quiero que alguno de sus compañeros salga lastimado.

- Ammm... No tiene porque preocuparse, no soy un peligro. Ni una criatura de la noche. - sonrió con ironía.

- Está advertida señorita. - respondió Umbridge con su voz chillona y se fue.

- Está tipa si que es un dolor de cabeza. - susurró Jeannette para sus amigos y ambos asintieron. - Bien, debo ir a...

- La biblioteca. - dijeron Fred y George al mismo tiempo.

- Simpáticos. No voy para allá, debo terminar mi tarea, así que voy a la sala común. Los veo más tarde. - se levantó de su asiento y salió del comedor.

- Minerva cómo suma inquisidora, yo prohíbo expulsar a esos dos alumnos. - parecía que ambas profesoras estaban teniendo una discusión. - Todo estudiante mago tiene derecho a recibir educación en cualquier escuela, no importan sus actos.

- No puedo creer lo que estás diciendo Dolores, estuvieron a punto de cometer una violación a una alumna.

- Lo siento Minerva, pero la palabra es no y está vez el director no tiene poder sobre mi palabra. - dejó a Mcgonagall con la palabra en la boca y se fue.

La profesora vio a Jeannette parada justo enfrente de la puerta y la cara de preocupación que tenía la chica era tan notoria, que Minerva se conmovió.

- Tranquila señorita Lupin, no voy a permitir que le hagan daño. - el corazón de Jeannette dió un vuelco y sonrió con levedad, mientras seguía a su maestra con la mirada.

Pensativa caminó hacia su sala común y de pronto escuchó una tierna voz.

- Hola Jeannette. - levantó la vista y distinguió a una chica de cabellera blanca y pálida piel.

- Hola...

- Perdona que interrumpa tus pensamientos. Lo que pasa es que te reconocí y quise saludarte. - el tono de voz de aquella alumna, era tan relajante y tranquilo. - Supongo que no sabes que tenemos algo en común. - Jeannette negó con la cabeza algo confundida. - Supe de Peter que a ti te llaman lunática algunos.