LIONS AND WOLVES | Robb Stark

11 | EL LEÓN Y EL LOBO

—Esto no puede ser verdad.

Roose Bolton se paró frente a Robb, quien acababa de leer la carta enviada desde Winterfell. Joanna estaba de pie junto a su hombro, leyendo la carta mientras Robb lo hacía, y lo que vio en el pergamino la hizo sentir un poco enferma.

—Hemos recibido cuervos de White Harbour, Barrowtown y Dreadfort —dijo Roose—. Me temo que es verdad.

—¿Por qué? ¿Por qué Theon...?

—Porque los Greyjoy son putas traicioneras.

Parecía que Balon Greyjoy había rechazado su invitación para formar una alianza y había emprendido su propia misión. Theon, al parecer, también se había vuelto contra los Stark, ya que el cuervo enviado por el maestre Luwin les dijo que Winterfell había sido tomado por las fuerzas de Greyjoy.

—¿Mis hermanos? —preguntó Robb.

—No sabemos nada de ellos —respondió Roose—. Pero Rodrik Cassel está muerto.

Catelyn se quedó sin aliento, antes de decir en voz alta—: Te lo dije, ¡nunca confíes en un Greyjoy!

—Tengo que ir al Norte de inmediato —dijo Robb, poniéndose de pie.

—Todavía hay una guerra que ganar, Su Alteza —respondió Roose.

—¿Cómo puedo llamarme Rey si no puedo mantener mi propio castillo? —gritó Robb—. ¿Cómo puedo pedirle a los hombres que me sigan si no puedo...?

—Es un Rey —dijo Roose, interrumpiéndolo—. Y eso significa que no tiene que hacer todo usted mismo.

—Déjame ir y hablar con Theon —dijo Joanna, sabiendo que Theon siempre había tenido debilidad por ella.

—No habrá tal charla —respondió Robb—. Morirá por esto.

—Theon mantiene el castillo con un personal mínimo —explicó Roose—. Permítame enviarle un mensaje a mi bastardo en Dreadfort. Él puede reunir a unos cientos de hombres y retomar Winterfell antes de la luna nueva. Tenemos a los Lannister huyendo. Si marcha de vuelta hacia el Norte, perderá lo que ha ganado. Sería un honor para mi hijo traerle la cabeza del Príncipe Theon.

—Dile a tu hijo que la seguridad de Bran y Rickon es la prioridad —respondió Robb—. Y Theon... quiero que me lo traigan vivo. Quiero mirarlo a los ojos y preguntarle "¿Por qué?" y luego cortaré su cabeza yo mismo.

—

—¿De verdad te vas a casar con él? —preguntó Alayna, mientras Malia pasaba los dedos por el pelo de Joanna—. Quiero decir, te vas a casar con Robb Stark.

—Lo juro, si sigues diciéndolo, te lanzaré este espejo —dijo Joanna—. ¿Alguien te ha dicho alguna vez que te gusta hablar mucho?

—Sí —respondió Alayna—. Alden solía amenazarme con arrojarme desde la torre más alta del Darkhold cuando éramos más jóvenes, pero de todos modos, todo lo que digo es que ahora parece el mejor momento para una boda.

—¿Estás bromeando? —preguntó Joanna—. Justo anoche, Robb estaba exigiendo la cabeza de Theon y ahora estamos a punto de casarnos.

Alayna sonrió—. Bueno, siempre has sido propensa al drama.

—¡Lo dices tú!

—Sí, digo yo —respondió Alayna—. Pero bueno, si todo sale mal, al menos eres la Reina de una cosa.

—Si dices drama, entonces...

—Drama.

—Te odio.