Risas en la obscuridad - BakuTodo

Reencuentro U.A.

Bienvenidos a una nueva historia de terror.

Creo que esta vez he tratado de meter más cosas fantasmales que de monstruos como en la historia de ¨Pumpkin Night¨ que si no la has leído te invito a leerla en mi perfil, está completa y creo que te encantará.

¡Pero volviendo a lo importante!

Esto es rápido, quiero comentarles que esta historia es corta, tiene hasta ahorita 6 capitulos y el epílogo, los capítulos son largos a mi parecer, trato de no dar tantas vueltas para poder llevarte a ti, lector, al punto crítico de la historia, sin embargo espero lograr mantenerte atado a tu asiento en todo momento.

A diferencia de mi anterior historia, esta tiene ya un final, los capítulos están completos y no tardará demasiado en publicarse. Estaré publicando el día miércoles y domingo, esperando que antes del día 27 de noviembre ya esté completamente subida para ustedes.

¡También quería crear un video para esta historia! Pero mis habilidades del diseño no son tan buenas aún, así que tal vez por esta ocasión haré algo pequeño.

También si tienen alguna idea, alguna imagen, video o algo que les gustaría ver escrito en un fic, no duden en decirmelo.

Ahora tengo varias ideas, una de ellas será de un mundo virtual donde Bakugo y Shoto se conocen... y otro de Zombies ¿Cuál les gustaría ver?

Sin más demora, por favor, disfruta mucho de ¨Risas en la obscuridad¨, deja tus comentarios y votaciones, estaré encantada de ver lo que opinan o les gustaría ver.

Kaiden, fuera.

--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--_--

Reencuentro U.A.

Los movimientos de cadera se dejaban venir con violencia, sus piernas estaban separadas por la musculatura contraria, las manos apretando sus muslos con fuerza tal que sabía que quedarían marcadas durante un par de días. Era dificil contener la voz, aun cuando su diestra se ubicaba contra su boca tratando de amortiguar sus gemidos haciendo la misma función que las almohadas en el cabezal de la cama. La zurda estrujaba la superficie de la almohada, dejando que algunos cabellos rojizos se enredaran entre sus dedos.

—Mierda.. Shoto —La voz ronca y grave de quien era su pareja se dejó escuchar contra su oreja era un estimulo aún mayor contra el que no podía luchar, haciendo que sus gemidos mismos fueran mas audibles sin importar que tan fuerte apretara su boca.

Un llanto a lo lejos les hizo alentar por un segundo su placer para percatarse de lo que era. Si. Era él.

—Mierda, solo dame 30 segundos —Su amante no era egoísta ¿Pero 30 segundos lo matarían? No, pero a él si lo llevarían al cielo— Shoto... Espera —Pidió, pasando una mano por sus cabellos cenizos, empujándolos hacia atrás despejando su rostro, observando mejor a Shoto que poseía verdaderas intenciones de levantarse. 

Se rindió. Sacó su polla del trasero de su amante más a fuerza que de ganas, pero no podía, ambos estaban demasiado cerca del clímax. ¿Se enojaría por robarle 30 segundo más? Shoto se levantó apenas tomando la bata, no podía pronunciar palabra alguna cuando su orgasmo fue cortado tan de golpe, hizo el amago de caminar hacia la puerta siendo entonces detenido por su esposo, quien con su mano en la nuca, giró su cuerpo con facilidad y le devolvió contra el colchón boca abajo, culo alzado, abierto para él que no tardó en embestirlo con fuerza hasta que sus bolas golpearon su trasero.

—¡Ah Katsuki! —Si, un grito de placer y enojo resonó por unos segundos antes de volver a ser amordazado esta vez por una mano ajena a la propia.