Luego de la aniquilación de sus padres y la proximidad a alcanzar su edad adulta de 1.800 años, el príncipe Barcode de la Comunidad vampírica del Este, necesita una pareja para convertirse en rey.
Tras buscar al adecuado sin suerte alguna, entre los...
Tras pasarse una semana encerrados en la habitación, haciendo el amor y saciando su sed con litros y litros de sangre que Ta y Nodt les dejaban en la puerta, finalmente la pareja salió a la realidad.
Estaban felices y radiantes y aunque confiaban en que todo estaría tranquilo al menos un tiempo pues la noticia de su coronación había llegado a oídos de todos los clanes vampíricos de Tailandia.
Sin embargo, estos se toparon con algunos problemas de negación, como la insubordinación por parte de algunos empleados infiltrados, los cuales intentaron atentar contra la vida del rey moreno y su segundo al mando, aprovechando que una noche, Jeff salió con Nodt de reconocimiento.
También neófitos enloquecidos nuevamente fueron enviados pero enseguida fueron exterminados sin llegar a más.
Incluso hubo intentos de saqueos y robos en sus arsenales secretos de parches de elixir y armas con luz diurna pero gracias a la gran seguridad y la alta tecnología, nada conseguían llevarse.
Aunque la disputa más incómoda fue cuando seis meses después, aunque parecía que todos habían entendido el mensaje, Barcode mandó redactar en un nuevo libro con nuevas leyes y condiciones, las cuales algunos no estuvieron muy de acuerdo.
Aunque no duró mucho pues enseguida Jeff mostró su poca paciencia a los presentes y temblando aceptaron con rapidez.
No era que Barcode fuese partidario de esa praxis pero no tenía intención de detener a su esposo y terminar evaporizado, aunque fuera sin querer pues el neófito tenía aún más fuerza y rapidez que él.
También tenía mucho temperamento y entonces a Barcode se le ocurrió que podía estar extrañando su vida humana, por lo que consultando con Ta, llegaron a la conclusión de que quizás echaba deenos tocar y cantar en el club humano.
Era muy arriesgado que este fuese allí, así que para solucionarlo, el rey vampiro dispuso un escenario para que Jeff deleitase a todos con su linda voz y así sobrellevase mejor su tradición de neófito a vampiro.
Barcode se la pasó insistiendo durante días y noches para que cantase pero este no estaba muy convencido de su autocontrol.
...-Cielo lo harás genial. Tienes una preciosa voz, no te preocupes.
...-No sé, el público humano no es como el vampírico - Masculló Jeff inseguro.
-Hagamos una cosa, ¿De acuerdo?...prueba una canción esta noche y verás que te amaran y se les caerán las manos de aplaudir.
El neófito resopló y asintió.
-De acuerdo, te haré caso. Cantaré para todos.
La prueba fue todo un éxito y tanto los empleados vampiros como los humanos aplaudieron a Jeff llenos de emoción.
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