Lo que me faltaba

70 4 1
                                    

6 de mayo del 2015 :|

Soñé el fin del mundo.
No fue una destrucción completa, como todos lo piensan, se nos avisó que Dios venía, que era hora del juicio. Todos se preparaban para verlo, se vestían con sus mejores ropas y salían de sus casas. Nadie tomaba nada, nadie se preocupaba por cerrar las puertas porque sabían que de cualquier manera ya no regresarían a sus hogares, ya no importaba nada material.
Era el fin de la vida terrenal.

*Tristeza durante el día, casi a diario.
*pérdida de interés en tus actividades favoritas.
*sentimientos de culpa, temor o inutilidad.
*fatiga o falta de energía.
*dormir mucho o muy poco.
*problemas de concentracion.
*dolores sin causa aparente.
*sientes que no descansas.
*sensación de que todo pasa muy lento o extrañeza de tu entorno.

Todos los puntos anteriores son síntomas de depresión. Son los síntomas de depresión que presento.
Tengo un largo tiempo sintiéndome así, y la depresión ni siquiera figuraba una opción para mi hasta que vi los síntomas en la enfermería de la escuela. No le he dicho nada a nadie y hablarles de ello tampoco es una opción, mis padres se molestarían "lo que me faltaba" casi parece que escucho a mi papá. No quiero ser un estorbo para nadie.
Es extraño sentirse así, quiero que las cosas me importen, pero por mas que lo intento no logro tomar interés por nada, ni siquiera escribir o leer, ni la música hace que me sienta mejor; antes eran contados los días en que no escuchaba musica, y ahora no puedo recordar la última vez que de verdad disfruté de una canción.
Siento como si viviera mi vida desde un tercer plano, frente a las personas actuo normal, mientras que por dentro estoy hecha un desastre. Todo es un montaje de sonrisas y bromas falsas, solo un show.
Me veo en el espejo y apenas me reconozco entre tanto maquillaje; he cambiado, y lo sé porque ya no hago caras frente a mi reflejo solo para reírme de mi misma. Ahora trato de evitar lo mas posible los espejos, no me gusta ver en lo que me he transformado.
Todo es confuso, y cada vez que intento ordenar mi mente solo logro confundirme más.
Quiero llorar sin motivo alguno y, joder, es realmente frustrante.

Atte. Daniela.

Querido Diario...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora