Cuando la Luna estaba llena

Prólogo - Érase una vez...

Todo se empieza como en los cuentos de hadas, un Érase una vez...
En un pueblo alejado de la gran civilización moderna, donde los pueblerinos eran familiares, los campos eran cuidados y que la naturaleza aún tenían el gran respeto de los humanos, estaban rodeados de un gran bosque espeso, verdoso, lleno de vida entre su naturaleza cómo también de sus bellezas llenas de secretos, acompañado de dos montañas que estaban unidas bajo una cueva de gran misterio que alcanzaban la luna.
Cuentan las viejas historias de las ancianas del pueblo de Llena Nevada que siempre suelen contar a sus nietos e nietas más jóvenes, que siguen viviendo una raza de lobos blancos como la nieve, puros e nobles como lo eran los antiguos reyes, que protegen el pueblo desde hace miles de años bajo un pacto que, en sus profundidades, habitaba una vieja torre abandonada, que vivía allí no hace muchos años, una joven solitaria de gran belleza como su personalidad pura, junto a su madre, encerrada en la torre como los cuentos cómo Rapunzel, pero no todo lo que reluce es oro, por que esta joven también... Fue criada por los propios lobos de ese bosque por su bondad cómo su dulzura, era amada y querida por esos hermosos nobles lobos blancos.

¿Queréis escuchar esta historia, como empezó y como acabara? estar atentos, hijos e hijas del Sol, por que los antiguos hijos de la luna os lo relatará, esto... Va a empezar.