Luego de un rato volvieron al departamento de Jeongin, pues Minho necesitaba hablar con él, y su mánager sólo le había pedido que ya no saliera tanto del edificio porque podría ser peligroso ya que esta vez no hubo ningún guardaespaldas vigilándolo, por lo tanto, aún podía seguir viendo a Jeongin mientras no saliera.
— Entonces, Minho —habló el menor, quien no había dejado de hacer preguntas tontas por cualquier cosa desde que habían llegado—. ¿Qué es lo que querías decirme?
Minho había estado esperando que hiciera esa única pregunta para hablar, porque aún no sabía cómo mantener una conversación con Jeongin que durara más de diez minutos.
Desde que lo conoció, cada vez que hablaban, él siempre estaba repitiéndole una y otra vez lo mucho que lo amaba, y sino, estaba haciendo comentarios como el que hizo mientras aún estaban en la playa. Y no es que le molestara, ¿pero qué se supone que debía responder a eso?
— Acabo de decidir algo.
— ¿Qué cosa? —Minho le miró con una sonrisa extraña, y Jeongin no pudo descifrar el significado de esta— Vamos, sólo dilo.
— Olvídalo, seguro te pondrás a gritar como siempre. Es realmente molesto cada vez que lo haces.
Jeongin se cruzó de brazos y avanzó un poco más hacia él.— Prometo no chillar, gritar, o hacer cualquier otra cosa que se le parezca.
Tuvo que morder su labio inferior para no hacerlo cuando Minho acarició su cabello, acababa de hacer una promesa y no quería que se molestara con él por hacer ruido.
— Ya lo prometiste —esta vez pasó una de sus manos por su cintura, acercándolo un poco más, y al ver que nuevamente se mantuvo callado decidió soltarlo—. Bien, acabas de pasar la prueba, ahora sí puedo decirte.
Mientras Minho pensaba una manera de decirlo sin que sonara extraño, Jeongin trataba de contener su risa, le parecían realmente divertidas las expresiones que hacía el mayor en ese momento.
— ¡Ya sé! —habló Yang— Quieres invitarme a salir de nuevo, ¿no? Lo sab-
— Cállate, eso no es lo que iba a decir.
— ¿Entonces?
Minho suspiró.— Quiero intentar ser tu amigo —Jeongin le miró sorprendido, abriendo los ojos exageradamente y echándose para atrás mientras cubría su boca con ambas manos, casi cayendo al suelo—. ¿Estás bien?
Él no contestó, simplemente se mantuvo viéndolo en completo silencio. Minho comenzaba a cuestionarse qué tan buena idea había sido decir eso, pues pareciera que Jeongin se desmayaría en cualquier momento de lo emocionado que se veía ante la idea de ellos dos siendo amigos.
Probablemente aún no terminaba de procesar sus palabras, y era completamente normal, no todos los días Lee Minho te sigue hasta tu departamento sólo para decir que quiere ser tu amigo, era algo entendible.
— ¡Estoy perfectamente bien! —Minho cubrió sus orejas para no escuchar sus gritos, o él terminaría gritándole que se callara— ¡Este es literalmente el mejor día de mi vida! Tú, yo... —de pronto se quedó en silencio, y Minho quiso reír al verlo lloriquear luego de golpear su cabeza contra una repisa por saltar de la emoción.
Aunque ahora le parecía muy extraño pensar que hace poco más de un mes lo había tachado de acosador y ahora estaba pidiendo ser su amigo, porque si fuera él, seguramente lo habría expuesto en redes sociales y dejaría de ser su fan. No se supone que debiera seguir buscándolo.
— ¿Entonces? —preguntó nuevamente, a pesar de que ya sabía cuál sería su respuesta, después de todo, nadie podría negarse a él.
— ¡Claro que sí!
Jeongin volvió a acercarse e intentó abrazarlo, pero Minho fue más rápido y se hizo a un lado.
Al menos ahora podía decir que tenía un amigo.
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── fanzoned !
De Todomin + jeong ⚝ ¿qué se supone que debes hacer cuando tu ídolo, por quien tienes un leve enamoramiento resulta ser tu nuevo vecino y, además, no tiene permitido salir con fans? tratar de conquistarlo, por supuesto. ⚐ 〞𝗮𝗱𝗮𝗽𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 terminada...