Capítulo 9

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Hola a todos, ¿como han estado? yo lamento haberme desaparecido mucho estos meses, creo que estamos apunto de cumplir un año desde que no actualizo, pero para serles sincera es que no tenía la inspiración de hacerlo además actualmente estoy con mucha presión ya que estoy en mi último año de colegio y debo prepararme para la prueba para entrar a la universidad y con algunas actividades extras que tengo, así que no tenía ni el tiempo ni la energía de hacerlo, actualmente estoy en vacaciones aunque no me durara mucho, me queda una semana y media de descanso, así que aproveche para escribir los capítulos, les confieso que esta siendo un reto para mi hacerlo ya que como mencione anteriormente no tengo mucha inspiración y no se como seguirle al hilo de la historia pero estoy poniendo el 100% de mi en esto, así que espero que les guste este capítulo.

También se me ocurrio que en esta historia voy a hacer crossover de muchos manhwas tales como "Como poner a mi marido de mi lado", "La muerte es el unico final de la villana", "Un día me convertí en una princesa", "Los hombres de mi harem" y muchos más, mayormente serán manhwas que me he leido así que habrá muchos spoilers de los finales de estos pero habrá algunos que seguiran la trama por donde estoy en el manhwa.

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En el Imperio del Oriente ya estaba oscureciendo, y los invitados ya se encontraban en su habitaciones descansando por sus viajes pero en una habitación pasaba un poco de acción en vez de descansar.

— No se como me convenciste — comentó Navier sentada a ahorcadas sobre las piernas de Heinley con este teniendo sus manos sobre la cintura de Navier.-

— ¿Qué puedo decir? al parecer mi reina también deseaba esto — dijo con una pequeña sonrisa haciendo que Navier se sonroje tras lo dicho.-

— Callate — dijo dandole un pequeño golpe en el hombro haciendo que Heinley suelte una risa.-

— ¿Qué hago ahora mi reina, quiere que siga teniendo mis manos aquí o por aquí abajo? — dijo de pronto bajandolo haciendo que Navier se estremezca en sus brazos.-

— Y-yo no lo se — dijo esta con la cara sonrojada — tú eres el experimentado.

— Me duele que diga eso mi reina, usted sabe que yo la seguía esperando.

Comento este susurrando en su oreja para después besarla haciendo que Navier suelte un pequeño gemido haciendo que la sonrisa de Heinley se agrande, para que después sus labios poco a poco empezaran a bajar hasta el cuello de Navier haciendo que este le empece a repartir besos y pequeños mordiscos haciendo que los suspiros y gemidos de Navier poco a poco se escuchen.

Navier y Heinley haciendo estos actos "inapropiados" cada cierto de tiempo pero nunca llegaban tan lejos, solo se demostraban cuanto se extrañaron cuando alguno de los dos se ausentaba durante mucho tiempo o cuando sus hormonas estaban revoleteando pero aparte de las caricias y uno que otro movimiento para satisfacerse entre sí nunca cruzaron la línea. Pero parecía que esta vez iba a hacer diferente; Heinley recosto poco a poco a Navier en la cama quedando él sobre ella y siguieron besandose y poco a poco las batas con las que dormían desaparecieron.

— Mi reina....es-espera un poco — Heinley se detuvo y miró a Navier quién al igual que él estaba agitada — ¿e-estas segura de avanzar? si no quieres me detendre pero no quiero obligarte a nada — Heinley apartó la mirada sonrojado del cuerpo de Navier — a-aún estoy a tiempo de determe a tiempo.-

Desde otra perspectivaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora