Ligero NSFW, uso de medicamentos/inyecciones, no soy ningún experto en ellos ni en procedimientos médicos, esto NO DEBE USARSE COMO GUÍA NI REFERENCIA DE USO O CONSUMO.
!¡ Inspirado en un AU, Luzu Omega Recesivo y Auron alfa con sensibilidad a las feromonas. La historia obviamente no me pertenece y esto es solo una situación alternativa a lo que me imaginé al leer sobre omegas recesivos y su periodo de celo (una gran parte me la inventé, debo decir). Imaginen que son pareja hace algún par de meses. !¡
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Luzu llevaba días actuando algo... extraño.
Y con extraño se refería a que, los primeros días de los dichos, parecían haber vuelto al principio, porque de repente lo estaba alejando mucho. Y desde que comenzaron finalmente a salir había notado que Luzu se había abierto más a él, había logrado que demostrara algo de afecto y eso realmente alborotaba el corazón del alfa.
Y claro, no es como que le molestara, lo pensó y tal vez era por el estrés, por la ansiedad, tal vez el insomnio había vuelto a ser frecuente en el Omega y por eso lo estaba alejando, tal vez necesitaba algo de espacio o tal vez esperar a que estuviera más relajado para conversar de la actitud de su pareja predestinada.
Comenzó a tratarlo con más cariño pero bastante alejado, simplemente trataba de consentirlo sin hacer mucho contacto, lo acompañaba como siempre a sus clases y lo iba a buscar, lo llevaba a cenar y trataba de no tocarlo mucho, pues parecía estremecerse o incómodarse cuando lo hacía, y cuando iba a preguntar, simplemente le negaba todo, que todo estaba bien y que no tenía nada de qué preocuparse.
Obviamente eso no calmó sus dudas.
Hasta que los siguientes días, nuevamente, Luzu parecía molesto, pero esta vez, por lo contrario, por el propio alejamiento del alfa; porque por alguna razón, el Omega actuaba extrañamente meloso, buscaba mucho pegarse a él y tener mucho contacto con su alfa, cuando lo abrazaba para despedirse le costaba mucho alejarlo, cuando le daba ligeros besos para despedirse el contrario se le pegaba, lo rodeaba de los hombros y abria la boca dispuesto a robarle el aliento. Luego, simplemente se iba. Claro que esta actitud no le molestaba, pero comenzó a resultarle extraño cuando de un día para otro, volvió a la actitud incómoda y luego, al revés en un mismo día.
Y estas dos actitudes comenzaron a alternarse por unos tres días, días en los que Auron siquiera tenía tiempo para hablarlo con su Omega además de pequeñas charlas de 5 minutos cada que lo iba a buscar o llevar, pues tenía 3 parciales en su universidad esta semana, además de que Luzu se hallaba ocupado también por razones académicas.
Un viernes por la noche, luego de dejar a Luzu en su casa tras, de nuevo, una actitud incómoda por parte de su pareja, subió a su cuarto y simplemente se lanzó a la cama, confundido por la extraña actitud en su Omega hacia él.
