Un "pequeño" problema divido en 7

『6』

–Entonces ¿Qué quieren hacer?–

La líder y sus cinco pequeñas estaba en la sala, pensando en cómo matar el tiempo mientras.

–¡Hagamos un fuerte!–

–Un castillo, yo quiero ser un princesa– Dijo Nayeon.

–¡Sí!–Chilló Sana emocionada– ¿puedo ser una princesa? Mami–

–Todas son mis princesas–

–Yo quiero ser un feroz dragón– Se cruzó de brazos la menor de todas.

–Está bien, Chewy será el dragón que cuide nuestro castillo. Ahora, para hacerlo, necesitamos sábanas y almohadas así que cada una traiga de sus habitaciones–

Todas corrieron a sus habitaciones emocionadas, a excepción de Sana, quién sostenía la mano de su mami en todo momento.

–Mami–

–¿Hmm?–

–¿Por qué nos hiciste arreglar nuestra habitación si las íbamos a desordenar?–

Jihyo la miró con una expresión neutra. La verdad la pequeña tenía toda la razón y no esperaba aquello de la Sana de nueve años.

–Eh... Sana, amor, bueno–

Recordó como alguna vez en su infancia, le dijo lo típico a su madre, ese "¿Por qué tengo que tender mi cama si en la noche la voy a usar de nuevo?" Por fin entendía a su mamá.

°°°

–¿A Mina le gustará Chaeyoung?–

–¿Eh?–

Somi y Jeongyeon estaban sentadas en una banca, observando a las dos pequeñas mencionadas, jugar en un parque para niños que casualmente estaba vacío.

–Sí, digo... Yo, a veces leo esas cosas que suelen escribir los fans y que te digo, el ship de ese par es muy famoso–

Jeongyeon la miró con los ojos bien abiertos.

–¿De verdad lees esas cosas?–

–Sí, como dije, a veces... Es gracioso–

–Supongo, para mí es algo extraño. Pero volviendo a tu pregunta, no lo sé, Mina es muy retraída. A pesar de que tiene mucha confianza con nosotras, se guarda mucho de si misma para ella no más. Tienen química, sí, pero de ahí a saber si alguna de las dos siente o ha sentido algo... No lo sé–

Somi asintió. La respuesta de su mayor era buena.

–¿Qué haremos ahora?–

–¿Tienes el celular de Chaeyoung ahí?–

–Sí– lo sacó orgullosa.

–Ahora solo queda averiguar su clave y-

–¡Listo!–

–¿Cómo?– La mayor la miró curiosa– ¿Te sabes su clave?–

–Claro que sí, es: 240397–

Jeongyeon se detuvo un momento, ella creía reconocer ese patrón de números, pero no sabía exactamente de dónde.

–Dame un segundo, buscaré cualquier cosa sospechosa– La mayor quiso tomar el teléfono pero le fue arrebatado.