Capítulo 8. (Sin retorno)

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-Jeff.

-Dime.

-¿Quieres quedarte a dormir conmigo? -Jeff lo miraba con sorpresa.

-Sí quiero -Jeff regresó sobre sus pasos abrazando a Bible por la cintura y dejando un beso sobre su mejilla-. Vamos -ofreció su mano la cual Bible tomó de inmediato.

Bible miraba por la ventanilla del auto, la brisa nocturna golpeaba sus mejillas dejando una fresca sensación. Habían sido días realmente calurosos, así que no podía más que agradecer aquel viento fresco que se posicionó desde hacía ya muchas horas por toda la ciudad. Miraba las luces pasar, las hojas de los árboles se movían en un delicado baile siguiendo la pauta que el viento marcaba en ellas. Los autos a su lado transportaban a sus dueños a diversos lugares, todo se veía tan igual, pero tan diferente a la vez. Quizá se debía al buen rato que acaba de pasar, o tal vez su buen humor en mayor parte era causado por el chico a su lado, quien manejaba con tranquilidad mientras entonaba una canción, que ha decir verdad en su voz sonaba mucho mejor que su autor original.

Bible regresó la mirada hacia el conductor, contemplando sus finas y delicadas facciones. Sin duda Jeff tenía un perfil muy atractivo. Aquellos carnosos y bien definidos labios le confirmaban que arriesgarse un poquito por un beso bien valía la pena. Su pequeña nariz haciendo un cuadro perfecto en aquel rostro. Suspiró ante la aplastante belleza de su compañero.

-Uy, ¿Ese suspiro a qué se debe? -preguntó Jeff bajando el volumen de la música que sonaba.

-Nada en especial. Solo me daba cuenta cuan guapo eres.

-¿Hasta ahora lo notas?

Un golpe seguido de una risa relajaron el ambiente.

-Auch, ¿Primero coquetas conmigo y después me golpeas? Que formas tan raras las tuyas, Wichapas.

-Todo lo haces sonar tan...

-Tan qué, ¿Sexy? ¿Sensual? ¿Irresistible?

-Tan narcisista -ambos rieron ante la respuesta de Bible.

-No veo lo malo en aceptar y decir en voz alta las cualidades que uno tiene. Es como si te llamará narcisista porque digas que eres jodidamente sexy -una sonrisa de lado se formó en el rostro de Jeff.

Para Bible ser alabado era sumamente raro, por lo general siempre era él quien halagaba a los demás o recalcaba la belleza ajena, pero con Jeff todo era distinto. Sus mejillas se encendieron en un color rojizo, justo como la primera vez que Jeff coqueteo con él en casa de Build.

-Ahora ya no te ves sexy, más bien luces adorable -Jeff presionó con dos dedos las sonrojadas mejillas de Bible.

-Basta, Jeff.

La risa del mayor sonaba por todo el vehículo, Jeff volvió a subir el volumen de la música para continuar entonando, ahora la nueva canción que sonaba. Bible por su parte regresaba la mirada hacia la oscura noche, Jeff le provoca un humor agradable, era tan jovial y divertido que era difícil no ser arrastrado por su encanto.

Unos 15 minutos más tarde se encontraban entrando a la residencia de Bible. Una vez este abrió la puerta haciéndose a un lado para darle paso a Jeff, el ambiente se volvió un poco incómodo para el menor.

-Mmm..¿Q-quieres beber algo? -titubeó.

-No, gracias.

-Ok -jugaba con sus llaves con el nerviosismo a flor de piel.

-¿A caso estás nervioso, Wichapas? -preguntó Jeff acercándose a él.

-No, no lo estoy... Solo es un poco...

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