Bienvenidos a lo que se conoce como la ciudad de “Magness”, lugar donde si no eres hijo de Dios o la Virgen María estás condenado al infierno, pero no el que habitualmente conoces, sino que uno mejor; uno hecho por las rebeliones de la ciudad.
El Ateocalipsis y la Ateorebelion nacieron cuando la sociedad estaba pudriéndose en miseria (bueno, lo sigue haciendo, aunque ya más regulada).
Decenas de habitantes morían cada día y sólo el 70% de esos cuerpos descansaban en suelo digno. La iglesia católica se había apoderado de la tierra santa y exigía una cuota para que un alma pudiera reposar ahí, por otro lado, los cristianos y evangélicos cobraban por blablablas en los días de luto: sólo uno que otro cántico a Dios y cientos de oraciones que prácticamente decían lo mismo en otras palabras. Los de escasos recursos que no pudieran pagar aquellas prestaciones eran totalmente excluidos, pero los herejes o ateos; ellos simplemente no eran bienvenidos ningún día: ni de vida ni muerte. Sin embargo, no todo era malo, cuando ellos quedaban desamparados y sin lugar, traicionados por los suyos, las rebeliones ofrecían una oportunidad más. Aunque claro, como su nombre lo dice, eran corporaciones rebeldes contra los divinos que despertaban el deseo de aniquilar en los creyentes. La iglesia quería ver destruido a cada miembro de las rebeliones y, por ende, a ellas mismas que más que robarles a sus aficionados, les robaban su dinero.
Es por eso por lo que tuvieron que actuar de manera incógnita y estar casi totalmente invisibles dentro de Magness. Se vieron obligados a ser distintos a quienes eran como uno más en la ciudad: de allí nacieron los espléndidos trajes que los caracterizan y se distinguen de cada rebelión, así como de un simple ciudadano.Mientras ellos con Dios de su lado se hacían millonarios matando a sus integrantes; nosotros enriquecíamos tomando lo que nos dejaban y eso era lo que las iglesias no toleraban.
Junto a Magness se encontraba El Reino de Florián: el reino que nos gobernaba, ateísta, por cierto; y a los alrededores unos cuantos pueblos más, como lo es Gog-island y Gog-city.
La producción de las rebeliones era a través del comercio ilegal con nuestros vecinos. Se exportaban órganos naturales, pertenencias costosas y algunas partes humanas se vendían como piezas para el arte extravagante y cuando los creyentes supieron de ello mandaron a todos los posibles para derribar las corporaciones, sin embargo, cada integrante enviado que fracasaba en la búsqueda era aniquilado, considerado como un inútil o traidor.
Un ejemplo de ello fue mi madre y otros más a través de la historia que murieron a causa de los deseos e ideas estúpidas de los creyentes: los más recalcados fueron los Autofilios, pero ese es otro cuento.Desde que quedé bajo el cargo de Jureik, mi tío, tras la muerte de mis padres, junto con mis primos nos volvimos expertos en las negociaciones de las rebeliones y los más odiados de la iglesia católica, pero no fue hasta que llegó uno último que nos volvimos aún más famosos.
En cierta parte la Ateorebelión y el Ateocalipsis competían por la producción, aunque cuando precisábamos del otro éramos totalmente unidos. Así fue nuestro final... Luego de mucho, el odio entre creyentes y nosotros aumentó en una manera egoísta y sádica provocando así, cierto tipo de terrorismo ciudadano, tan potente que la iglesia se empeñó en demostrar su fe sacrificando a cientos de ellos y nosotros a nuestro imperio... «también sacrificando a los suyos».¡Fue tan divertido realmente!
Ver cómo un malteísta causó un verdadero escándalo... siendo para ellos un “ateísta”.¡Alguien que les recuerde qué es un ateísta!
Desde su aparición demostraron su propia ignorancia y conocieron a lo que llamaron “el SIR ATEO” ...
«Una guerra divina»
Y esto ha sido desde que tengo memoria: peleas, muertes, oraciones, procesiones, represiones, apodos, pobreza, desamparo, egoísmo, imitaciones, desapariciones, riqueza en los empoderados, cánticos al divino, diluvios (esto es mi exageración) en fin, sea como sea, buena o mala, loca o cuerda: This is Magness...
ESTÁS LEYENDO
𝐒𝐢𝐫 𝐀𝐭𝐞𝐨 & 𝐒𝐢𝐧 𝐒𝐞𝐧̃𝐨𝐫
Teen FictionDentro del Reino de Florián V se conoce una gran disputa por el papel de la verdadera razón entre las distintitas ideologías religiosas; donde pelean todas las iglesias contra las máximas rebeliones ateístas. Mattías Wilsson, un joven noble que viv...