Historias de One Direction y tu

Aceptado

Narras tu...

Estaba experimentando lo más confuso y desesperante de toda mi vida, aún no lo creo, ¿como es que fui a acabar aquí?

Me miré una vez más en el espejo, el peinado y el maquillaje estaban perfectos, mi vestido blanco y largo estaba a la perfección, me acomodé el velo y tome mi ramo de rosas, estaba segura que a partir de este momento todo iba a cambiar ¿cómo pude aceptar? Tal vez era por necesidad y no me quedaba de otra.

La empresa de mis padres había quedado en bancarrota, sus socios mayoritarios habían fallecido, en su lugar estaba su único hijo Liam al frente de todos. Él y yo siempre nos mirábamos desde pequeños pero nunca hablábamos, yo siempre me limitaba a ignorarlo y asía como sí no estuviera, en cambio él siempre me buscaba e intentaba darme obsequios los cuales yo siempre despreciaba.

Ahora estoy aquí, la vida dio una vuelta inesperada, yo nunca acepté el amor que le tengo a Liam y no lo aceptaré, menos por lo que ocurrió. Al quedar mi familia y yo en la bancarrota y los fuertes problemas de salud de mi padre la única salida que había era el apoyo a la empresa por parte de Liam el socio mayoritario. El accedió a dar su apoyo a nuestra empresa y ayudar con los gastos médicos de mi padre, pero la única manera de hacerlo era casarse conmigo. Me negué mínimamente como un millón de veces, no me quería casar y me sentía muy tonta, no conocía bien a Liam ya que siempre lo estaba evitando por más que el me buscara.

Al ver a mi familia y a mi en la ruina y mi padre cada día más delicado acepté la propuesta de Liam.

Ahora estoy caminando hacia el altar, no puedo sacar ninguna sonrisa falsa, Liam está al pie del altar luciendo perfecto como siempre y no me quita la mirada de encima, desvió la mirada de su rostro y sigo caminando. Al llegar al altar él me sonríe pero yo me niego a devolverle la sonrisa, me muerdo el labio inferior conteniendo las inmensas ganas que tengo de llorar y espero a que inicie la ceremonia. Al terminar la ceremonia se escuchan aplausos y Liam se acerca a darme un beso, no me aparto pero cierro los ojos y espero a que lo haga de una vez, pero en lugar de besarme en los labios deposita un dulce beso en mi mejilla, cuando abro los ojos me encuentro con esos ojos cafés que me miran con ternura, bajo la vista y escucho que me susurra.

Liam: vamos- susurró suavemente cerca de mi oído.

Me toma de la mano y comenzamos a caminar por el largo pasillo de la iglesia mientras todos nos ven. La fiesta es demasiado larga y no tengo ánimos, Liam permanece todo el tiempo a mi lado, mientras no decimos ni una sola palabra. Al terminar la fiesta sigue la noche de bodas ¿no? No estaba preparada para esto, Liam y yo ni siquiera nos habíamos besado, ni siquiera mantuvimos una relación de novios ya que todo esto fue demasiado rápido. Después de la fiesta nos dirigimos a "nuestra luna de miel" Liam había reservado una habitación en un hotel cerca del mar, pero nada fue como lo esperaba, al llegar era una habitación normal, él cerró la puerta y yo me puse nerviosa.

Liam: no te lo había dicho pero te vez hermosa- sonrió de lado

Tu: Em...gracias- tartamudeé revolviendome incómoda en mi lugar.

No me quitaba la mirada de encima y me sentía muy incómoda en verdad.

Liam: siempre te he amado, y he esperado toda mi vida para este momento- esbozó una pequeña pero linda sonrisa.

Tu: ¿esperaste toda tu vida para arruinar mi vida?- fruncí el ceño con incredulidad por su comentario.

Liam: no la he arruinado, creo que gracias a que te casaste conmigo la vida de tu familia mejoró ¿no es así?- inquirió enarcando una ceja.

Tu: tal vez, en cambio la mía no- murmuré por lo bajo cabizbaja.

Liam: sabes que te amo- volvió a decir de una manera más desesperada.