Una noche de tragedias

35 3 4
                                    

Disfrutaba de esta parte, realmente lo disfrutaba.

Jugar con las personas era fácil, era divertido y era barato, perfecta manera de entretención. Ya había incendiado algunos edificios porque seguramente era la única oportunidad que tendría para hacerlo de manera tan dramática.

Pero ahora veía al hombre que estaba inclinado sobre el terminal, revisando su juguete.

RECONOCIMIENTO DE COMANDOS, ORDEN ACEPTADA.

— Veo que el proyecto va bien.

— Tu, ¿Qué quieres?

— ¿No puedo solamente visitar, Chizaki?

— Tu nunca solo "visitas".

— Por eso me agradas, Kai, eres muy listo.

Vió la monstruosidad frente a el, una máquina antigua pero funcional que el había ayudado a los Yakuza a encontrar. Era maravilloso ver lo que Overhaul podía hacer con ella.

— Me encanta ver el proyecto.

— Odio esta cosa, soy un doctor buscando una cura, no un genocida.

— Aún.

— Repito, ¿Qué demonios quieres?

— Encontré tu "cura".

Eso llamó la atención del hombre pico de pájaro.

— ¿Dónde?

— Tokyo, Musutafu, un lugar de registros y eso; el hombre que actualmente la tiene cree que puede adoptar al monstruo.

Overhaul lo miró con odio.

— Ella no es un monstruo, es una víctima de una enfermedad.

— Igual que tú, igual que todos; pero a ti no te destrozan molécula a molécula todos los días, ¿O si?

Le entregó un papel con la dirección.

— Podrías interceptarlos si quieres, o podrías no hacerlo; tienes tres movidas, maldito pecador, puedes ir tras tu cura, puedes seguir con tu proyecto o puedes simplemente dejar todo esto, no te culparía si lo hicieras; es tan difícil ser un héroe entre necios.

— ¿Cuál es tu punto?

— Que sé que harás, sé ya cual es tu elección; porque conozco a los hombres como tú, Chizaki, conozco a los sádicos, a los asesinos, a los traidores que creen ser los justos en este mundo, los conozco por nombre, te conozco, Judas, y sé que harás lo que quiero que hagas.

Overhaul se quedó quieto, pensaba su siguiente movimiento, como siempre lo hacía; era inútil, siempre llegaba al mismo punto, pensaba todo, preparaba todo, pero era tan predecible.

Se fue, caminó lento, quería que lo viera irse, quería que lo viera.

— Tráiganme un auto, rápido, tengo que ir a Musutafu.

Predecible, muy predecible.

-----------------------------------------------------------

Shoto no esperaba que tuviera que usar su entrenamiento de rescate tan pronto, casi deseaba no tener que usarlo nunca.

El edificio se quemaba. Podía oír gritos, estaba corriendo en medio de las llamas, su cuerpo no sentía el calor, solo una ligera incomodidad.

Sacó a cuántos civiles pudo, pero no podía sacarlos a todos; intentó, pero no había manera, ponía estructuras de hielo para frenar el fuego y crear rutas de escape, pero el fuego no se detenía.

Otros Tiempos (AU MarvelxBNHA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora