La magia no está solo en los cuentos (1)

Capítulo 14: Deberes

- Eric, me ayudas
- ¿Puedes no poner esa cara de bebe y de no haber roto un plato en tu vida?
- No
- Es que me dan ganas de apretarte los mofletes
- Pues te muerdo
- Pues me enfado
- Anda qué necesitas
- En esta puta oración quién coño es el sujeto
- La literatura te puede
- Si, me amarga
- ¿Le has preguntando al verbo?
- Si y me ha contestado tú puta madre
- Para del sujeto hayar la estancia, deberás usar la prueba de la concordancia
- Como sigas siendo poeta, te voy a pegar en la bragueta
- Que basta eres
- El sujeto Eric
- Ellos, está omitido pesada
- Gracias
- Y ahora vete que me están llamando
- Mimimimimi, adiós
- Hola preciosa... Siii

Salí de allí intentado no vomitar, del asco que me estaba dando esa conversación de mi hermano con una chica seguro. Me tiré en la cama boca abajo y seguí intentando hacer sintaxis que se me daba horrible

- Eva, es para ti, resulta que tú móvil no está operativo
- No sé dónde está, ni si quiera se si tiene batería. Hola
- ¿Tu puto móvil?
- Hola a ti también Sam, ¿que tal tu sábado? El mío bien gracias por preguntar, estudiando sintaxis
- Si si si, ¿que le has hecho a Hugo?
- Nada, si le escribí anoche, pero como no sé dónde está mi móvil no sé si me ha respondido
- Le ha dado puñetazos a la pared y está ofuscado, dice que tú eres la única que tiene la solución y que es tu culpa. Ven a solucionarlo ahora
- Cojo la bici y voy
- Vale
- Adiós. Eric tu móvil
- ¿Que ha pasado?
- No se, algo le pasa a Hugo y Sam dice que es mi culpa y que vaya ya
- Venga que te acerco y me llevo a la rubia
- Gracias. Ayúdame a buscar el móvil y nos vamos
- Está ahí, pues nos vamos
- Gracias tete
- ¿Sabes que le puede pasar a tu no novio?
- No y no es mi novio, es mi mejor amigo
- Vale vale
- Pero no sabes que le pasa
- No, no sé nada
- Vale vale, no te pongas así
- Es que mi mejor amigo está mal, no se porque y supuestamente es por mi culpa
- Vale Eva ya está, ahora llegamos en breve y listo

Ignoré a mi hermano y me quedé pensando en que coño le pasaba a Hugo para que estuviera mal y Sam me tuviera que llamar. Llegamos y me baje corriendo del coche, Eric venía detrás gritándome que no debía correr, pero pasaba de el

- Hola
- En su habitación, yo me voy
- Evaaaaa
- Hola Eric
- ¿Te llevo algún lado rubia?
- Si, así dejamos a la parejita junta que solucionen sus problemas
- Venga adiós.- Subí los escalones de dos en dos y pique en la puerta de la habitación de Hugo.- Sam vete
- No soy Sam, soy tu amiga
- Eva no es buen momento
- ¿Venga Hugo, me vas a decir que no tienes tiempo para mi?
- Eva no me lo pongas más difícil
- Huguiti
- Pasa
- Ves, no es tan difícil, que le ha pasado a esa mano
- La pared se puso en medio
- Como a mi el cristal del baño
- Si
- Ven que te curo y luego me cuentas
- Me curas y luego me lo pienso
- Está bien
- Voy a por el botiquín
- Vale. Huguiti estate tranquilo
- Ya estoy aquí, toma
- Anda siéntate apoya bien la espalda en la pared
- ¿Que vas a hacer?
- Sentarme encima. Te voy a curar la mano
- Vale
- Me vas a contar mientras que ha pasado
- No
- No era una pregunta, me han mandado venir por algo Hugo. Yo estaba haciendo sintaxis
- Que coñazo
- Lo se, cuéntame
- Me estaba tocando o bueno por lo menos lo estaba intentando, pero no he podido, me he frustrado
- Vale, ¿por qué no has podido? ¿Tu madre?
- No ella no ha aparecido simplemente no se me levantaba, y no encontraba nada con lo que divertirme
- Me estás diciendo que no he has empalmado y que no has encontrado nada que ver que te ponga
- Si eso es
- Vale, pero has visto porno o simplemente has tirado de imaginación
- He visto pero como que sin más
- Ay rubito
- ¿Qué?
- ¿Qué piensas?
- Que solo puedo hacerlo y ponerme así contigo
- Claro que no Hugo, igual has encontrado tu excitación. Hay mil cosas más allá de ver porno, igual lo tuyo es la lectura
- ¿Leer?
- Si, lectura erotica. Tengo en el móvil el libro de 50 sombras de Grey pero narrado por el, te lo dejo y me voy fuera
- ¿Podré?
- Seguro, yo voy a hacer una cosa en la cocina y vuelvo
- Vale

Me baje a la cocina para dejarle un poco de intimidad y para preparar unos sándwiches, tenía hambre y Ana me dijo que siempre me debía sentir como en mi casa. Vi carne de cangrejo o surimi como se llame, mayonesa ketchup y lechuga por lo que lo pique todo a cuchillo, e hice salsa rosa se lo puse todo en dos panes. Los dejé en la nevera y mire a ver si podía subir, pero le escuché hacer ruiditos y decidí esperar. Al rato escuché abrirse la puerta y a Hugo ir al baño, por lo que pensé que podia subir

- ¿Y bien?
- Gracias
- ¿Quién te diría que lo tuyo es la lectura?
- Es fascinante, pero la lectura no es lo único
- ¿Ah no?
- No pero eso lo dejaré para mi
- Vale. Te he traído un sándwich
- Gracias. ¿Te puedo preguntar algo?
- Si, dime
- Tu y yo... Me ayudarás a algo más para poder estar "sano"
- Te he dicho que nunca nos acostariamos
- Pero no sabías mis problemas
- Me sorprende que tengas capacidad para vacilarme sexualmente y que luego seas así
- Ya, asi soy yo. Entonces no hay sexo ¿no?
- Aprende a disfrutar de ti y luego cuando sepas lo que te gusta y lo que quieres hablamos

Me sonrió y se puso a comer el sándwich. Yo me limité a copiarle y a pensar en lo que le había dicho a Hugo, tener sexo con el es el siguiente paso a que me perdiera, el me atraía y no solo por qué me lo dijeran las cartas, sino porque tenía todo lo que me gustaba el un chico, sabía escuchar, daba buenos consejos, no te interrumpía al hablar, y se podían hacer con el miles de planes mejores que tener sexo. También me encantaba de el que te preguntaba por tus cosas o tus inquietudes y te apoyaba en todo.
Sin duda alguna ser compatibles sexualmente era lo único que me quedaba para saber que estaba loca por él.