Brave. || Larry Stylinson.

c u a t r o.

Pasé un par de horas más con Eleanor en su departamento, hablando de Harry y otros asuntos mientras bebíamos té y esperábamos que las fotografías de nuestra cita se filtraran en internet.

Para cuando finalmente llegué a casa, sonriente y mucho más relajado que antes, estaba ansioso por ver a Harry para hablar de nuestra pelea de la noche anterior. Esperaba poder solucionar mi situación con él para besarlo en los labios y abrazarlo, ver películas como habíamos planeado hacerlo y simplemente disfrutar de su compañía por el resto de la tarde.

Al entrar a la casa, me encontré con que no había nadie. Había una nota de Liam y Niall en el refrigerador diciendo que pasarían la tarde juntos y supuse que Zayn ya estaría con Elizabeth en algún lugar, así que no pude evitar alegrarme al pensar que Harry y yo tendríamos la casa sola.

Subí los escalones apresuradamente y llamé un par de veces a la puerta de la habitación de Harry, pero no obtuve respuesta inmediata. Toqué de nuevo un par de veces más y, al no recibir una respuesta, me atreví a entrar.

Esperaba encontrarlo dormido en la cama, pero la recámara estaba vacía con excepción de su computadora portátil y un par de libros que no me molesté en revisar.

Escuché el ruido de la ducha andando, así que me acerqué hasta la cama y me tumbé en ella, mirando de reojo a la pantalla de la laptop y cediendo ante mi curiosidad. Me sentí mal por revisar la computadora de Harry, pero el malestar desapareció cuando me encontré con un varias pestañas abiertas en el navegador de internet.

La primera de las páginas era un sitio en Tumblr dedicado a One Direction, pero especialmente a Harry y a mí. Había fotos de los cinco y comentarios en relación a nuestras últimas apariciones, pero la mayor parte del blog era abarcado por imágenes de Harry y yo.

Había gifs de nosotros durante los videodiarios y la época de The X Factor en general, además de un montón de manips que me resultaba extraño ver. Las imágenes de nosotros tomados de las manos o besándonos estaban tan bien hechas que casi dudé que fueran algo más que obra del Photoshop y, si no fuera porque eran acciones que sólo ocurrían cuando estábamos a solas, hubiera creído que eran fotografías reales.

Me detuve mirando un par de fotos de nosotros durante TXF y no pude evitar sonreír ante lo obvios que parecíamos ser entonces: la forma en la que nos veíamos el uno al otro y las risas tontas que compartíamos. Me sentí casi avergonzado por lo necesitado que parecía estar de que Harry me pusiera al menos un poco de atención y las clásicas mariposas brotaron en mi estómago al ver todos esos recuerdos de nosotros jóvenes, apostando por una relación que no sabíamos si iba a durar pero que nos hacía sentir bien de maneras inexplicables.

Guardé un par de fotografías, incluida una de nosotros dos con Lux en la que Harry tenía la sonrisa dulce e inocente y sus ojos verdes brillaban con inocencia, tenía los hoyuelos asomándose en sus mejillas todavía regordetas y los rizos alborotados adorablemente.

Escuché a Harry tararear alguna canción de Kings Of Leon en la ducha y pasé a la siguiente pestaña del navegador.

Esta vez me encontré con una página dedicada a subir fanfiction.

No me detuve demasiado en esa pestaña, apenas leyendo palabras al azar y sonriendo por las fotografías o comentarios que aparecían de vez en cuando.