No quiero que seas mi alma gemela

Capítulo 8: Una vida que no quiero

NUevo capitulo :D siiiii

_______________________________________________________

La cita con Mariano fue... buena... en lo que respecta a una cita, pero detesto hacer esto, no quiero ilusionarlo de esta manera, se esta esforzando de verdad en todo esto y eso me hace sentir aún peor.

Fuimos a comer claramente atrajimos la atención a Mariano parecía no importarle, pero por una vez desearía no atraer la atención, sobre todo por que vi a lo lejos a Miguel enarcando una ceja.

Salimos del restaurante, Mariano me platico sobre lo increíble de la poesía y las canciones que creaba en base a estas, me limite a sonreír y asentir, de vez en cuando le daba alguna opinión tratando de mostrar interés, pero realmente... no me interesaba la poesía en absoluto.

Afortunadamente la cena llego y pude alejarme de Mariano y volver a Casita, me sentía tan agotada que solo quería ir a dormir, pero mis planes fueron detenidos por la abuela que me detuvo apenas atravesé por la puerta.

"Isabela cuanto me alegra que hayas regresado, ahora dime, ¿no es encantador?, estoy segura de que le gustas mucho" Suspire.

"Seguro..." Me quise alejar, pero la abuela me tomo del brazo.

"Isabela, hago esto por tu bien y por el bien de la familia" Quise rodar los ojos ya que era evidente que nadie será feliz con esto, a veces me pregunto si la abuela realmente piensa en mí felicidad.

"Voy a descansar avísame cuando la cena este lista" Abuela suspiro.

"Isabela, será mejor que aceptes esto por que pretendo hacer de Mariano tu esposo" Me congele ante esa afirmación, pero sabía que no podía decir nada.

"Lo sé" Me marche tan pronto como pude sin dejar que dijera nada más.

Me encerré en mi habitación y solo quería llorar y que alguien me abrazara... pero una cobarde como yo no merece ese tipo de consuelo.

Han pasado ya dos semanas, Abuela quiere empezar a organizar el cumpleaños de Toñito ya que será su quinto cumpleaños y hay demasiada expectación sobre este evento ya que se sabrá si Toñino recibirá un Don, abuela anuncio a Mariano como mi pareja oficial después de nuestra segunda cita y yo solo quiero esconderme en un agujero.

Mamá y Papá se rindieron sobre hacer cambiar de opinión a la abuela, Luisa no se meterá y sigue mandándome miradas amenazantes cuando hago comentarios a Mirabel que apenas me dirige la palabra, la única que me hace compañía en mi miseria es Dolores, que cuando nadie la ve va a mi habitación y trata de distraerme.

Hoy por suerte tuve el día libre y decidí escapar de casita antes de que mi abuela me obligue a tener una cita que no quiero con Mariano y su poesía musical.

Sali por la ventana y me dirigí al único lugar donde se que no me juzgaran o por lo menos no dirán nada de lo que diga.

De la manera más precavida ingresé y fui recibida por una mirada cariñosa y algo paternal.

"Veo que madrugaste un poco" Sonreí.

"Bueno tienes el honor de tener una gran compañía en tu bar a las ocho de la mañana Miguel" Miguel salió de detrás de la barra para pararse delate mío.

"¿Estas bien?" Me abrace a mi misma y suspire lista para hablar.

"No quiero ir en otra cita"

"Ya veo" Miguel sabia de mi situación ya que he venido aquí un par de veces desde que tengo citas con Mariano, Miguel claramente estuvo a un paso de ir a cantarle las cuarenta a mi abuela, pero lo detuve con mis vides y le dije que si él decía algo jamás podría regresar ni volver a hablar con él, luego de que se tranquilizó me sentó en el bar y me hizo contarle todo.